Ver publicación (Platón y Tolkien)

Ver tema

Elessar Léralondë
Elessar Léralondë
Desde: 26/03/2004
Estaban enterados de esto?

“Giges era un pastor al servicio del rey de Lidia. Un día, después de una violenta tempestad y de un temblor de tierra, se agrietó el suelo y se abrió un abismo en el sitio donde Giges hacía pacer sus rebaños. Asombrado, cuentan, Giges descendió al abismo y allí vio, entre otras maravillas, un caballo de cobre, hueco, con multitud de aberturas pequeñas, por una de las cuales introdujo Giges la cabeza y alcanzó a ver en su interior un cadáver de talla superior a la humana, que no llevaba sobre sí más que un anillo de oro en un dedo. Giges tomó el anillo y se fue. Los pastores solían reunirse todos los meses para enviar un informe al rey sobre el estado de los rebaños. Giges concurrió también a esta asamblea, llevando consigo el anillo, y tomó asiento entre los pastores. Por casualidad, volvió hacia adentro el engarce del anillo, y al punto se hizo invisible para los demás pastores, que comenzaron a hablar como si él se hubiese retirado, lo cual lo llenó de asombro. Entonces volvió con suavidad el engarce hacia fuera, y de nuevo se hizo visible. El hecho despertó su curiosidad, y a fin de saber si obedecía a una virtud propia del anillo, repitió la experiencia: cuantas veces volvió el anillo hacia adentro se tornó invisible, y siempre que lo volvía hacia fuera tornaba a hacerse visible. Seguro ya de la virtud del anillo, se hizo nombrar miembro de la comisión de pastores que debía rendir cuentas al rey. En cuanto llegó al palacio, sedujo a la reina, y entendiéndose con ella atacó y mató al rey, y se apoderó del trono. Pues bien, si existieran dos anillos semejantes a éste, y uno se le diera al hombre justo y el otro al injusto, no encontraríamos a ningún hombre de temple bastante firme para perseverar en la justicia y resistir a la tentación de apoderarse de los bienes ajenos […] Y no podría darse mejor prueba que ésta de que nadie es justo de buen grado sino por necesidad, y que el ser justo no es de suyo un bien, ya que el nombre se torna injusto desde el momento en que cree poder serlo sin peligro. Como dicen los defensores de esta doctrina, todo hombre cree, con razón, que la injusticia es más útil que la justicia.”

Platón (1977, ed. orig. 375 a.c.) República, 359d-360d Bs.As., Eudeba

Qué interesante, no?
One Ring to rule them all,
One Ring to find them,
One Ring to bring them all and in the darkness bind them,
In the Land of Mordor where the Shadows lie.