Curso de Quenya: Apéndices

¿Cuál es la función del partitivo plural? La aplicación del caso en los finales con -t Los infinitivos con el prefijo a- La elisión de las vocales finales. ¿Formas justificadas históricamente o igualdad analógica? Variación de la raíz. Variaciones de la vocal. ¿Variación de las vocales finales? Las vocales finales "perdidas", ¿se conservan ante las consonantes finales?

APENDICES:

Basándome en todo el material publicado (y algo más), ofrezco toda la información que puede darse del Quenya con un mínimo de garantías. Estos apéndices del curso proporcionarán información adicional pero, en principio, prestaremos atención a ciertas características del idioma que no están aún contrastadas o no han sido del todo comprendidas. Es por ello, que me he visto en la necesidad de crear algunos ejercicios en torno a esas materias en cuestión. Si se llegara a publicar más material Quenya en el futuro, resumiré aquí la nueva información (bien para completar el trabajo o bien para añadir nuevas lecciones al curso).

¿CUÁL ES LA FUNCION DEL PARTITIVO PLURAL?

A lo largo de este curso, hemos distinguido tres números Quenya: el singular, el plural y el dual. Existe sin embargo un cuarto llamado partitivo plural, al que hemos ignorado al considerar que sus funciones no se hallan aún bien determinadas o entendidas. De ahí que yo tampoco pueda asegurar que Tolkien no hubiera empleado el partitivo plural donde yo uso el plural normal en algunos de los ejercicios del curso.

Antes de fijar nuestra atención en las posibles funciones del partitivo plural, veremos como se forma: la terminación básica es -li, derivada de la raíz -li- "bastantes, algunos", la que, a su vez, es la fuente del nombre lië "gente, personas". La Carta Plotz apunta a lasseli y ciryali como los partitivos plurales de lassë "hoja" y cirya "barco". No está tan claro que se pueda añadir -li a los nombres terminados en consonante, pues resultaría una agrupación imposible (tan solo los nombres terminados en -l podrían llevar el final -li sin más adiciones, pues el Quenya no permite la doble -ll-). En un ejemplo contrastado en el que se involucra al partitivo plural de Casar "enano" (basado en Khazád, como palabra alternativa a Nauco), vemos la asimilación: en vez de la que sería una forma imposible **Casarli, tenemos Casalli.

Asimismo, las Etym apuntan a Telelli como partitivo plural de Teler (unos Elfos del Tercer Clan). Ver WJ:388, LR:391.

Los nombres terminados en -s o -n pueden también asimilar la consonante -l- antes del final -li, y quizá por eso, el partitivo plural de nombres como elen "estrella" u olos "sueño", pudieran ser elelli y ololli. La conducta de los nombres terminados en -t como nat "cosa", sigue siendo un misterio de momento. No es probable que la forma imposible **natli cambie sus consonantes derivando a nalti, sino que más bien deberíamos pensar en alguna vocal conectora (quizá resulte algo parecido a nateli con una -e- extra, como en el caso de Elendilenna "a Elendil", Los Pueblos de la Tierra Media:401).

Como se muestra en las formas de varios casos en la Carta Plotz, el arcaico Libro del Quenya, posee una terminación larga -lí parecida en el nominativo y el acusativo, pero en el Quenya más tardío, se acorta a -li como se muestra en los ejemplos ya citados anteriormente. Sin embargo, la terminación -lí con la vocal larga, sigue utilizándose en las terminaciones -nen del instrumental y -va del posesivo, por lo que el partitivo plural de ciryali aparece como ciryalínen y ciryalíva respectivamente (y la vocal larga lleva por supuesto, el acento). El genitivo añade simplemente el final -on para el plural normal, obteniendo ciryalion. El dativo añade su terminación más simple -n, dándonos ciryalin.

