Pues lo que faltaba que el análisis que haya podido hacer la tipeja esa relacionando la obra de Tolkien y más concretamente en el personaje de Sam con la vida empresarial, vendrá a decir que ojalá todos los empresarios pudieran encontrar trabajadores con las cualidades de Sam (sumisos, y entregados) para conseguir sus metas (ganar más dinero, explotando todo lo que puedan).
Que conste que me parece un sacrilegio esta comparación y que para mi convierte todo lo loale y noble que es el personaje de Sam al extrapolarlo a la condición de un trabajador, que vive sólo para su empresario, en algo humillante.
Bueno en fin lamentable y quiero borrar para siempre esa perversa y vomitiva idea de mi cabeza.
Si algo no refleja la obra de Tolkien es el aprovechamiento de unos personajes por otros aunque sean más fuertes, inteligentes o semidioses, que es en realidad las relaciones de trabajadores y empresarios, con la salvedad que los empresarios ni son más fuertes ni más inteligentes, pero eso si la mayoría se creen semidioses.
Un saludo, (por cierto el auténtico mal y esto si podría extrapolarse de la obra de Tolkien al mundo empresarial, es el abuso que supone el sistema de empresario y trabajador)

Tienes más razón que un santo

Mira que estuve tentado de postear un mensaje similar al tuyo. El artículo que mencionas me resultó altamente ofensivo, cuando no vomitivo. Comparto plenamente tu postura. Aprovechar el tirón actual de la obra de Tolkien para manipular vílmente algo que en realidad no es así en el libro me parece repugnante. Puestos a sacar interpretaciones libres e interesadas y que pudieran servir como contestación a esa señora, le diría que si ella quiere ver sumisión total entre "amo" y "esclavo" en la relación entre Frodo y Sam, y lo quiere aplicar al tipo de relación que le gustaría que hubiera entre empresario y empleado, yo puedo "interpretar" la rebelión y lucha de los Pueblos Libres de la Tierra Media contra Sauron como la rebelión de los trabajadores contra el empresario que los explota y me gustaría que se aplicara a la vida real.
Por supuesto que mi interpretación es libre e interesada, pero es exáctamente lo mismo que ha hecho esta señora en su artículo.
Lo dicho, repugnante.
Saludetes cabreados.