Ver publicación (Reflexión sobre la trilogía)
Ver tema#1 Respondiendo a: Anónimo
He leído y oído muchas veces quejarse a la gente (sobre todo fans de Tolkien) de que ciertos detalles de las películas relacionados con el tratamiento de algunos personajes, cambios, calidad técnica, etc. las estropean e impiden disfrutar de ellas. Por poner un ejemplo, creo que fue Elfa Arwena la q...
Sentimiento agridulce
Sí, eso es lo que siento ante las películas.
Ahora, cuando vuelvo la vista atrás y analizo lo ocurrido en estos cinco años, resulta que la inmensa mayoría de los buenos momentos se reducen a la que ha rodeado a las películas, a lo que me ha ocurrido, a lo que he vivido, a la gente que he conocido, a las esperas y las incertidumbres...
...pero las películas... ¡ay!... Peter Jackson me hizo llegar mis espectativas a lo más alto, para luego dejarme caer desde las alturas.
En las películas hay tantas zafiedades, tantas cosas mal hechas y/o absurdas, que jamás le perdonaré lo que podía haber hecho y no hizo. Las cosas buenas que tienen no pueden, lo siento, aliviar los muchos errores.
Oigo aquí y en otros muchos sitios hablar de lo espectaculares que son, que qué suerte hemos tenido por poder ver la Tierra Media... y es verdad; pero qué poco le habría costado mostrarnos la verdadera Tierra Media.
Me gusta mucho el cine, y también la lectura, y la gente que lo sabe me recuerda otras adaptaciones de grandes obras literarias que no han llegado a la altura, ni de lejos, del original (pongamos... uhmmm... El nombre de la rosa, por ejemplo). Mi respuesta es siempre la misma: No me importa lo que hayan podido hacer con otros libros, porque "mi libro" es El Señor de los Anillos. Con él he convivido más de la mitad de mi ya no corta vida, mi ha cambiado, y creo (modestamente) que me ha hecho mejor persona.
Por eso me molestan, o inluso más: me duelen las patochadas y las salidas de tono de Peter Jackson y compañía.
Lo dije en su momento y no me cansaré de repetirlo: para mí hubo un antes y un después del estreno de Las Dos Torres. En ese momento le perdí el respeto a Peter Jackson, porque me sentí traicionado.
Sí, eso es lo que siento ante las películas.
Ahora, cuando vuelvo la vista atrás y analizo lo ocurrido en estos cinco años, resulta que la inmensa mayoría de los buenos momentos se reducen a la que ha rodeado a las películas, a lo que me ha ocurrido, a lo que he vivido, a la gente que he conocido, a las esperas y las incertidumbres...
...pero las películas... ¡ay!... Peter Jackson me hizo llegar mis espectativas a lo más alto, para luego dejarme caer desde las alturas.
En las películas hay tantas zafiedades, tantas cosas mal hechas y/o absurdas, que jamás le perdonaré lo que podía haber hecho y no hizo. Las cosas buenas que tienen no pueden, lo siento, aliviar los muchos errores.
Oigo aquí y en otros muchos sitios hablar de lo espectaculares que son, que qué suerte hemos tenido por poder ver la Tierra Media... y es verdad; pero qué poco le habría costado mostrarnos la verdadera Tierra Media.
Me gusta mucho el cine, y también la lectura, y la gente que lo sabe me recuerda otras adaptaciones de grandes obras literarias que no han llegado a la altura, ni de lejos, del original (pongamos... uhmmm... El nombre de la rosa, por ejemplo). Mi respuesta es siempre la misma: No me importa lo que hayan podido hacer con otros libros, porque "mi libro" es El Señor de los Anillos. Con él he convivido más de la mitad de mi ya no corta vida, mi ha cambiado, y creo (modestamente) que me ha hecho mejor persona.
Por eso me molestan, o inluso más: me duelen las patochadas y las salidas de tono de Peter Jackson y compañía.
Lo dije en su momento y no me cansaré de repetirlo: para mí hubo un antes y un después del estreno de Las Dos Torres. En ese momento le perdí el respeto a Peter Jackson, porque me sentí traicionado.
"Si fui entonces, mi amor, iré de nuevo, dondequiera que estés. Tú eres todo lo que tengo, mi verdadero amor. Tú eres la Dama más valiente, el navegante más osado. Eres mía. Navegaste por mí. Eres mi dama, la Dama que llevó El Alma."
(Cordwainer Smith, "La Dama que llevó El Alma"
(Cordwainer Smith, "La Dama que llevó El Alma"