En el locativo, alativo y ablativo, es opcional para cualquiera de ellos el uso de los finales más sencillos: -ssë, -nna, -llo, o sus formas plurales: -ssen, -nnar, -llon (-llor alternativamentte). La ya citada terminación -li, indica que la palabra es plural, por lo que es secundario o poco importante que figure o no un segundo indicador de plural al final de la palabra. A partir de ahí, tenemos: locativo: ciryalissë=ciryalissen, alativo: ciryalinna=ciryalinnar, ablativo: ciryalillo=ciryalillon (ciryalillor). En Namárië de LotR, Tolkien utiliza falmalinnar como partitivo plural alativo del nombre falma "ola espumosa"; así escribe cuando quiere usar la forma Quenya más pura de LotR, pudiendo optar también por las formas con doble marca de plural.

Hacer una lista de las formas, es fácil; es más difícil sin embargo definir con precisión las funciones de las mismas. Si ciryar solo significa "barcos", ¿cuál será la alternativa de traducción para la "otra" forma plural ciryali? ¿Cuál es la diferencia de significado?

En la traducción al inglés, Tolkien interpreta las formas del partitivo plural acabadas en -li, como las formas normales del plural (terminadas en -s). La frase alativa: i falmalinnar en Namárië, se traduce como "sobre las olas espumosas". Sin embargo, en su traducción interlineal de Namárië en RGEO:67, Tolkien rompe esta forma de falma cambiándola a falma-li-nnar, e indicando que el elemento central significa "muchos" (lo que también hemos visto en el significado de la forma básica -li-. LR:369).

Además, en una ocasión alguien usó la palabra taurelilómëa, la cual, en el apéndice F de LotR figura con el significado de "bosque con muchas sombras/muy sombrío". Aunque esto no es Quenya "genuino", sino sencillamente una forma de coordinar la manera de hablar de los Elfos con el comportamiento de los Humanos, Tolkien insinua una vez más que el elemento -li conlleva "muchos". Por eso, inevitablemente y no sin razón, muchos investigadores han concluido que las formas acabadas en -li son ejemplos de un supuesto plural múltiple. Esta forma plural, implicaría que hay "muchos/muchas" de las cosas en cuestión: mientras que ciryar es simplemente "barcos" (pocos o muchos pero siempre más de uno), ciryali significaría "muchos barcos". El ejemplo i falmalinnar "las espumosas olas" de Namárië nos llevaría a la siguiente interpretación: Galadriel está cantándole a las olas del profundo océano que se extiende entre ella misma y Varda (obviamente una multitud de olas).

Me temo sin embargo, que esta interpretación de las formas plurales acabadas en -li es demasiado simplista; al menos para la historia completa. Bárbol recibe a Celeborn y Galadriel como vanimar vanimálion nostari, y dicho saludo se traduce como: "justos/nobles engendradores de justos/nobles" (SD:73). Vanimálion "de justos/nobles" es el partitivo plural genitivo de vanima "justo/noble". De nuevo Tolkien traduce una forma plural partitiva como un plural normal en nuestro idioma, y no hay nada que sugiera que el significado "de muchos nobles" sea intencionado (a menos que Bárbol exagerara su amabilidad, lo que no estaría de acuerdo con el devenir de los hechos: Celeborn y Galadriel fueron los "engendradores" de una criatura conocida: Celebrian. Incluso si añadimos también a su abuela Arwen, solo salen dos "nobles" y eso, difícilmente, puede contarse como "muchos").

Hay también un ejemplo de partitivo plural (esta vez en caso locativo) en el Poema Markirya, pero no nos es de mucha ayuda: man cenuva rácina cirya ondolissë mornë, lo que Tolkien interpretó como: "quién prestará atención a un barco roto encallado en las oscuras rocas?" (Monstruos y Críticas:222,215,220). Aquí tenemos ondolissë mornë "en (las) oscuras rocas"; una vez más, un plural Quenya acabado en -li se traduce como un plural normal en nuestro idioma (con final -s). De la misma manera que nada discute la posibilidad de que el barco descrito esté embarrancado sobre "muchas" rocas oscuras, tampoco hay nada que lo confirme.

