Ficha

Abârmil, si no recuerdo mal, aún debemos alguna que otra broma a nuestro querido orco bonachón, a Dimas, si se presenta por aquí, y a Peregrino, no? ¿Recuerdas aquella noche en el bosque verde antes de ser emboscados por almas en pena? jeje ya idearemos algo.... de momento aqui va mi ficha:

Nombre: Inglor Númenessë

Raza: Medio elfo.

Aspecto físico y psíquico: Màs hombre que elfo en el físico, aunque con ciertos rasgos de la ilustre rama de mi madre, como sus oscuros ojos marrones. Una melena, entre castaña y negra, emnarca mi tez morena y una perilla a modo de distintivo entre los míos. Nunca repudié la sangre de mi padre, y, entre elfos de casta pura como eran mis familiares o amigos, era esa perilla, junto con mi estatura de 1,72 m, mediocre para un alto elfo, la insignia que determinaba mi mestizaje. Aunque pavesas de la casa de Finwe recorren mis venas, me siento mucho más cercano a los hijos menores de Eru.
Solícito, optimista, de mente fría y pasión templada, propenso a razonar antes de asestar, en ocasiones, de excesivo orgullo y mayor terquedad que en mis años de soldado aprendí a apaciguar. En cuanto a mi constitución, soy recio y atlético, ancho de espaldas, de brazos vigorosos y de andar erguido, posible rastro de mi carrera militar.
En cuanto a fobias, me abruman las cavidades estrechas, asi como las grietas a modo de galerías bajo tierra o las cuevas angostas.

Historia: Vástago de Nerwen (de los Noldor) y de Vardamir, un hombre de bien desterrado por insumision a la corona. Poco supe de su vida tras su destierro y su mayor influencia la reconozco en mi carácter ácrata, fruto de discursos que acostumbraba a repetirme cuando yo era niño sobre el desocupado gobierno de los elfos. Pese a todo, ofrecí mis servicios a la corona cuando se fraguó la última alianza. Vivíamos entonces en campamentos nómadas de elfos entre Arnor y Eriador cuando comenzó el reclutamiento de las filas de Gil-Galad. Yo, al frente de doscientos cincuenta hombres de armas entre los cuales se hallaban mis primos y mi hermano menor Angaráto, acudí a la llamada de sus majestades. Tras la toma de Mordor, habiéndo caído mi hermano y uno de mis primos, regresé a mi hogar en el norte con el alma tan hendida, rota y mellada como mi armadura (la cual enterré para siempre). Deserté, y eludí la pena de destierro cumpliendo misiones de escaso lustre para reyes, senescales, príncipes y demás figuras ilustres y adineradas. No obstante, no niego mi ayuda a las causas justas que la requieran, como puede ser la paz de la Tierra Media.

Equipaje: Una chaqueta de montaraz, una camisa y botas de cuero curtido, un cinto en el que llevo una petaca llena de licor y un cuchillo pequeño para la comida y una bandolera que llevo cruzada a la espalda para llevar lembas, hierba para pipa, la pipa y algun que otro tentenpié. La comida procuro cazarla.

Armas: Mi vieja espada del ejército y un arco tallado por los míos.También llevo un carcaj cruzado en la espalda lleno de flechas.

Clase: Desertor nómada. Por lo tanto, bien podría hacer de explorador si se precisa, aunque también tengo instrucción militar.


Un saludo