Te haré caso

Yo es que cuando me pongo soy un poco catastrofista. Lógicamente, la reacción de la gente es digna de admirar, y más en unos tiempos en que, personalmente, los valores que tanto vemos reflejados en la obra de Tolkien me parece que flojean. Pero no puedo dejar de reconocer que, hoy día, cuando miro para el enano que tengo en casa, siento un poco de tristeza ante el mundo que le puede tocar vivir. En fin, dejemos los malos pensamientos y confiemos en la gente.

Sin embargo, lo de releer ese fragmento que mencionas, prefiero más dejarlo para otro día. Hoy me reafirmaría un poquito más en el "pensamiento deprimente". Quizás sea mejor adentrarse sobre temas más relajantes como, no sé, por ejemplo... las costumbres y aficiones de nuestros queridos hobbits, sin más.