El material más reciente (procedente de LotR) ofrece más ejemplos de plurales terminados en -li. En las versiones narrativas más modernas del Silm, el Clan de Noldor se cita como Noldoli (Cuentos Perdidos: 1:21). Aquí cabe la posibilidad de que el final -li esté usándose como tipo de un "plural genérico" para referirse al total de la raza de los Elfos de Noldorin. De forma parecida, en la entrada TELES- de las Etym (LR:391) Tolkien parece igualar virtualmente la forma Tellevi con el compuesto Telellië (familia Teller=Teller=Elfos de Telerin+lië "gente". Notemos la asimilación regular -rl- -ll-). Sin embargo, al discutir varias formas de Casar "Enanos" en fuentes muy posteriores (después de LotR), Tolkien parece distinguir claramente entre el partitivo plural Casalli y el nombre de la raza Casallië (este último, evidentemente=gente Enana=Casar+lië. Ver WJ:388). En las últimas narraciones Tolkien abandona también la forma Noldoli, e insistentemente se refiere a este pueblo como a los Noldor (un plural normal acabado en -r), aunque la referencia es clara al Clan completo de los Elfos de Noldorin, como a "gente". La forma Noldoli no está precisamente obsoleta, pero quizá se redefinió su función.

En un pasaje de sus Cartas, Tolkien hace algunas referencias que al menos arrojan algo de luz sobre la formación de varios plurales, pero usa ejemplos en Sindarin:

"...la lengua Eldarin distingue en forma y uso entre un partitivo o plural particular, y un plural total o general. De esta manera, yrch`orcos, algunos orcos`...Los Orcos como una raza, o bien orchoth, para definir a un grupo concreto de orcos, cuyo número haya sido mencionado previamente... (Cartas:178)

Si yrch "orcos" es un ejemplo del partitivo plural (plural particular) en Sindarin, debe corresponderse con un plural en Quenya acabado en -li (aunque históricamente yrch deriva de un plural acabado en -i, terminación plural que aún sobrevive en Quenya). Debemos pues considerar iguales al plural normal del Quenya terminado en -i o -r y al plural "total o general". Según las aseveraciones de Tolkien, este plural se usaría para definir razas completas (o distintos grupos previamente identificados o definidos). De hecho, podemos ver formas como Valar, Quendi, Eldar, que se refieren a razas relevantes (¿Quiere esto decir que la noción de que el plural acabado en -li pueda tener este significado, está anticuada y por eso Tolkien sustituye en sus narraciones a Noldoli por Noldor?)

Estas formas plurales tienen por supuesto, una referencia limitada, apuntando a definir a un grupo particular más que a una especie entera. Bárbol se refiere a Galadriel y Celeborn como a vanimar "los nobles/justos" que son, obviamente, tan solo un par de "nobles/justas" (maravillosas) personas, y no constituyen por sí solos una raza completa de gente noble o maravillosa en el mundo.

Puede que el sistema de trabajo sea algo así: si te quieres referir a un grupo, usando el plural normal (terminado en -r o en -i) y no se inserta el artículo determinado ante el nombre plural, el mismo nombre servirá de referencia genérica, a menos que el contexto de la frase indique claramente lo contrario. Tenemos un ejemplo de Tolkien en Valar valuvar "los deseos de (todos) los Valar (dioses, poderes divinos) serán cumplidos" (WJ:404). Aquí Valar es un plural "total o general"; no se refiere a "algunos" dioses, sino a la estirpe completa de los Valar. Si se quiere destacar a alguno de los Valar en concreto, en contraposición a la raza completa de los dioses, lo apropiado sería usar el partitivo plural Valali (Tolkien parece querer decirnos que "algunos orcos" es una posible referencia al partitivo plural yrch del Sindarin). El término "partitivo" plural sugeriría que estamos tratando con un subgrupo, con una parte del grupo total de los Valar que existen. Pero, una vez establecido Valali como "un grupo previamente mencionado", deberemos volver al plural "total" que no se refiere al susodicho grupo. Sería apropiado hablar de este subgrupo como de i Valar (con el artículo determinado, "los" dioses concretos que se citan aquí).

