Hay muchos detalles en las obras de Tolkien que reflejan acontecimientos de su vida, o al menos parecen reflejarlos... no siempre dejó constancia de ellos y en algunos casos incluso lo negaba a pesar de lo evidente del caso.

Un buen ejemplo de esto último es la asimilación de las arañas como entes malignos en su narrativa (Ungoliant, Ella Laraña, las arañas del Bosque Negro en el Hobbit). Tolkien afirmó en alguna ocasión que no tenía ninguna aversión especial por estos insectos, pero la verdad es que cuando era pequeño en Sudáfrica le picó una tarántula al pisarla cuando comenzaba a caminar.

Un caso importante es el que daría origen a la concepción del hundimiento de Númenor. La gran ola de color verdoso que los númenóreanos verían avanzaba desde el mar y que se tragaría Númenor era una imagen que Tolkien soñaba de manera recurrente.

O por ejemplo la idea original de Gandalf, que el propio Tolkien relacionó con un cuadro en el que se ve a un viejo de barba fumando sentado en tronco o algo así (no recuerdo el autor ahora mismo). Tolkien tenía una postal o algo así con la imagen de ese cuadro, y el mismo dejo constancia de que era el origen de Gandalf.

Hay una gran cantidad de ejemplos de este tipo, si tienes curiosidad por conocer más te recomiendo la Biografía de Humphrey Carpenter, en ella el autor recoge una buena cantidad de esas "realidades ocultas", como tu las llamas .