Aiya, bueno, aquí os dejo mis nuevos escritos, los que hayais leido los anteriores que escribí, se darán cuenta que me gusta poner palabras en boca de los personajes de Tolkien (este es le turno de Sam). en el 1ºse recuerda la salida de Sam y Frodo del antro de Ella-laraña. y el 2º, está claro, el capítulo de los puertos grises.
lo siento si os parecen tristes mis relatos. si habeis leido los anteriores, podreís ver q son del mismo estilo.
A Lómëgaur decirle q mi próximo relato se está preparando, pero como no tiene q ver con la T.M. , no lo mandaré al foro.
Namarië.

NUNCA MÁS
“Ya no quedan palabras para explicarlo, para explicar cómo me siento. Tan solo, tan perdido, tan desesperado, y no sé qué hacer; sé lo que he de hacer pero no sé cómo. Y el terror es el estandarte que señala el lúgubre camino que he tomar.
Y usted yace en el suelo, inmóvil, pálido, envenenado... muerto. Y he de zanjar lo que usted inició, lo que iniciamos juntos.
Cojo lo que necesito para continuar mi camino, me disculpo por sentirme como un ladrón; pero sé que usted lo entendería.
Ahora por delante sólo me queda un sendero con la oscura soledad a mi lado, y siento miedo, señor, tanto miedo.
Noto el cosquilleo de unas lágrimas escurriéndose por mis mejillas, goteando sobre su rostro. Ahora tengo que dejarle aquí, marcharme. Deséeme suerte.
Voy alejándome en soledad y en profunda tristeza. Pero al poco oigo ruidos, escucho voces; el miedo y la ilusión se apoderan de mí. Coro de regreso al lugar en el que le dejé y la visión que se presenta ante mí me encoge el corazón y le da un vuelco, me hace sentir una profunda congoja que me socava: criaturas, bestias inmundas alzan su débil y frágil cuerpo como si fuera un trofeo. Y yo, indefenso, me siento tan inútil al no poder salvarle, al permitirme el lujo de poder perderle.
Una pequeña luz aparece de entre las sombras al saber que la muerte aún no ha querido ser su amiga, ¡y que esas viles criaturas sean heraldos de la esperanza!
Yo nunca he sabido ser valiente, señor; y sin embargo, sé que no puedo quedarme como un maldito cobarde ante su incierto destino. Y, por un golpe de fortuna, brota en mí un estallido de valor desconocido, y ahora no soy el que antes era, ya no seré el mismo. Invisible como una sombra en la noche, lucho, aterro a esos infernales monstruos que en otro momento me hubieran horrorizado hasta helarme la sangre. Y le busco, le busco, señor, le busco y le encuentro; inmóvil, pálido, envenenado... maltratado.
¿Por qué fui tan tonto? ¿Por qué le abandoné tan pronto? Ahora hay que pagar caro el descuido. Pero no le dejaré ya nunca más, señor, nunca más.
Y ahora hay que huir, señor, huir hacia el horror de un fracaso casi seguro... hacia la muerte. Pero el camino parece iluminarse al verle caminar a mi lado, tan maltrecho, tan herido, tan desesperanzado... tan vivo.”