Cuando Bárbol se dirige a Galadriel y Celeborn como a vanimar "los nobles", está usando el plural "particular", hasta el momento en que se refiere a "dos" nobles "concretos". Pero cuando los describe como vanimálion nostari "engendradores de nobles", utiliza el plural "partitivo" para dejar claro que Galadriel y Celeborn son los (grandes) padres de algunos nobles en comparación con todos los nobles del mundo (quizá las palabras de Bárbol significan que "algunos" y no "todos" los hijos de Galadriel eran nobles o maravillosos. Sin embargo, el contexto como una norma de cortesía en general, indicaría lo contrario).

En el caso del barco encallado ondolissë, se describe simplemente como un barco encallado sobre "algunas" rocas, "ciertas" rocas, un "número indeterminado" de rocas.

Para resumir: puede que lo que en nuestro idioma se expresaría con: alguno+nombre plural, en Quenya deba expresarse con el plural acabado en -li. Así, la vieja teoría del plural múltiple no sería del todo correcta; de hecho, se mantendría el criterio de que la raíz original -li- significa "muchos". Quizá y especialmente cuando se combinan los plurales acabados en -li con el artículo determinado, pudiéramos deducir una cierta idea de "gran multitud", como en la frase de Namárië: i falmalinnar "bajo el ((?)vasto océano de) espumosas olas". Pero en general, sería más aconsejable usar un adjetivo separado para indicar "muchos" (en este curso se usa el adjetivo rimba, plural rimbë, definido por Tolkien como "numerosos").

Hasta que descubramos algunos ejemplos, estas teorías serán solamente teorías. Como ya dije, en realidad no puedo descartar la posibilidad de que, a veces, Tolkien hubiera usado plurales acabados en -li, donde yo he usado plurales normales en los ejercicios de este curso. Mucho menos podría asegurar si en algún momento él habría rechazado esa forma de redacción como absolutamente errónea o antigramatical, desde el punto de vista del Quenya.

LA APLICACIÓN DEL CASO EN LOS FINALES CON -t:

Como ya se ha dicho hay dos tipos de terminaciones en Quenya que determinan el número dual: -u y -t (Aldu="dos árboles", ciryat="dos barcos"). El uso de cada una de ellas, depende de la forma del nombre correspondiente.

En la Carta Plotz, Tolkien ofrece una lista de finales de caso, incluyendo el elemento dual -t: genitivo=-to, dativo=-nt, alativo=-nta, ablativo=-lto, locativo=-tsë, instrumental=-nten. Obviamente existen ciertas variaciones en relación con los finales de caso más simples, asociados normalmente con el singular: -o, -n, -nna, -llo, -ssë, -nen. La correspondiente terminacióón dual viene dada simplemente al hacerle un hueco a una -t-, y (donde fuera necesario) adaptar el resultado a la correcta fonética del Quenya. Entonces, la pregunta es: dando por hecho que -t es lo que marca el dual, ¿deben los casos que llevan -t usarse solo con nombres que lleven la forma dual nominativa acabada en -t, como ciryat? Los nombres que lleven en el nominativo la otra marca dual -u, ¿no deberían usar los casos con final -t?

Esta es una cuestión que debatí brevemente en muchas de las lecciones y, como ya he indicado, no hay una respuesta cierta y fiable. Podemos formular una teoría plausible imaginándonos como los finales de casos en -t se originaron en los comienzos del idioma. Quizá Tolkien imaginara que inicialmente las terminaciones de los casos se añadían sin más a la forma simple dual terminada en -t.

