Acción

Cuando Unfeniön me dijo:
No dudes en que te atacaran en cuanto tengan la oportunidad. No solo a ti, si no al resto de figurantes en la lista. Supongo que eso ya lo sabias, pero puede que esto no: el motivo de intentar asesinarte no es por ansias de poder, como tu dijiste anoche; si no por venganza. Sgronak y sus orcos lucharon para Sauron en la Guerra del Anillo, mientras que Scara y sus dunledinos lo hicieron para Saruman. Todos ellos luchaban en el bando de la oscuridad, bando que traicionaste en la Guerra del Anillo.
Yo sonreí y contesté:
-Gracias por decírmelo, ahora todo cobra algo más de sentido.

En realidad las palabras del dúnadan no me sorprendieron. Es que yo me había propuesto decir menos de lo que en realidad sabía: por cierto que no me sentía traidor de bando alguno; si no que era consciente de haber luchado por mi causa: la de mis pares de Morgul, aquellos orcos que deseábamos vivir sin amos ni cadenas. En cuanto a la venganza, eso estaba latente ¿revelaría al fin aquello que mis agentes me habían dicho alguna vez acerca de cierto jefe orco que deseaba desplazarme en el gobierno de Morgul para gobernar en forma autocrática y como tirano? Eso había llegado a mis oídos, aunque no estuviera yo seguro que se tratara de Sgronak, cobarde y mediocre. Quizás tras de él se escondiese alguien con mayor capacidad y fiereza.