Sin duda

Ya he manifestado mi opinión al respecto en más de una ocasión, pero no me importa volver a hacerlo. Sam es natural, agradable, sensato, inteligente, valiente, bondadoso y, sobre todo, HUMILDE. Es de los pocos que hacen gala de tal virtud, sabiendo sobre todo la responsabilidad y el papel tan decisivo que asume en la obra.
Eso sí, no quiero desmerecer a ninguno de los demás. Gandalf es sencillamente espectacular, Aragorn es autoritario y ejemplar, Gollum es un villano que pasa por víctima, y Sauron es tan perverso como el mismo diablo. Un Saruman terriblemente ambicioso codicia unos reinos regidos por reyes que lo dan todo por sus ciudadanos...
Lo siento, voy a retirarme un rato a leerme el libro otra vez. Saludos.