Ver publicación (He regresado)
Ver tema#15 Respondiendo a: Elfa Árwena
Está muy oscuro...
Esa luz!!!! Sigo teneiendo pánico a la oscuridad!!! ¿Alguien ve algo? Hiniglin... Dónde vamos? Que alguien ilumine esto por favor!!!! Nirnaeth, déjame el gusi-luz!!!
No tengáis miedo...
... que ya estoy yo... Tranquila Elfa Arwena, si quieres ya te cojo yo para que no te caigas...
Veamos... a ver si me acuerdo del camino éste... Es que hace tiempo que no venía por aquí ¿sabéis? La última vez que vine, Durin todavía no se había tralasdado a su otro chalet de la sierra y bueno... ya se nota que ha cambiado bastante ésto... Se diría que los Orcos no tienen muy buen gusto a la hora de decorar, no sé... yo, por lo menos, en mi casa no decoraría las paredes con tantos esqueletos secos... y todas esas armas oxidadas por ahí esparcidas por el suelo, entre más y más montones de huesos, tirados aquí y allá sin concierto alguno... fíjaos, muchos hasta están rotos ¡y roídos! Mmmm... De haber sido yo Durin, desde luego que no le habría alquilado mi mansión a una gente tan descuidada y, sobretodo, tan marrana, ¿qué queréis que os diga?. No me extraña que luego los demás pueblos tengan tantos prejuicios contra los Orcos, con unos hábitos tan sucios, pues ya me diréis. Creo que si iluminasen un poco más todo y esto y pasasen con algo más de frecuencia la escoba por estos suelos, como que estos salones lucirían más y mejor... darían una impresión más agradable a todo invitado e, incluso, intruso, como nosotros. Sin embargo, con tanta porquería cuesta bastante moverse. No sé ni como pueden vivir aquí, tiene esto hecho una cuadra. Viendo como está esto, hecho un merdé, apuesto a que se lavan semana no y semana tampoco... ¡por no hablar de la ducha! ¡éso ya debe ser cada año bisiesto!
Tal vez si cuidasen más su higiene... en fin... Estos Orcos, cosa que tocan, cosa que destrozan...
Hale, no os quedéis ahí parados, hombre... snif, snif, snif... mmm... este túnel me huele muy mal... mejor vamos por aquel otro... ¡ya lo dice mi primo Gandalf! ¡cuando los demás sentidos os confundan, confiad en vuestro olfato! ¡Uack... ! El único inconveniente es que el olfato no os ayuda a detectar los cascotes contra los cuales os podéis hacer polvo los juanetes... Cuidado, Elfa-Arwena, no sea que tropieces tú también... A ver, los explorados... veamos... ¡Eldaring y Serindë! Adelantaos un poco a explorar por allá... cuidadito no os vayáis a perder...
... que ya estoy yo... Tranquila Elfa Arwena, si quieres ya te cojo yo para que no te caigas...




En pie, aventureros.