ADIÓS, SEÑOR FRODO
“Al fin hemos llegado a casa, al hogar. Ya toda tormenta está superada. Nos espera una vida tranquila, apacible, aquí, juntos...
Parece que ya nada puede perturbar este reposo, que ya todo está en calma. Pero no es así, ¿verdad? Ahora es usted mismo el que ya no quiere seguir así, y yo... no puedo entender por qué.
Decide marchar y me pide compañía, será por poco tiempo , ¿verdad, señor?
Emprendemos un último viaje. Caminamos por el mismo camino que tiempo atrás ya recorrimos; pero ahora es tan distinto, ya no huimos o, al menos, ya no huimos del mismo peligro... ¿de qué huye? Puedo ver en su rostro una tranquilidad inmutable, sublime; pero sus ojos no pueden esconder la sombra de un profundo dolor por el pasado. No merece la pena esconderlo, señor; no a mí, señor, no a mí.
Me pregunto, le pregunto a dónde vamos; pero su única respuesta no es más que una triste y melancólica sonrisa.
Entonces llegamos al fin del camino; el fin de mi camino, el principio del suyo.
Veo caras conocidas... tan familiares. El verlas, el recordarlas me devuelve a la memoria momentos tan mágicos, tan devastadores.
Le miro intentando buscar respuesta a todas las preguntas que no consiguieron respuesta mediante el habla. Y entonces comprendo, creo comprenderlo... ¡No! ¡No puedo entenderlo! ¡No quiero entenderlo y tener que resignarme!
¡No es justo..! La vista se me nubla y apenas puedo verle, apenas puedo mirarle a los ojos... ahora sé que nunca hallaré respuesta. ¿Es que todo lo que hice fue en vano? ¿no fue bastante? ¿no fue bastante el dar a entender que hubiera perdido mi vida por todo lo demás... por usted?
Nunca podrá entender cómo me siento; tan rechazado, ¡tan despreciado!, olvidado, castigado... solo.
Pero he de comprender que ha de partir, y sé que su casa, mi casa, nuestro hogar ya no será el mismo. Y que allí, a dónde va estará bien, estará mejor. Le darán cosas que aquí no tiene; pero ¿es que mi amor y mi esfuerzo no bastan? He de comprenderlo, pero no puedo, no quiero.
Y al fin llega la maldita hora del adiós y de la resignación. Un último abrazo, y me duele tanto el pensar que no somos los mismo que dieron el primero. Y sin embargo, sé que no estoy solo, quedan conmigo corazones nobles, espíritus fuertes; pero ninguno tan puro y marchito como el suyo, señor, si usted me entiende.
Sube a esa magnífica embarcación de brillante plata. Y usted no es más que una débil y frágil figura; tan pequeña al lado de los que te acompañan.
Y veo cómo se aleja y se sumerge el una oscuridad esperanzadora para tu alma herida. Y entre la oscuridad y las lágrimas, una luz tan brillante como el alba alumbra su camino.
Cuídese.
Adiós, señor Frodo.”