De esta manera, y comenzando por el nominativo simple ciryat "dos barcos, una pareja/un par de barcos", tendremos:

Ciryat + -o para el genitivo = ciryato

Ciryat + -n para el dativo = ciryatn

Ciryat + -nnapara el alativo = ciryatnna simplificado a ciryatna

Ciryat + -llopara el ablativo = ciryatllo simplificado a ciryatlo

Ciryat + -ssëpara el locativo = ciryatssë simplificado a ciryatsë

Ciryat + -nenpara el instrumental = ciryatnen

Sin embargo, el grupo -tn- puede ser algo antipático a la hora de pronunciarlo, por lo que las consonantes sufrirán una metátesis; esto es: un cambio en su posición con objeto de producir -nt- (más fácil de pronunciar). Así, el dativo ciryatn, el alativo ciryatna y el instrumental ciryatnen, se convierten en las formas más actuales (y más asequibles) que se ofrecen en la Carta Plotz: ciryant, ciryanta, ciryanten. Asimismo, -tl- se convierte en -lt-, por lo que el ablativo cambia de ciryatlo a ciryalto como también atestigua la Carta Plotz. Solo el genitivo ciryato y el locativo ciryatsë quedan inalterables, sin metátesis (descubriendo que, originalmente, las terminaciones de los casos llevaban como sufijo la forma dual simple acabada en -t).

Siendo esto así, tenemos razones para pensar que las mismas terminaciones de los casos llevarán también los sufijos de las formas duales terminadas en -u, como en el ejemplo siguiente, en el que usamos Aldu "dos árboles" como muestra:

Aldu+-o para el genitivo = Alduo

Aldu+-npara el dativo = Aldun

Aldu+-nnapara el alativo = Aldunna

Aldu+-llopara el ablativo = Aldullo

Aldu+-ssëpara el locativo = Aldussë

Aldu+-nenpara el instrumental = Aldunen

Estas formas no deberían sufrir cambios sutanciales a la hora de adaptarlas a una fonética Quenya aceptable, pero en teoría, las terminaciones de los casos duales -nt, -nta, -lto, -tsë y -nten, deeberían servir solo como sufijos de los nombres con la terminación de la forma dual nominativa en -t. Los nombres con la terminación dual nominativa en -u, deberían llevar el caso más simple en terminación -o, -n, -nna, -llo, -ssë, -nen. La única incertidumbre sería la relación con el dativo. Podría ser aldun como sa ha sugerido, pero como se demuestra en la Lección Trece, Tolkien usó la terminación más larga (-en), en un ejemplo contrastado correspondiente al período en que -(e)n era más una terminación de genitivo que de dativo: vernen como genitivo de la forma dual veru "pareja casada, esposos" (Etym, entrada LEP-). Si esta forma sobrevivió sin tener en cuenta la re-definición de los finales de caso hecha por Tolkien, el dativo de aldu debería ser alduen.

No hay ninguna terminación dual contrastada en ningún sitio para la forma del caso posesivo adjetival. Tenemos la teoría de que debería llevar un final -twa en el caso de las formas duales acabadas en -t (ciryatwa "de un par de barcos"), pero si la teoría expuesta más atrás fuera correcta, el final será simplemente -va en el caso de las formas duales terminadas en -u (alduva "de (los) dos árboles").

LOS INFINITIVOS CON EL PREFIJO a-:

El Poema Markirya incluye dos ejemplos de un infinitivo especial que lleva el prefijo a- (Tolkien escribió na- en un principio, y luego lo cambió por a-, lo que nos sugiere que fue una forma gramatical surgida espontáneamente de su mente al finalizar la última versión del Poema).

La reveladora pareja de líneas a la que nos referimos, es la siguiente:

"Man cenuva lumbor ahosta... ("¿Quién congregará a las nubes...?")

"...menel acúlna...? ("...someterá a los cielos...?")

