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Gwaihir
Gwaihir
Desde: 22/04/2000

#16 Respondiendo a: Anónimo

Más madera...

Sobre gustos no hay nada escrito..., o casi nada.
Lo que a tí, Deathlord, te parece una bazofia a otros les puede parecer algo genial. Una buena discusión siempre es algo gratificante, si hay buenos argumentos, claro.
Spielberg tiene buenas y no tan buenas películas, ahí no voy a entr...

A ti te va la marcha tío...

...y lo que pasa es que te gusta que te flagelen. la disciplina inglesa es lo tuyo.

Sobre Spilberg vs. Deathlord:

Lo de que El mundo perdido es una de sus películas serias te ha quedado genial; no te olvides de las cómicas como El Imperio del Sol y de las musicales como La lista de Schindler.

No soy un claro fan de Spielberg, aunque creo que está claramente por encima de la media. Pero querido amigo, para criticar por un lado a La lista de Schindler (por ejemplo) y poner en los altares a Braveheart hay que tenerlos cuadrados.
Y claro, hablando de moralismo, la mil veces nombrada Braveheart apenas tiene, ¿a que no?

Sobre Disney vs. Deathlord:

Me pasa algo parecido que con Spielberg; no, miento, me gusta menos en comparación. Pero, ¿con quién la comparamos?, con aquellos que durante años aprendieron todo lo que saben en ella y luego se fueron para formar sus propias empresas; empresas que luego hacen películas donde el espíritu Disney les sale por los poros y tienen la osadía de decir que son originales... ¡ja, ja!
O mejor, comparémoslo con la animación japonesa, porque de acuerdo, Akira y otras muchas son realmente buenas; pero de Japón salen también los mayores bodrios, las historias peor dibujadas y los efectos de movimiento más miserables que se han visto en muchos años en el mundo de la animación.
No tengo hijos, pero si los tuviera tengo muy claro que preferiría que vieran peliculas de Disney a subproductos como Bola de Dragón. Aunque eso sí, si quisiera regalarles con auténtico arte dibujado, les compraría videos y videos de los antiguos dibujos de la Warner.

"Si fui entonces, mi amor, iré de nuevo, dondequiera que estés. Tú eres todo lo que tengo, mi verdadero amor. Tú eres la Dama más valiente, el navegante más osado. Eres mía. Navegaste por mí. Eres mi dama, la Dama que llevó El Alma."
(Cordwainer Smith, "La Dama que llevó El Alma"