Ver publicación (De nuevo ESdlA....)
Ver tema#1 Respondiendo a: Nienorand
Güenas:
Hace un par de días se hablaba por aquí de la magia de ESdlA y de Tolkien en general... pues bien, de donde nace esa magia ni los auténticamente hechizados lo tenemos claro, pero ... como dicen por aquí "haberla haila"... si no... ¿como es posible que cada cierto tiempo tengamos que volver...
¿Una droga? Puede ser... Lo cierto es que yo estoy bastante enganchad@.
Sólo he leído ESdlA completo una vez. No he repetido. A menudo leo algún capítulo, algún pasaje, alguna frase, alguna canción, pero sólo lo he leído entero una vez. ¿Por qué? Pues... No me he sentido con valor. La primera vez que lo leí completo fue... brutal. Eso de quedarme noches en vela devorando páginas, para después estar un tiempo "haciendo la digestión", para después volver... No sé cuando me percaté de la medida en la que me había impactado. Me dejó una huella imborrable en el corazón, pero aunque la sentía no podía verla, no hasta que pasó un tiempo. Ningún otro libro ha tenido el mismo efecto, y pese a que no he leído ni la mitad de la mitad de la mitad de la mitad de lo que me gustaría tampoco es que se me atragante la literatura, precisamente. Y no puedo explicarlo, pero hasta ahora he sabido, de alguna manera, que no debía volver a leerlo hasta que me lo pidiera. Sí, hasta que me lo pidiera él, el libro. ¿Respeto? ¿Miedo al desencanto? ¿Miedo a "gastarlo"?¿Deseo de disfrutar de sus maravillas sin interrupciones, tomándome mi tiempo, saboreándolo? Francamente, no tengo ni idea. Creo, simplemente, que hasta el momento presente no había vuelto a necesitarlo. Porque no hay día en el que no pase un poco de tiempo en otro mundo, en otro tiempo. No hay día en que no visite la Tierra Media. Y eso, supongo, me ha bastado hasta ahora.
Pero cada nuevo día empiezo a escuchar con más frecuencia una especie de canto de sirena dentro de mí, y cada vez que el sol muere aumenta un poco, de manera imperceptile. Es por eso, Nienorand, que vuestro mensaje me viene muy oportuno. Creo que empiezo a tener el mono. Sí, es algo creciente. Pero aún no voy a "chutarme", porque aún no lo necesito de veras. Esperaré a que llegue el momento, porque sé, no me preguntéis cómo, que sabré cual es el instante adecuado en el que debo agarrar en libro y saciar de nuevo mi pasión con él. Os ruego que no penséis lo que estáis pensando -_-.
Sí, ciertamente, me confieso adict@ en gran medida a la Tierra Media. No sé hasta que punto es bueno... Porque me permite disfrutar de la vida de una manera que probablemente me resultaría impensable antes de la lectura de ESdlA, y soñar como nunca había soñado, y mantener conversaciones, aunque sea escritas, con gente maravillosa, pero a menudo me siento como un alma en pena y un bicho raro y amargado, pues ese bendito libro despierta una melancolía que no se puede reprimir. Es, a un tiempo, látigo flagelante y fresca caricia en mi frente. A veces tengo miedo, y pienso que me volveré completamente loc@. Quizás esa sea otra de las razones de que no me haya aventurado de nuevo en su lectura.
De todos modos, no sé si lo he dicho alguna vez, pero no me volvería atrás jamás. Creo... creo que no es una droga. Creo que El Señor de los Anillos es el alimento del alma de algunas personas. Come nuestro cuerpo, y no calificaríamos el pan de droga jamás, ¿verdad? Es una necesidad. Para mí, El Señor de los Anillos es una necesidad del espíritu. Y, francamente, en los últimos tiempos mi espíritu está hambriento.
Bueno, buenas noches. Voy a calmar el hambre con la lectura de otro libro que me recomendaron hace algún tiempo... ya os avisaré cuando pase del entremés al plato fuerte. ^_^
(Mensaje original de: Daeránen)
Sólo he leído ESdlA completo una vez. No he repetido. A menudo leo algún capítulo, algún pasaje, alguna frase, alguna canción, pero sólo lo he leído entero una vez. ¿Por qué? Pues... No me he sentido con valor. La primera vez que lo leí completo fue... brutal. Eso de quedarme noches en vela devorando páginas, para después estar un tiempo "haciendo la digestión", para después volver... No sé cuando me percaté de la medida en la que me había impactado. Me dejó una huella imborrable en el corazón, pero aunque la sentía no podía verla, no hasta que pasó un tiempo. Ningún otro libro ha tenido el mismo efecto, y pese a que no he leído ni la mitad de la mitad de la mitad de la mitad de lo que me gustaría tampoco es que se me atragante la literatura, precisamente. Y no puedo explicarlo, pero hasta ahora he sabido, de alguna manera, que no debía volver a leerlo hasta que me lo pidiera. Sí, hasta que me lo pidiera él, el libro. ¿Respeto? ¿Miedo al desencanto? ¿Miedo a "gastarlo"?¿Deseo de disfrutar de sus maravillas sin interrupciones, tomándome mi tiempo, saboreándolo? Francamente, no tengo ni idea. Creo, simplemente, que hasta el momento presente no había vuelto a necesitarlo. Porque no hay día en el que no pase un poco de tiempo en otro mundo, en otro tiempo. No hay día en que no visite la Tierra Media. Y eso, supongo, me ha bastado hasta ahora.
Pero cada nuevo día empiezo a escuchar con más frecuencia una especie de canto de sirena dentro de mí, y cada vez que el sol muere aumenta un poco, de manera imperceptile. Es por eso, Nienorand, que vuestro mensaje me viene muy oportuno. Creo que empiezo a tener el mono. Sí, es algo creciente. Pero aún no voy a "chutarme", porque aún no lo necesito de veras. Esperaré a que llegue el momento, porque sé, no me preguntéis cómo, que sabré cual es el instante adecuado en el que debo agarrar en libro y saciar de nuevo mi pasión con él. Os ruego que no penséis lo que estáis pensando -_-.
Sí, ciertamente, me confieso adict@ en gran medida a la Tierra Media. No sé hasta que punto es bueno... Porque me permite disfrutar de la vida de una manera que probablemente me resultaría impensable antes de la lectura de ESdlA, y soñar como nunca había soñado, y mantener conversaciones, aunque sea escritas, con gente maravillosa, pero a menudo me siento como un alma en pena y un bicho raro y amargado, pues ese bendito libro despierta una melancolía que no se puede reprimir. Es, a un tiempo, látigo flagelante y fresca caricia en mi frente. A veces tengo miedo, y pienso que me volveré completamente loc@. Quizás esa sea otra de las razones de que no me haya aventurado de nuevo en su lectura.
De todos modos, no sé si lo he dicho alguna vez, pero no me volvería atrás jamás. Creo... creo que no es una droga. Creo que El Señor de los Anillos es el alimento del alma de algunas personas. Come nuestro cuerpo, y no calificaríamos el pan de droga jamás, ¿verdad? Es una necesidad. Para mí, El Señor de los Anillos es una necesidad del espíritu. Y, francamente, en los últimos tiempos mi espíritu está hambriento.
Bueno, buenas noches. Voy a calmar el hambre con la lectura de otro libro que me recomendaron hace algún tiempo... ya os avisaré cuando pase del entremés al plato fuerte. ^_^
(Mensaje original de: Daeránen)