No, no, no.

...Ayys, Miruvor, no digas esas cosas.

Yo me empecé leyendo el Hobbit cuando era pequeña y me pareció un libro genial. Me lo leí miles de veces y me sabía pasajes de memoria.

Después, siendo todavía pequeña, me leí ESDLA. No fué igual.
Me gustó mucho, pero mientras que el Hobbit me lo volvía a leer, ESDLA lo dejé unos añitos en la estantería.
Los niños saben perfectamente que el Hobbit es para ellos y en cambio ESDLA les gusta, pero hay muchas partes que se les escapan, no se entienden bien. Y prefieren el Hobbit.

Lo que pasa es que despues los niños tienen la mala costumbre de crecer , y entonces vuelven a coger ese libro gordote y lo redescubren. Entonces ocurre al reves, lees más veces ESDLA y el Hobbit lo dejas un ratito más en la estantería.

Una persona adulta que se acerque al Hobbit se da cuenta enseguida de que es infantil, pero a nada que sepa un poco de qué va ESDLA supongo que comprenderá que no es un libro para niños.
Digo yo que si los niños son capaces de captar la diferencia entre ambos libros, con más motivos lo notará una persona adulta, ¿no? (aunque si vemos el tipo de adultos que salen por la tele... casi mejor no digo nada... XDDDD)

Por supuesto yo recomiendo empezar a leer primero el Hobbit, luego ESDLA (con todos sus apéndices) y después el Silma.
Hay gente que después de leerse ESDLA no entiende cómo es que El Hobbit es así. Pero es que no se acercan con la mente de un niño a leerlo, eso es lo mejor del mundo y es lo que hace al libro lo que es, una obra maestra de la literatura infantil.
No sé si se nota que me gusta El Hobbit.

Un saludo.