Los verbos aquí afectados por la raíz a-, son hosta- "congregar, reunir", y cúna "someter, doblegar". Bien, ¿cuál es la función del prefijo a-?

Tolkien dio unas concisas instrucciones al respecto en una vaga nota: "cuando la raíz esencial del verbo se usa como infinitivo (como tras: ver, oir, etc.), llevará el prefijo a- si el nombre es el objeto y no el sujeto del verbo..." (MC:223). Hay al menos dos posibles interpretaciones de esto, pero la "tradicional" (reflejada en muchos textos del propio Tolkien), nos lleva a la siguiente conclusión: tras los verbos de los sentidos, como "ver, mirar, oler, oir, etc." generalmente nos encontraremos algún nombre que será el objeto del verbo del sentido en cuestión. En los ejemplos anteriores, lumbor "nubes" y menel "cielos", son los objetos (no los sujetos) del verbo cenuva- "ver". No obstante, estos verbos son a su vez los sujetos lógicos de los verbos "congregar" y "someter": las nubes se congregan, los cielos se someten. Así pues, para expresar lo que un objeto "está haciendo" al tiempo que es el sujeto de otro verbo, se usará un infinitivo con el prefijo a-. En otras palabras: man cenuva lumbor ahosta, es la forma Quenya de decir "¿quién se encargará de congregar a las nubes?". Pero, a diferencia de "congregar" en este circunloquio, ahosta sigue siendo un infinitivo como se ha visto claramente por el hecho de no llevar el plural acabado en -r, siendo lumbor "nubes" su lógico sujeto, el que va en plural. Podemos sorprendernos al ver como se añade el prefijo a- a una raíz verbal que empieza por vocal, especialmente en -a-. Como ya sugirió Nancy Martsch en su Basic Quenya, a veces este hecho podría pasar desapercibido en el conjunto de un guión, en una frase como por ejemplo cennen i nís a-anta(?) i seldon parma "ví a la mujer dar el libro al muchacho".

Tampoco es muy seguro como se debe añadir el prefijo a- a los verbos primarios. Un verbo como mat- "comer" probablemente llevaría incluida la terminación en su forma raíz si hiciera funciones solo de infinitivo. Por supuesto, podemos añadir el prefijo a- y construir una frase como tirnen i Naucor amatë "ví comer a los Enanos". Sin embargo, una forma como amatë debería acentuarse en la primera sílaba, justo en la posición del prefijo. ¿Podríamos ignorar las reglas normales del énfasis y dejar caer el acento sobre la sílaba siguiente a la del prefijo (la ortografía de a-matë serviría para expresar esto)? Actualmente el Poema Markirya posee un ejemplo relevante que concierne al verbo cir- "navegar", pero en ese ejemplo no se usa el prefijo a-. Haciendo una corrección de algo que probablemente se interpretó mal (en el manuscrito de Tolkien se interpreta -a- hasta tres veces como -e-), esta frase quedaría como: man cenuva fána cirya métima hrastallo círa "¿Quién verá un barco blanco navegar desde la última costa?"(?) (La traducción poética de Tolkien en MC:214, reza lo siguiente: "¿quién verá un barco blanco dejar la última costa/partir desde la última costa?", y eso es claramente, un significado literal). La construcción general es muy similar a la de los ejemplos citados anteriormente; el "barco blanco" es el objeto del verbo cenuva "ver", pero es al mismo tiempo, el sujeto del verbo cir "navegar". La segunda parte, se construye simplemente como un "continuo", similar en la forma a los tiempos presente o continuo: círa. Así, debemos asumir que: "ví comer a los Enanos", también se podría expresar como: tirnen i Naucor máta, y creo que sería preferible esta construcción a la engañosa forma con amatë.

