Barad-Dûr
Es la fortaleza-arsenal-prisión-horno inexpugnable de Sauron, construida sobre un saliente de la vertiente sur de las Montañas de Ceniza, en Mordor, donde se extienden las sombras. La mejor descripción posible la encontramos en ‘La Comunidad Del Anillo’, tal y como la ve Frodo desde Amon Hen el 26 de febrero de 3019 de la Tercera Edad: “Muro sobre muro, almena sobre almena, negra, inmensamente poderosa, montaña de hierro, puerta de acero, torre de diamante.”
Las fundaciones de Barad-Dûr contienen innumerables calabozos y cámaras de tortura. También sirve como enorme forja del arsenal de guerra, y su interior alberga los ejércitos de orcos más fieles y aguerridos. La base de la torre, rodeada de pozos, se asienta en un espigón rocoso. De la gran puerta oeste parte el Camino de Sauron, que tras atravesar un abismo por un puente de hierro, se dirige al Monte del Destino, a 30 millas de distancia al suroeste. Otra calzada se encamina al oeste hacia la Puerta Negra, a través del paso de Carach Angren. La torre se eleva centenares de metros sobre la meseta de Gorgoroth. Los muros exteriores son de un negro impenetrable, cubiertos por decenas de almenas y pináculos. La atalaya más alta está rematada de una corona de hierro, y justo bajo ella, una enorme ventana alberga al Ojo que nunca duerme.
La historia de la Torre Oscura empieza en el año 1000 de la Segunda Edad, cuando Sauron, atemorizado por el desembarco de los Numenoreanos en la Tierra Media, decide refugiarse en el este, en Mordor, e inicia las obras de construcción de su fortaleza. En el 1600, y gracias al Anillo Único que acaba de fabricar, refuerza los cimientos de Barad-Dûr y finaliza su construcción. Gran parte del poder del propio Sauron se transfiere a la torre, que queda irremisiblemente ligada al destino del Anillo. Tras su derrota en la guerra contra los Elfos en 1701, Sauron se refugia en Barad-Dûr, desde donde dirige la conquista de los territorios del este. Esta situación permanece hasta 3261, cuando Ar-Pharazôn arriba en Umbar con una inmensa flota. El propio Sauron, tras dejar el Anillo en Barad-Dûr, sale de la Torre, y se rinde al Rey de Númenor en 3262. En 3320, y tras el hundimiento de la Isla, Sauron, encarnado en una horrible figura, vuelve a la fortaleza donde prepara la guerra contra el recién fundado reino de Gondor.
Entre el 3434 y el 3441, los ejércitos de la Última Alianza, que han vencido a las huestes de Sauron en Dargolad, sitian Barad-Dûr. Aunque parece inexpugnable, la fuerza de los Elfos y Hombres es tal que el propio Sauron debe salir a combatir en las faldas del Monte del Destino, donde mueren Gil-Galad y Elendil. Finalmente, cuando Isildur corta el dedo del Anillo de la mano de Sauron, su poder queda drásticamente disminuido, lo que permitirá la demolición posterior de la torre. Sin embargo, los cimientos permanecen, ya que el Único no resulta destruido. Durante casi toda la Tercera Edad, sólo quedan los escombros de Barad-Dûr, hasta 2942, cuando Sauron regresa a Mordor tras su estancia milenaria en Dol Guldur. De esta forma, en 2951 reemprende la construcción de su fortaleza. Sus mazmorras ‘acogen’ a Gollum entre el 3009 y el 3017.
Durante la Guerra Del Anillo, Sauron nunca saldrá de Barad-Dûr, pendiente de la piedra de Morgul, de la búsqueda del Anillo y del acantonamiento de sus ejércitos. El lugarteniente de la torre es Boca de Sauron, un Numenoreano negro. Pero finalmente, la destrucción del Anillo en el Monte del Destino el 25 de marzo de 3019 libera finalmente los cimientos de la torre del hechizo ancestral, y Barad-Dûr se derrumba inmediatamente en una hecatombe de piedra y roca.
El significado Sindarin es ‘Torre Oscura’ (barad = torre; dûr = oscuro), lo mismo que Lug-Búrz en la Lengua Negra.