NARRACION

...Mithril apura el galope, al sentir un silbido que yo conozco bien, y el negro y yo apuramos el paso. Dejo el colgar el cuerno de su correa y mi mano va a la espada...hasta que en una vuelta de la espesura veo la imagen...un trasgo con una flecha en medio de los ojos, a Mithril y a mas gente, y a mi hermana con el arco aún en la mano con expresión de furia, que se funde en una ancha sonrisa nada más verme...

-Aqui estoy hermana, tu me llamaste...

Ahora estamos juntos, y horas mas tarde, mientras los cascos de Arog nuevamente tocan la tierra de Rivendel, vamos lado a lado disfrutando calladamente el habernos encontrado una vez más...