Amroth

Raza o especie: Elfo Sinda

Nacimiento: ¿?

Muerte: alrededor de 1981 TE

Padres: Amdír

Grupos: Reyes de Lothlórien

Y aunque en algunos escritos se dice que Amroth fuera hijo de Galadriel y Celeborn (y, por lo tanto, hermano de Celebrían), su filiación como hijo de Amdír parece más probable. Según se dice, Amdír, rey de Lórien, perdió la vida en la Batalla de Dagorlad, en el año 3434 de la Segunda Edad, momento en el cual Amroth se hace cargo del gobierno del Reino de Lórien.

Durante la Tercera Edad, Galadriel y Celeborn permanecieron durante bastantes años visitando a Amroth, pues tenían la intención de vigilar la oscuridad que se cernía sobre el Bosque Negro y los extraños movimientos observados en Dol Guldur. Amroth fundó Cerin Amroth, y tomó la costumbre silvana de vivir en los flets, en lo alto de los árboles. Según se dice, esta decisión la tomó a raiz del gran amor que sentía por Nimrodel, una Elfa Silvana. Pero Nimrodel se negaba a unirse a él, pues no le gustaban los Elfos que habían llegado del Oeste, de quienes pensaba que ponían en peligro la paz y prosperidad de los tiempos antiguos. Cuando cerca del año 1980 de la Tercera Edad, el reino de la Moria llegó a su fin, Nimrodel, ante el miedo de la llegada de los Orcos decidió huir hacia Fangorn. Pero Amroth la siguió y se prometieron huir del terror y la oscuridad que los rodeaba y Amroth le prometió alejarse de su pueblo. Le habló de las costas, de los puertos de Belfalas, y del camino recto, que les conduciría hacia la paz. Pero durante el viaje Nimrodel se perdió en las Montañas Blancas, junto con parte de su pueblo.

Pero Amroth no perdía la esperanza y esperaba a Nimrodel en el Puerto. Según cuenta la leyenda, el otoño fue frío y con muchas tormentas. Y mientras muchos barcos se hundieron en las aguas, el navío de Amroth fue arrastrado hacia Umbar. Y Amroth despertó cuando ya se había alejado de la costa y no pudiendo soportar sentirse separado de Nimrodel gritó su nombre a los cuatro vientos y se lanzó al mar, nadando hacia la costa.

No se supo nada más de Amroth. Y sobre Nimrodel sólo sabemos que vagó por los pasos de montañas, por las cascadas entre ríos, por los remansos de los lagos buscando a su amado.


Muchas canciones, poemas e incluso viejas leyendas jalonan la historia de Amroth. Es difícil separar la realidad de la leyenda pero, investigando los escritos más antiguos que han llegado hasta nuestros días, se pueden encontrar diversas contradicciones en la historia de Amroth. Así, antiguos poemas destacan que Amroth fue hijo de Galadriel y Celeborn, lo cual es desmentido en otros escritos de mayor credibilidad.

Sin embargo, la ascendencia de Amdír es, quizás, la más creíble de cuantas teorías han llegado hasta nosotros. Cuentan que Amdír, rey de Lórien, murió en la Batalla de Dagorlad, en 3434 de la Segunda Edad. El Reino de Lórien fue heredado por Amroth, el cual lo gobernó sabiamente. El pueblo de Lórien era de origen silvano, nunca conocieron la Tierra de los Valar, aunque estaban muy emparentados con los Noldor que cruzaron Moria en 1697 de la Segunda Edad. El cariño por su Rey fue muy grande.

Durante la Tercera Edad Amroth recibió con gran estima la visita de Galadriel y Celeborn. Allí residieron durante bastantes años, con la intención de vigilar la creciente oscuridad en el Bosque Negro y los movimientos oscuros y terribles observados en Dol Guldur. Amroth fundó Cerin Amroth, y tomó la costumbre silvana de vivir en lo alto de los árboles (los flets que se nombran durante la Guerra del Anillo, inmortalizados en los escritos del Gran Libro Rojo). Dicen las leyendas que tomó esta decisión por el gran amor que sintió por la Elfa silvana Nimrodel. Durante mucho tiempo amó Amroth a Nimrodel, pero ésta lo rechazaba. No porque no lo quisiera, sino por su aprensión hacia los Elfos venidos del Oeste, a los que acusaba de destruir la paz y prosperidad de los tiempos antiguos. Nimrodel residía sola, en las cascadas del río que llevaba su mismo nombre: Nimrodel. Hacia 1980 de la Tercera Edad el terror llegó a Moria, y el reino de la Mina del Enano llegó a su fin. Nimrodel, temerosa ante la llegada de los Orcos y algo más, huyó hacia Fangorn. Amroth la siguió y en los lindes del bosque se reconciliaron bajo la promesa de huir del terror que los rodeaba. Amroth le prometió dejar a su pueblo por amor. Le habló acerca de las costas, de los puertos del sur en Belfalas, del camino de los Elfos hacia las lejanas tierras del Oeste, hacia la paz. Las crónicas no cuentan nada acerca del viaje que ambos emprendieron hacia los puertos, sólo hablan de la terrible separación que sufrieron. Nimrodel se perdió en las Montañas Blancas, junto con parte de su pueblo. Misteriosas y dudosas leyendas afirman que de una compañera suya, Mithrellas, y de un númenoreano, Imrazôr, nació el linaje de los príncipes de Dol Amroth.

Los Elfos del puerto acogieron a Amroth. La partida era inminente. Perdida ya toda esperanza, Amroth se aferraba frenéticamente a la llegada de su amada. Llegó el Otoño, y el frío del Yermo, las tormentas. Muchos barcos se perdieron bajo las aguas, y el barco de Amroth fue arrastrado hacia Umbar. Sin embargo, cuentan las canciones y los versos antiguos, que Amroth se despertó cuando el barco ya estaba lejos de la costa. Roto por el dolor de la ya irreparable separación, gritando el nombre de Nimrodel a los cuatro vientos, se lanzó por la borda nadando hacia la costa. Nada más se supo de Amroth, ni de su cruel destino bajo las olas. De Nimrodel, poco más se supo. Lejanas canciones todavía recuerdan el errar de Nimrodel por los pasos de montañas, por las suaves cascadas entre ríos, por los remansos de los lagos, pero poco más acerca del destino que finalmente alcanzó.