Ver publicación (La escena + esperada en la trilogía)
Ver tema#3 Respondiendo a: Anónimo
pues yo creo q el monte del destino y la batalla en la perta negra.estoy deseando ver como frodo reclama el anillo. Y claro como se derrumba la torre oscura JEJE
(Mensaje original de: Thauron)
¿Cómo que en el libro no aparece la batalla de Gandalf y el Balrog? Cito textualmente...
LAS DOS TORRES - CAPÍTULO 5 - EL CABALLERO BLANCO
[...]¡Entonces dinos lo que quieras y lo que el tiempo permita! -Dijo Gimli. -¡Vamos Gandalf, dinos cómo enfrentaste al balrog!
-¡No lo nombres! - exclamó Gandalf, y durante un momento pareció que una nube de dolor le pasaba por la cara, y se quedó silencioso, y pareció viejo como la muerte. - Mucho tiempo caí - dijo al fin, y él cayó conmigo. El fuego de él me envolvía quemándome. Luego nos hundimos en un agua profunda y todo fue oscuro. El agua era fría como la marea de la muerte: casi me hiela el corazón.
- Profundo es el abismo que flanquea el Puente de Durin - dijo Gimli. - Y nadie lo ha medido.
- Sin embargo, tiene un fondo, más allá de toda luz y de todo conocimiento - dijo Gandalf. - Al fin llegué allí, a las más extremas fundaciones de piedra. Él estaba todavía conmigo. El fuego se le había apagado, pero ahora era una criatura de barro, más fuerte que una serpiente constrictora.
"Luchamos allá lejos bajo la tierra viviente, donde no hay cuenta del tiempo. Él me aferraba con fuerza y yo lo acuchillaba, hasta que por último él huyó por unos túneles oscuros. No fueron construidos por la gente de Durin, Gimli, hijo de Glóin. Abajo, más abajo que las más profundas moradas de los Enanos, unas criaturas sin nombre roen el mundo. Ni siquiera Sauron las conoce. Son más viejas que él. Recorrí esos caminos, pero nada diré que oscurezca la luz del día. En aquella desesperanza, mi enemigo era mi única salvación, y fui detrás de él, pisándole los talones. Terminó al fin por llevarme a los caminos secretos de Khazad-dûm: demasiado bien los conocía. Siempre subiendo seguimos así hasta que llegamos a la Escalera Interminable.
- Hace tiempo que no se sabe de ella - dijo Gimli. -Muchos defienden que nunca existió sino en las leyendas, pero otros afirman que fue destruida.
- Existe, y no fue destruida - dijo Gandalf. - Desde el escondrijo más bajo hasta la cima más alta sube en una continua espiral de miles de escalones, hasta que sale al fin en la Torre de Durin labrada en la roca viva de Zirakzigil, el pico del Cuerno de Plata.
"Allí sobre el Celebdil una ventana solitaria se abre hacia la nieve, y ante ella se extiende un espacio estrecho, un área vertiginosa sobre las nieblas del mundo. El sol brilla fieramente en ese sitio, pero abajo todo está amortajado en nubes. Él salió fuera, y cuando llegué detrás, ya estaba ardiendo con nuevos fuegos. No había nadie allí que nos viera, aunque quizá cuando pasen los años habrá gentes que canten la Batalla de la Cima -Gandalf rió de pronto.- ¿Pero qué dirán esas canciones? Aquellos que miraban de lejos habrán pensado que una tormenta coronaba la montaña. Se oyeron truenos y hubo relámpagos, que estallaban sobre el Celebdil, y retrocedían quebrándose en lenguas de fuego. ¿No es bastante? Una gran humareda se alzó a nuestro alrededor, vapores y nubes. El hielo cayó como lluvia. Derribé a mi enemigo, y él cayó desde lo alto, golpeando y destruyendo el flanco de la montaña. Luego me envolvieron las tinieblas, y me extravié fuera del pensamiento y del tiempo, y erré muy lejos por sendas de las que nada diré.
