Ver publicación (Rolea un poco !!!)
Ver tema#583 Respondiendo a: ulbar
Accion
Ya es noche cerrada.La lluvia ahora es racheada por rafagas de viento.No se ve nada de nada.Pero al menos,parece que por fin vamos a algun sitio.Los dos hermanos de Rohan nos guian siguiendo el cauce del Isen.Al menos ellos parecen saber a donde van por que yo no se si vamos hacia el norte o...
Accion
Las gotas de lluvia sigue cayendo del cielo sin mostrar tregua alguna, cada vez con mayor intensidad. Mientras nosotros reímos sin parar por las tonterías que decimos, fararwyn se nos acerca alegre y jovial, para decirnos que no hagamos ninguno de nuestros numeritos como en Lórien.
- ¡A sus ordenes, sargento!- digo riendo cuando se da la vuelta, y no me ha escuchado- Bueno ulbar, lo siento, conocía una posada perfecta en Rohan... ¡Pero si fararwyn ha dicho nada de emborracharse, no nos vamos a poder emborrachar! Ups, vayamos a prisa, que a este paso no me voy a poder peinar las greñas...
Todos vuelven a reir contentos, mientras la lluvia sigue cayendo sobre nosotros sin alguna piedad.
- ¿Por qué llevamos cargando a la dundelina desde Moria?- me pregunta ulbar.
- No lo sé, supongo que es un souvenir- le respondo yo bromeando- yo creo que deberíamos soltarla o matarla, una de dos, y no creo tampoco que los rohirrims les tenga mucho cariño a una dundelina... a no ser que se la quieran...(ulbar y yo intercambiamos miradas y soltamos una estruendosa carcajada).
Mientras, veo que los ánimos de Miquel empeoran cada vez más. Parece ya casi moribundo, a punto de caerse o desmayarse en cualquier momento. Yo no puedo aguantar más la situación, con disimulo me coloco detrás de él y veo que la joya cuelga de su cinturon. Con mucha rapidez y disimulo, sin que se de cuenta, se la cojo. Delior, quién me ve, se acerca a mí y me dice:
- ¿Y ahora qué piensas hacer con la joya? Volverá a aparecer con él.
- No si yo lo puedo evitar.- le digo firmemente, y saco una poción de mi mochila. Roció la joya con la poción...- ¡Ah, como quema la hija de ****!
- ¿Qué haces Entaguas?- me pregunta Miquel desanimado, y al ver como su joya se derrite entre mis manos grita enfurecido- ¡PERO QUÉ HACES MALDITO ELFOOOO!
Yo tiró la joya contra el suelo que termina por consumirse. Miquel me mira con los ojos fuera de sí y yo vuelvo al lado de ulbar para bromear.
- ¿Pero qué esta pasando aquí?- dice el señor arnoniano.
- ¡Ya están haciendo otros de sus numeritos! Disculpen rohirs, pero es que son unos estúpidos...- dice fararwyn.
- Lo que pasa es que este maldito elfo me ha destruido mi joya, ¡MI JOYA!- dice Miquel enfurecido.
- Sí, casi me quemo las manos por ellos- digo yo sarcástico.
- Ahiii...- dice Miquel, que termina por desmayarse.
- Vaya, pues al final resulta que el mal que la joya tenía que causar, ya lo ha causado.- concluyo yo.
Las gotas de lluvia sigue cayendo del cielo sin mostrar tregua alguna, cada vez con mayor intensidad. Mientras nosotros reímos sin parar por las tonterías que decimos, fararwyn se nos acerca alegre y jovial, para decirnos que no hagamos ninguno de nuestros numeritos como en Lórien.
- ¡A sus ordenes, sargento!- digo riendo cuando se da la vuelta, y no me ha escuchado- Bueno ulbar, lo siento, conocía una posada perfecta en Rohan... ¡Pero si fararwyn ha dicho nada de emborracharse, no nos vamos a poder emborrachar! Ups, vayamos a prisa, que a este paso no me voy a poder peinar las greñas...
Todos vuelven a reir contentos, mientras la lluvia sigue cayendo sobre nosotros sin alguna piedad.
- ¿Por qué llevamos cargando a la dundelina desde Moria?- me pregunta ulbar.
- No lo sé, supongo que es un souvenir- le respondo yo bromeando- yo creo que deberíamos soltarla o matarla, una de dos, y no creo tampoco que los rohirrims les tenga mucho cariño a una dundelina... a no ser que se la quieran...(ulbar y yo intercambiamos miradas y soltamos una estruendosa carcajada).
Mientras, veo que los ánimos de Miquel empeoran cada vez más. Parece ya casi moribundo, a punto de caerse o desmayarse en cualquier momento. Yo no puedo aguantar más la situación, con disimulo me coloco detrás de él y veo que la joya cuelga de su cinturon. Con mucha rapidez y disimulo, sin que se de cuenta, se la cojo. Delior, quién me ve, se acerca a mí y me dice:
- ¿Y ahora qué piensas hacer con la joya? Volverá a aparecer con él.
- No si yo lo puedo evitar.- le digo firmemente, y saco una poción de mi mochila. Roció la joya con la poción...- ¡Ah, como quema la hija de ****!
- ¿Qué haces Entaguas?- me pregunta Miquel desanimado, y al ver como su joya se derrite entre mis manos grita enfurecido- ¡PERO QUÉ HACES MALDITO ELFOOOO!
Yo tiró la joya contra el suelo que termina por consumirse. Miquel me mira con los ojos fuera de sí y yo vuelvo al lado de ulbar para bromear.
- ¿Pero qué esta pasando aquí?- dice el señor arnoniano.
- ¡Ya están haciendo otros de sus numeritos! Disculpen rohirs, pero es que son unos estúpidos...- dice fararwyn.
- Lo que pasa es que este maldito elfo me ha destruido mi joya, ¡MI JOYA!- dice Miquel enfurecido.
- Sí, casi me quemo las manos por ellos- digo yo sarcástico.
- Ahiii...- dice Miquel, que termina por desmayarse.
- Vaya, pues al final resulta que el mal que la joya tenía que causar, ya lo ha causado.- concluyo yo.
¡Oh Orofarnë, Lassemista, Carnimirië!
¡Oh hermoso fresno, sobre tu cabellera qué hermosas son las flores!
¡Oh fresno mío, te vi brillar en un día de verano!
Tu brillante corteza, tus leves hojas, tu voz tan fresca y dulce:
¡qué alta llevas en tu cabeza la corona de oro rojo!
Oh fresno muerto...
¡Oh hermoso fresno, sobre tu cabellera qué hermosas son las flores!
¡Oh fresno mío, te vi brillar en un día de verano!
Tu brillante corteza, tus leves hojas, tu voz tan fresca y dulce:
¡qué alta llevas en tu cabeza la corona de oro rojo!
Oh fresno muerto...