El sentido común de Frodo

Esta cita pertenece a "Las escaleras de Cirith Ungol", cuando Gollum y los hobbits ven salir al Rey Brujo y su ejército de Minas Morgul:

Frodo esperaba, como un pájaro que ve acercarse una serpiente, incapaz de moverse. Y mientras esperaba sintió, más imperiosa que nunca, la orden de ponerse el Anillo en el dedo. Pero por más poderoso que fuese aquel impulso, ahora no se sentía inclinado a ceder. Sabía que el Anillo no haría otra cosa que traicionarlo, y que aun cuando se lo pusiera, no tenía todavía poder suficiente para enfrentarse al Rey de Morgul... todavía no. Ya no había en él, en su voluntad, por muy debilitada por el terror que ahora estuviera, ninguna repuesta a ese mandato, y sólo sentía aquella fuerza extraña que lo golpeaba.

Del mismo modo que Sam, Frodo no cede a las argucias del anillo. El problema es que Frodo ha de llevarlo mucho más tiempo que su amigo y al final, mina su voluntad y destroza su cordura: "entre mis ojos y la rueda de fuego ya no queda ningún velo". Prueba de esta erosión es, por ejemplo, en la cita de arriba ese inquietante: "no tenía todavía poder suficiente para enfrentarse al Rey de Morgul... todavía no".

(Mensaje original de: Brissa Baggins)