FIN DE LA CITA.
Yo creo que PJ habrá tenido un filón en esas líneas para la batalla
(Mensaje original de: El Enemigo)

LAS DOS TORRES - CAPÍTULO 5 - EL CABALLERO BLANCO
[...]¡Entonces dinos lo que quieras y lo que el tiempo permita! -Dijo Gimli. -¡Vamos Gandalf, dinos cómo enfrentaste al balrog!
-¡No lo nombres! - exclamó Gandalf, y durante un momento pareció que una nube de dolor le pasaba por la cara, y se quedó silencioso, y pareció viejo como la muerte. - Mucho tiempo caí - dijo al fin, y él cayó conmigo. El fuego de él me envolvía quemándome. Luego nos hundimos en un agua profunda y todo fue oscuro. El agua era fría como la marea de la muerte: casi me hiela el corazón.
- Profundo es el abismo que flanquea el Puente de Durin - dijo Gimli. - Y nadie lo ha medido.
- Sin embargo, tiene un fondo, más allá de toda luz y de todo conocimiento - dijo Gandalf. - Al fin llegué allí, a las más extremas fundaciones de piedra. Él estaba todavía conmigo. El fuego se le había apagado, pero ahora era una criatura de barro, más fuerte que una serpiente constrictora.
"Luchamos allá lejos bajo la tierra viviente, donde no hay cuenta del tiempo. Él me aferraba con fuerza y yo lo acuchillaba, hasta que por último él huyó por unos túneles oscuros. No fueron construidos por la gente de Durin, Gimli, hijo de Glóin. Abajo, más abajo que las más profundas moradas de los Enanos, unas criaturas sin nombre roen el mundo. Ni siquiera Sauron las conoce. Son más viejas que él. Recorrí esos caminos, pero nada diré que oscurezca la luz del día. En aquella desesperanza, mi enemigo era mi única salvación, y fui detrás de él, pisándole los talones. Terminó al fin por llevarme a los caminos secretos de Khazad-dûm: demasiado bien los conocía. Siempre subiendo seguimos así hasta que llegamos a la Escalera Interminable.
- Hace tiempo que no se sabe de ella - dijo Gimli. -Muchos defienden que nunca existió sino en las leyendas, pero otros afirman que fue destruida.
- Existe, y no fue destruida - dijo Gandalf. - Desde el escondrijo más bajo hasta la cima más alta sube en una continua espiral de miles de escalones, hasta que sale al fin en la Torre de Durin labrada en la roca viva de Zirakzigil, el pico del Cuerno de Plata.
"Allí sobre el Celebdil una ventana solitaria se abre hacia la nieve, y ante ella se extiende un espacio estrecho, un área vertiginosa sobre las nieblas del mundo. El sol brilla fieramente en ese sitio, pero abajo todo está amortajado en nubes. Él salió fuera, y cuando llegué detrás, ya estaba ardiendo con nuevos fuegos. No había nadie allí que nos viera, aunque quizá cuando pasen los años habrá gentes que canten la Batalla de la Cima -Gandalf rió de pronto.- ¿Pero qué dirán esas canciones? Aquellos que miraban de lejos habrán pensado que una tormenta coronaba la montaña. Se oyeron truenos y hubo relámpagos, que estallaban sobre el Celebdil, y retrocedían quebrándose en lenguas de fuego. ¿No es bastante? Una gran humareda se alzó a nuestro alrededor, vapores y nubes. El hielo cayó como lluvia. Derribé a mi enemigo, y él cayó desde lo alto, golpeando y destruyendo el flanco de la montaña. Luego me envolvieron las tinieblas, y me extravié fuera del pensamiento y del tiempo, y erré muy lejos por sendas de las que nada diré.
FIN DE LA CITA.
Yo creo que PJ habrá tenido un filón en esas líneas para la batalla

(Mensaje original de: El Enemigo)