Es la primera vez que me meto en este foro. Así que aprovecharé algo que quería decirte para de paso darme a conocer un poco y hablar del porqué estoy aquí ahora.
Todo empezó hace ya mucho tiempo, poco para la historia de esta Tierra nuestra (la real) pero bastante para mi corta existencia. Siempre me ha gustado leer pero desde hace dos años, y debido al trabajo tan absorvente que tengo (por cierto, aburrido y devastador para mi espíritu) la oportunidad que tengo para leer se reduce a ocasiones esporádicas. Eso, lo que ha hecho es avivar en mi una necesidad cada vez mayor aunque al tiempo obsesiva de leer, y sobre todo de fascinarme con historias. Una de ellas, empezada hace muchos más años y desdeñada en el olvido por mi ñoñería, escasa capacidad de asimilación y por una frenética vida donde el caer en la lectura durante varias horas parecía desplazarse a un segundo lugar, era "la fascinación" echa libro, y como no, éste hecho obra de arte por la mágica mano de Tolkien. No voy a contar ahora invenciones y no entraré a relatar mentiras sobre "un día descubrí la imperante necesidad de volver a coger ese libro y devorarlo" nada más lejos de la realidad. Yo me quedé en el comienzo del segundo libro (las dos torres) y he de confesar hoy en día que el libro, como a tanta gente le pasaba, me pudo. Las narraciones eran perfectas, las descripciones maravillosas, las emociones rebosaban a cada página que pasaba, pero mi mente, no veía más allí, y con las disculpas a mi mismo de la falta de tiempo lo fui dejando en el olvido. Pero llegó alguien, un director de películas gores, que aunque buenas, no dejaban de serlo, y se propuso, y el no lo sabe, acabar de meter el hilo en la aguja, esa difícil entrada que yo no encontraba, y me reveló, eso sí, con su propio estilo, a parte de omisiones o cortes del libro original, que lo maravilloso no nos llega a todos por igual, no nos afecta de la misma manera, pero que si lo es, acaba por convencernos. Y me convenció que ese libro, esa historia inconmensurable, y ahora, admirada por mi, debía ser absorvida ávidamente por mi cabeza. Yo también había cambiado estos últimos años, mi capacidad para crear algo artístico nunca había sido a prueba, supongo, tal vez, por no planteármelo jamás y porqué quizás me apetecieran más otras cosas.....estudié ingeniería y todo lo técnico me fascinaba. No voy a decir que no lo siga haciendo pero hoy en día creo que hay algo por encima del saber, por encima de lo demostrable, de lo práctico. Creo que en mi aflora un nuevo espíritu, animado por el escaso tiempo que tengo a mi mismo, que quiere descubrir cosas nuevas, CREAR.
Por todo ello quería decirte Anein que me ha encandilado bastante tu escrito, la verdad es que yo también lo hago, quizá no de forma tan onírica, tan romántica, pero ciertamente mi cabeza se pierde a veces en mundo de fantasías porqué esté corazón no logra de la realidad nada más que la cruda realidad (y valga la redundancia). Me gusta el cine de autor de la cruda realidad, pero puede, puede, y no sé como quitármelo de la cabeza, inculcarme más imágines y más sentimientos un relato fantástico donde se entrecrucen la amarga realidad, la rotunda verdad humana con la otra gran verdad de cada uno de nosotros. Nuestros sueños, nuestras fantasías. Y en más medida si pueden llegar a ser creibles, tanto, que nos puedan llevar a la peligrosa franja que franquea (palabra encantadora utilizada por Tolkien en sus descripciones paisajísticas) lo verdadero de lo irreal. Por ello para mi Tolkien es importante, por ello la película de Peter es importante....también porque mi objetivo en la vida, aunque no sé como llegaré a él sea después de 25 años sin saberlo, dando palos de ciegos, escribir y en última instancia llegar a rodar películas (jaja, ya lo sé, suena a muy peliculero) ¡Pero que si no somos nosotros¡. A la mierda la realidad, que bastante la sufrimos cuerpo a cuerpo, y arriba a lo que de verdad piden nuestras mentes, fascinarnos o fascinar, ensimismarnos con obras fantásticas (bien hechas y que parezcan casi reales, eso si, es mi premisa) o fascinar nosotros a los demás (cuando nuestro proceso intelectual y creador haya aprendido lo suficiente y se sienta en condiciones). Disfrutar o crear. Y es por ello, querido/a Anein, que me encanta lo que haces, y también como lo escribes.
Pero, y por ello todo este rollo, a parte de por darme a la luz, quisiera decirte una cosa. Tienes lenguaje, tienes cierto tono atractivo en la forma de escribir, y una transparente imaginación, atrávete ya no sólo a modificar o completar trozos de la obra de Tolkien (que visto lo visto, y lo atrevido que es, parece salir a flote con buen resultado) y atrévete a crear tus historias propias, y a conseguir lo que de antenamo todos sabemos que a duras penas conseguiremos,........parecernos un poco a Tolkien, CREANDO FASCINACIONES que fascinen a otros, a futuros lectores, ávidos de nuevos Tolkien (aunque no podamos llegar a su talla) y de nuevas historias.
ESCRIBE......Y NO DUDES EN HACERLO A CUALQUIER HORA. Y ATRÉVETE CON HISTORIAS PROPIAS.
Sin nada más, este rollo de ensoñador, que como un crepúsculo que no alcanza a emerger, quiere salir de la oscuridad e iluminar a él primero, y después a los demás con lo que su alma pueda vomitar....................ESPERO QUE ALGÚN DÍA CON BELLAS HISTORIAS

(Mensaje original de: crepúsculo)

Gracias, la verdad es que tengo en mente una historia propia, pero no sé cuándo podré acabarla. Gracias x tu apoyo.
espero leer pronto tus relatos en el foro o donde sea.
Namarië.

P.D: soy elfa.

podrías decirme que hacer para meter los datos en la ficha. La relleno pero cuando paso de pantalla lo escrito ya no está. Y ya estoy harto de gastar imaginación rellenándola una y otra vez. Gracias de antemano

(Mensaje original de: crepúsculo)

cuando la hayas escrito dele directamente a volver al foro, se quedará guardado y podrás verlo cuando vuelvas. espero haberte ayudado.

Muy bonito¿los otros anteriores estan publicados en el foro?¿con que titulo?me gustaria leerlos..saludos

(Mensaje original de: Gala)

el útimo se llama "LAMENTO A GANDALF" lo mandé ayer, estará en la 2ª o 3º pág. los otros "A BERN" y mi favorito "A SAM", lo mandé hace bastante tiempo, si kieres los vuelvo a poner, pero creo q será mejor q los mande x correo elctrónico si t interesan, para no llenar le foro con cosas repetidas.
Namárië.