Ahora surge una nueva pregunta: ¿porqué una raíz de continuo simple no puede sustituir al infinitivo con el prefijo a- en cualquier sitio? Los verbos hosta- "congregar" y cúna- "doblegar" producirían probablemente las formas hostëa y cúnëa. ¿Porqué entonces: "quién se encargará de congregar a las nubes, de doblegar a los cielos?", no se puede expresar como: man cenuva lumbor hostëa, menel cúnëa...? ¿Porqué Tolkien usó las formas ahosta y acúna? Por lo que sabemos, ambas construcciones son perfectamente utilizables y correctas. Tolkien se limitó a reproducir la que surgió primero en su mente o la que mejor se adaptaba a la métrica de su poema.

"Gildor Inglorion" ha aportado una nueva interpretación de la función del prefijo a-, que podría permitirnos explicar todas las fórmulas expuestas. Ya hemos citado la nota de Tolkien en la que dice: "...cuando la raíz esencial de un verbo se usa como infinitivo de un verbo de los sentidos, llevará el prefijo a-si el nombre es el objeto y no el sujeto..."(MC:223). Esto quiere decir que se aplicará esta máxima cuando el nombre (es decir: el objeto del verbo principal en la oración) sea el objeto lógico (no el sujeto) del propio infinitivo. Si es así, está claro el porque no puede usarse el prefijo a- en una frase como: "¿quién verá un barco blanco

navegar...", porque el barco es el sujeto lógico del verbo navegar y no el objeto. Esta interpretación significaría que los verbos hosta- "congregar" y cúna- "doblegar", son transitivos en los ejemplos en los que se use el prefijo a-, e intransitivos en la traducción a nuestro idioma: "Quién se encargará de reunir/congregar a las nubes, de someter a los cielos?" En nuestro idioma, son las nubes las que se forman a sí mismas o algo parecido, y los cielos se dirigen/dominan también a sí mismos; no necesitan de nada ni de nadie que los dirija.

Hosta- significa también "recoger", claramente transitivo. Por supuesto, este verbo podría ser indistintamente transitivo o intransitivo, ya que hay al menos otro verbo también acabado en -ta (orta- "levantar" -transitivo- y "originar" -intransitivo-). Pero si hosta- se toma en el sentido de "reunir", la forma transitiva de "recoger", y el prefijo a- nos dice que el nombre que va a continuación del infinitivo es el "objeto" y no el sujeto de ese verbo, entonces: man cenuva lumbor ahosta(?) significará: "¿quién se encargará de reunir a las nubes para que sean recogidas?". Similarmente: man cenuva...menel acúna significaría: "¿quién se encargará...de que los cielos sean sometidos?". Gracias a esta interpretación del uso del prefijo a-, nuestro ejemplo particular tirnen i Naucor amatë, no significará: "ví comer a los Enanos", sino: "¡ví a los Enanos siendo comidos!". El prefijo a- indicaría que el nombre delante del infinitivo sería tomado como el objeto y no el sujeto del banquete.

Quizá nunca sepamos con certeza cual der estas dos interpretaciones es la correcta. Podría perfectamente ser que el prefijo a- (y su variante -na), fuera espontáneamente inventado por Tolkien, trabajando en la última versión del Poema Markirya, y deslizado fortuitamente desde cualquiera de sus notas.

LA ELISION DE LAS VOCALES FINALES:

El saludo: elen síla lúmenn` omentielvo "una estrella brilla en la hora de nuestro encuentro", ejemplifica un rasgo frecuente pero no obligatorio de la fonética Quenya: cuando una palabra termina en vocal y la palabra siguiente comienza también en vocal, la primera de estas dos desaparece. Así pues, el final en -a de lúmenna "en (la) hora", se omite ante la o- inicial de omentielvo "de nuestro encuentro". En el "Juramento de Elendil" tenemos que en la frase tenn` Ambar-metta "hasta el fin del mundo", la preposición tenna "hasta" se ve reducida a tenn` ante la inicial a- de Ambar-metta "fin del mundo". Ocasionalmente, este fenómeno puede llevar a otro nuevo como es la aparente unidad de palabras, tal y como ocurre con la misma preposición tenna "hasta" y el nombre oio "fin de los tiempos", que, contraídas darían lugar a: tennoio (tenn`oio) "siempre, eternamente" (UT:305,317).

