Ver publicación (Hola)

Ver tema

Entaguas
Entaguas
Desde: 21/04/2005

#439 Respondiendo a: lo Miquel III

Accion (¡Muahahaha!)

Tras dias de marcha, al fin llegamos a la civilización. Pero no una civilización cualquiera, se trata de la civilicazion elfa, la gran civilizacion. ¡Bah!. Elfos ¡bah!. Vamos andando pausadamente y con calma a través del camino de baldosas (amarillas, que raro, ¿no? ), y no t...

Accion (¡Muahahaha!)

Tras exhaustos días de marcha, en la que la compañía jadeaba cuales caballos. El enano jadeaba especialmente, y todos captamos cierto tufillo que desprendía. Sudaba demasiado. En eso me recordaba a un compañero montaraz, del reino de Gondor, que le llamaban Camacho, que sudaba de la misma forma que el enano...(un nombre un poco raro para un montaraz, ¿no? ). Pero tenía que reconocer que yo también estaba cansado. Con mi vista elfica, ya veía Mithlond. De hecho, ya vemos varios centinelas elfos en los árboles. Uno de ellos me para. ¡¿Pero cómo se atreve?!
- ¡Alto!- me dice el joven elfo- ¿Quo vadis?
- ¿Qué dices?- le respondí yo a su extraña pregunta.
- Perdona, es que me he atragantado. Quería decir que a donde vas.
- ¡Soy Entaguas, hijo de... hijo de... hijo de...- ¿Eh? ¡Es normal que a un elfo se le olvide el nombre de su padre! - ¡Lo más importante es que soy Finfuingil Entaguas, bajo las órdenes del general Falatrar! ¡Traigo noticias importantes! ¡Si no me dejas pasar, te abrirán un histo...!
- ¡Está, bien, disculpe, señor!
¿Señor? ¡Maldito elfo novato! Yo todavía soy joven. ¿Señor? Desde luego, es que el puesto de centinela se lo dan a cualquier jovenzuelo elfo(y mira que tiene que ser estúpido el joven elfo para haberse tragado lo del general Falatrar, elfo que ni si quiera existe...)
Finalmente, llegamos a Mithlond. Los centinelas, dos lanceros, me saludan y yo hago lo mismo. Ya los conozco de sobra, aunque hasta ahora no los había conocido sobrios... la razón por la que esten ahora sobrios y no borrachos como siempre, me aterra.
Finalmente llegamos al cuartel. Allí informo a mi superior de todas las noticias.
- ¿Conocéis el camino a Gondor?
- Maese ulbar y yo somos del reino- respondió orgullosamente Îbal.
- Estupendo, porque vais a tener que ir hacia allí. Os daré unos caba...
-Sí, sí, pero antes disculpe. Tengo que hacer con mis camaradas una visita turístico-tabernera por la ciudad. Denos un día.
-No puedo. No hay tiempo. –dice el general.
-Bueno, pues una docena de cervecillas rápidas y me tiene aquí fresco, bueno fresco, preparado para cabalgar. –suplica Miquel.
-Está bien, pero dense prisa –dice mi superior, al fin.
Tras esto, Ulbar y Miquel salen rápidos del lugar.
- Calma, chicos...- les digo yo.
- ¡NO! ¡CALMA NO! ¡CERVEZAAAA! ¡AAAGHSSSS!- dice el enano. Casi se le cae la baba. Aunque Ulbar no ha dicho nada, realmente, en sus ojos parece haber reflejada una cerveza.
- Oye Ulbar, lo que te he dicho es cierto. ¡No se te ocurra acercarte a ninguna de mis camareras!- le digo al gondoriano riendo.
- ¡Ya veremos! ¡Apuesto a que ligo más con ellas que tú en toda la noche!- me responde.
- ¡Juas, de acuerdo!- le respondo riendo.
- ¡Bah, no hagáis tantas apuestas! ¡Cuando me vean a mí, se van a derretir!- dice el enano orgullosamente. Ulbar y yo estallamos en carcajadas.
- ¡Es verdad!- dice ulbar casi con lágrimas de risa- ¡La barba del señor enano tiene un poder sensual que atrae a todas las mujeres!
Menos mal que llegamos al bar, porque estabamos a punto de explotar de risa. Aunque yo esta vez estoy menos calmado, allí tienen cierto cachondeo con la barra del bar y el señor enano.
- Controlaos- digo yo de repente- no olvideis que aquí esta... esta... ¿Donde está Namsis?
- Allí está con el señor enano... ¿No está con el señor enano? ¡Que raro! ¡Ah, pero si aqui viene con varias cervezas! ¡Je,je,je,je!
La cara de Namsis al oír el comentario de Ulbar no tiene realmente desperdicio. En ese momento, el señor enano parece tener algún que otro problema... la cosa se tensa. De repente, Miquel y Ulbar empiezan una pelea, que se gerenaliza a todo el bar. En ese instante me doy cuenta de que estoy demasiado cerca de la ventana...
- Uy, mejor me retiro, que si me caigo por la ventana puedo acabar saliendo volando( )
Tras esto, me uno a la pelea. Me pongo en la barra. La camarera elfa me reconoce y me mira más tranquila.
- ¿Donde guardais los barriles de cerveza?- le pregunto.
- Pues están detrás tuya...- me dice riendo.
Tras esto, cojo varios barriles. Uno se rompe de pleno en el pecho de alguien que iba a atacar por la espalda a Ulbar.
- Que desperdicio...- me dice ulbar riendo- ¡Guárdate uno, que esta noche acabamos perseguidos por la guardia!
- ¡Pero si están aquí!- le grito yo- ¡ese mismo al que estas dando puñetazos es el jefe!

Un saludo .
¡Oh Orofarnë, Lassemista, Carnimirië!
¡Oh hermoso fresno, sobre tu cabellera qué hermosas son las flores!
¡Oh fresno mío, te vi brillar en un día de verano!
Tu brillante corteza, tus leves hojas, tu voz tan fresca y dulce:
¡qué alta llevas en tu cabeza la corona de oro rojo!
Oh fresno muerto...