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lo Miquel III
lo Miquel III
Desde: 08/06/2006

#428 Respondiendo a: Aravir

Accion

Namsis habia conjurado sobre el enorme tumulario, mientras nosotros intentabamos distraerlo un rato. La luz, habia desvanecido al espiritu... no sabia con certeza si era solo un truco del tumulario o si volveria a aparecer en cualquier rato, sostuve mi anket con ambas manos, desconfiando tot...

Accion

Namsis ahuyenta al tumulario, yo no bajo la guardia hasta al cabo de varios segundos. Al ver la cara de satisfaccion de la maga, suspiro aliviado. Entonces, Ulbar nos dice que "¡¡a correr!!", y eso hacemos el resto de la noche.
Llegamos a un valle, se asomaban los primeros rayos del sol, cuando una subita y agradable idea me pasa por la cabeza. Sin pensar, digo:
-Creo que ahora es un buen momento para ese trago de ron, ¿no creeis?- Rebusco en mi abrigo y en uno de sus muchos bolsillos encuentro el preciado liquido. Ulbar se me avalanza con unos ojos de sediento y le paso el ron.
-Pues si, creo que es algo que a todos nos vendra bien -
nos advierte Aravir. Al parecer cree que no hemos olvidados de los demás....aii, señor que cosas dice ese....
Pero al instante, una flecha surca el aire y cerca de mi preciosa y perecta nariz.
Maldito arquero de los..........el tio casi me mata y lo que es pero, casi le da al orde.
Entono entonces una serie de bien escojidas y selectas maldiciones y insultos al oculto agresor.

El insultado salta del árbol donde se esconde, Findon y Aravir lo cojen rápidamente y con fuerza.
-¡Lo tenemos!. - dice Aravir
¡¡¡Sí!!! Le tenemos, es más, le tengo. Agarro el hacha y la pongo en alto, con un rápido movimiento diagonal la hago caer directo al capturado (aparentemente elfo), pero los montaraces logran apartarle y mi Mithral se queda clabada en el suelo con mucha fuerza.
De pronto, el elfo se presenta.
- Mi nombre es Entaguas, soy un explorador al servicio de Cirdan de los puertos grises. Y mi mision, como podreis suponer, es montar guardia para vigilar los movimientos del enemigo.
Pffff....Pero será tonto...
-¿Enemigos?, ¿te parecemos enemigos?. -Salto yo.
-Calma. -me corta Namsis. -Tranquilizate, señor enano. No dudo de que tus excepcionales habilidades en combate, nos seran de nuevo utiles y necesarias. le decia mientras tocaba el hombro del enano.
¡Bah!
Me calmo un poco y saco mi pipa.
¿Un huargo?. -Pregunta al rato Findon a alguien, introduciendose en mis pensamientos.
¿Huargos? ¡Bien!
-Mas de uno. -Interviene Entaguas. -Posiblemente una patrulla enviada de caceria.
Cojo mi hacha y me preparo. Lo mismo hacen Ulbar y Aravir.
Entaguas, Ibal y Findon trepan a lo alto de tres arboles con sus arcos preparados. Y Namsis se coloca tras nosotros mientras nos dice.
-Voy a necesitar un poco de tiempo para prepararme. No quiero que ninguno de esas bestias me moleste.
-Te oigo y obedezco. Nada cruzara por aquí. Ni vivo ni muerto. - Más que nada, lo digo por mi mismo, pobre lobos...
Aravir y Ulbar me sonrien, ¿por que será?
-¿Puede saberse a donde creeis que vais?. ¡¡Escoria maldita, estamos aquí esperandoos para destriparos a todos!!.

Los huargos llegan de súbito, son varios, tres de ellos caen muertos a la ordén de los arcos de nuestros compañeros.
Ulbar esquiva la hoja de un orco... un jinete y su bestia se lanza sobre él,
-¡Atencion!- oigo griar a Ulbar. No le presto atencion, estoy suficientemente entretenido.
-¡Ahora me toca a mi!. - grito, mientras elimino a un par de bestias con mi hacha.

-¡Os debo un par de botellas de vino! - jajajajaja
--¡Tu lo has dicho, no creas que lo voy a olvidar!. - Dice Ibal, apresurandose a darle la mano para sellar el trato.
-¡Estoy lista, quitaos de en medio!- nos advierte Namsis... Nos apartamos, con la seguridad de las flechas de nuestros amigos.
-Enyar súrë ar rúnya!
Solo puedo pensar una cosa: Uau. Una ola de fuego arrasa a los huargos y sus jinetes, es evidente que Namsis es una gran maga.
De pronto, Findon salta de su árbol empuñando su daga y gritando
-¡Ahora, a por ellos sin piedad!.
Ataco y remato a los orcos que aún viven.
Dejo por el suelo los orcos que he matado, desperdigados opr todas partes, y me siento bajo un árbol, para fumar un poco...
Me encuentro mal,
por favor, llevadme a un bar.
Yo no me encuentro nada bien,
Llevadme a mí también.
Sé de un lugar donde hacen una poción
que da fuerza al espíritu, enaltece el corazón.

¡¡Alza tu cerveza, brinda por la libertad, bebe y vente de fiesta, el infierno es este bar!!