Ver publicación (En defensa de los exiliados)

Ver tema

Leandro
Leandro
Desde: 04/11/1999

#1 Respondiendo a: Anónimo

Hola a todos!

Quisiera hacer una pequeña reflexion sobre la obra de Tolkien y la importáncia que adquiere a cada unos de vosotros.

En este foro se habla sobre la obra de Tolkien, y cada uno tiene una forma de interpretar la obra, y aquí debatimos los distintos puntos de vista con respeto y edu...

Alguna cosa que quiero aclarar

Quiero aclarar una cosa, en lo que a mí respecta:

Por lo visto a algún miembro del foro con capacidad de expulsar a otros no le sentó bien que se criticara a un ficticio personaje de la obra de Tolkien, y se expulse a algunos miembros del foro utilizando unos argumentos poco convincentes.

Falso. Por completo. Yo no he utilizado mi "capacidad de expulsar" a nadie. No das nombres, pero hablas de mí, obviamente. Yo no he escrito a adminforo ni nada por el estilo. No me gustó para nada el planteamiento de la pregunta, y desde luego que sigo manteniéndolo, pero no presupongas que yo he utilizado ninguna influencia. Las expulsiones han sido por un motivo más que evidente, y ahora mismo estamos viendo que hay más de un nick registrado para la misma persona.

La respuesta de Adminforo, si llega, les llegará a los afectados en privado. Tu post no tiene ningún sentido aquí, porque deberías dirigirte también a adminforo.

Como decía, y por lo que veo, estás utilizando un doble nick... oootra vez. Y de la misma época que los anteriores... Yo ya he visto esta película varias veces (me refiero a la de "es que somos varias personas que escribimos a la misma hora desde el mismo ordenador, pero que no somos el mismo"), y no voy a entrar al trapo. A quien compete todo esto es a los administradores del foro. Quien acepta el registro en el foro, acepta que sus decisiones son las que sirven para esto.

Si quieres aclarar el asunto, dirígete a adminforo, y sé sincero. Yo lo haré así ahora mismo. Las movidas, déjalas fuera del foro.

Saludotes
El corazón de los hombres a menudo no es tan malo como sus actos, y rara vez tan malo como sus palabras. (J.R.R. Tolkien)