24 de marzo de 3019 de la Tercera Edad: La última marcha y el sacrificio final

Morannon - El Ejército del Oeste se acerca a su destino final. Mientras los hombres se preparan para enfrentar la sombra de Mordor, Frodo y Samsagaz dan sus últimos pasos hacia el Monte del Destino.
24 de marzo de 3019 de la Tercera Edad

Ayer, 23 de marzo, el Ejército del Oeste dejó atrás Ithilien. Antes de continuar la marcha, Aragorn, comprendiendo la gravedad de la misión, permitió que aquellos que no pudieran afrontar la desesperanza regresaran a Gondor. "Esta no es una guerra para todos", comentó un soldado mientras veía a algunos compañeros abandonar las filas.

Hoy, 24 de marzo, el Ejército del Oeste ha llegado a la llanura ante el Morannon. La desesperanza es total, pero ninguno duda de su deber. "No hay más camino que adelante", se escucha en los campamentos. Frente a la inmensidad de la Puerta Negra y las legiones de Sauron, el destino de los Pueblos Libres parece sellado. La única pregunta es cuánto tiempo podrán resistir.

Mientras tanto, Frodo y Samsagaz, que en la jornada anterior dejaron atrás sus últimas posesiones y continuaron su camino con el único peso que importaba (el Anillo Único), hoy han dejado el camino principal y han comenzado el último tramo de su viaje. El Monte del Destino se alza ante ellos, pero cada paso es un tormento. Frodo, consumido por el peso del Anillo, apenas puede moverse, su espíritu desgarrado por la oscuridad. Incluso Sam ha sufrido lo indecible, arrastrándose y tropezando como su amo, hasta que ambos héroes, extenuados, han llegado a la base de la montaña, donde se han dejado caer para descansar, justo antes de su etapa final.

Pronto, muy pronto, tal vez mañana mismo, el destino de la Tierra Media se escribirá de la mano de dos hobbits que ya hoy han conseguido algo que parecía imposible. Mientras, el Ejército del Oeste enfrenta su prueba final, sin tener la certeza de si su esfuerzo será en vano o no. La batalla definitiva está a punto de librarse.