Aghan fue uno de los Drúedain que vivieron en la región del Bosque de Brethil durante la Primera Edad. Los Drúedain eran un pueblo misterioso y único, conocidos por su conexión con la naturaleza y por habilidades especiales, entre ellas la capacidad de tallar piedras de forma mágica.
Aghan era particularmente hábil en la curación de heridas y tenía conocimientos especiales sobre los venenos que usaban los Orcos. Durante una época en que los Orcos asolaban los bosques de Brethil, Aghan vigilaba la casa de su amigo Barach, miembro del Pueblo de Haleth. Sin embargo, cuando fue llamado a atender a sus parientes heridos, dejó atrás una "piedra vigilante," una figura tallada en forma de Drúadan, para proteger la casa de Barach en su ausencia.
Según el relato titulado La Piedra Leal, mientras Aghan estaba lejos, la casa de Barach fue atacada por Orcos que intentaron incendiarla. Sin embargo, un Drûg misterioso los ahuyentó, y al día siguiente se descubrió que fue la propia piedra vigilante de Aghan la que cobró vida y salvó la casa de Barach. La figura de piedra resultó quemada y dañada al sofocar las llamas, y debido al poder que Aghan había imbuido en la piedra, él también sufrió algunas quemaduras, que ya estaban sanando cuando regresó.
La historia de Aghan y su piedra vigilante muestra la conexión profunda de los Drúedain con la naturaleza y el poder que podían infundir en sus tallas. Aghan representa la lealtad y la magia de protección de los Drúedain, que usaban su habilidad y su vínculo con la tierra para salvaguardar a sus amigos y aliados.
Cuentos Inconclusos, "Los Drúedain": Relato sobre la Piedra Leal y la conexión especial de Aghan con las piedras y la magia de los Drúedain