Antes de ver hobbit'>El Hobbit, muchos nos preguntábamos si sería físicamente posible producir las tres películas previstas a partir de la novela, especialmente teniendo en cuenta que El Hobbit es más breve que cualquiera de los tomos de la trilogía de ESDLA -de cada uno de los cuales se hizo una sola película-. Después de ver El Hobbit, ya no me quedan dudas: es posible, y se va a hacer. En concreto, el relato de esta película no llega a la mitad de la historia relatada en el libro. Y además, se va a hacer bien, porque la sensación tras ver la película es sencillamente espectacular. Es una obra magistral.
Si en la trilogía de ESDLA, se acusó a Peter Jackson de omitir detalles, olvidar las canciones, e ignorar a ciertos personajes que no aparecieron en los filmes, en El Hobbit sucede justo lo contrario. Se recrea en los diálogos -la escena de los acertijos es espectacular-, en los detalles, y hasta añade nuevas escenas -como la reunión de Ganfalf con Elrond, Galadriel y cierto invitado sorpresa- que no estaban en el libro pero que contribuyen a explicar mejor la trama, manteniéndose siempre fiel al texto tolkieniano.
Además, se nota que en el guión se ha hecho hincapié en la conexión entre El Hobbit y ESDLA -por ejemplo, mediante la aparición de Frodo al comienzo de la película- para que hasta el espectador más despistado comprendiese la ubicación temporal la película y su continuidad en la posterior trilogía.
Martin Freeman (Bilbo), Ian McKellen (Gandalf) y Richard Armitage (Thorin) están estelares. Sus interpretaciones son soberbias, y el resto del reparto tampoco se queda atrás; aunque hay que destacar el Gollum digital basado en los movimientos de Andy Serkis cuya batalla de acertijos con Bilbo es espectacular: la desesperación del personaje está magníficamente recreada.
Quisiera hacer una mención especial a la esperada canción de los enanos. En casa de Bilbo Bolsón, los enanos cantan las dos canciones que aparecen en la novela. La segunda de las cuales (far over the misty mountains cold) es el solemne coro enano que ya habíamos visto en los tráiler. Afortunadamente, la criticada versión del tráiler español no es la que finalmente aparece en la película, sino que ha sido corregida y reinterpretada y está mucho, pero que mucho mejor. Además, el momento es perfecto. La tensión que se vive en la película cuando Thorin empieza a entonarla es casi escalofriante. En la sala de cine la gente dejó de comer palomitas y de hacer comentarios. Cuando los enamos empiezan a incorporarse al coro, el silencio del público era sepulcral. Fue un momento de gran emoción. Sólo me rechinó pérdida de rima en el último verso. Pero de resto fue cuasi ideal.
En fin. No sé si alguien habrá notado que la película me ha gustado, y no poco. Imprescindible su visionado.