Naturalmente, esta omisión de la vocal final es especialmente común y útil cuando una palabra acaba en una vocal similar o idéntica a la del principio de la palabra siguiente (como la omisión de -a ante o- y a- en los ejemplos anteriores). En La Canción de Fíriel (LR:72), hay un punto bajo las vocales finales, indicando que son susceptibles de sufrir elisión. Para marcar las frases relevantes desde ese punto de vista, hemos sustituido el punto por un subrayado, a fin de no alterar demasiado el texto original en Quenya, en frases como: 1):Ilu Ilúvatar en káre eldain "Iluvatar hizo el mundo de los Elfos". Aquí se omitiría la -e final de káre "hecho", por coincidencia con la vocal de inicio de la siguiente palabra eldain; 2):íre ilka yéva nótina "cuando todo es contado", e: íre Anarinya qeluva "cuando mi sol se apague". Aquí tenemos la elisión de la -e final ante i- y a- respectivamente; 3): enyáre tar i tyel "en el día después del final", lo que interpretamos como una intención de Tolkien de dar un único ejemplo de una vocal final suprimida ante una inicial consonántica en la siguiente palabra tar.

Tenemos pues que la omisión de la vocal final no es necesaria para crear un Quenya correcto, por lo que la elisión se ignorará en los ejercicios de este curso. La frase lúmenn` omentielvo aparece en ellos por dos veces en su forma completa: lúmenna omentielvo (WJ:367; Cartas:424). Nuestra obra contiene también ejemplos en los que la vocal final persiste a pesar de que la siguiente palabra comienza en vocal idéntica (como en la oración: aurë entuluva "el día llegará de nuevo", citada en Silm, capítulo 20). Aunque la frase se podría acortar y convertirla en aur` entuluva, no es necesario como ya se ha dicho. La elisión de las vocales finales, sería probablemente más común en el idioma hablado, así como en poesía cuando la métrica de los versos del poema así lo requiera.

¿FORMAS JUSTIFICADAS HISTÓRICAMENTE O IGUALDAD ANALÓGICA?

Como se vió en las lecciones, las construcciones "irregulares" del idioma se justifican frecuentemente por la larga e histórica evolución que Tolkien practicó. Por ejemplo, cuando el nombre talan "suelo" resulta tener a talami como plural en vez de a talani. Esto es porque el Elfico Primitivo tiene la base de la forma TALAM-: como ocurre con las diferentes construcciones de la fonética Quenya, el final -m no se toleró durante mucho tiempo y fue acercándose hacia el sonido -n mucho más permisivo. Así pues, el viejo talam aparece como talan cuando la palabra no tiene más terminaciones. Pero, cuando estas aparecen en forma de vocal, la -m original no es final y, por consiguiente, no debería cambiar. Así, el plural sería talami "suelos".

Aún habría una consecuencia más: mediante la analogía con algunas parejas como aran/arani "rey/reyes", elen/eleni "estrella/estrellas" y otras más, la pareja talan/talami "suelo/suelos" podría sucumbir a una solapada "igualdad analógica". Los parlantes podrían haberse limitado a empotrar talan en su patrón más simple y, de esa manera, su plural se convertiría en talani. En este caso, Tolkien supuso que persistiría la justificación histórica de la forma. Las formas analógicas, no se desprecian en sus lenguas (ver por ejemplo la entrada PHILIK- en las Etym)...

El Quenya presenta el problema de la imposibilidad de predecir con seguridad la cantidad de formas que se han corregido con la justificación histórica. En el silencio subyace que las formas presentadas en este curso, igualadas en nombre de la famosa justicicación histórica, son muchas, convenientemente "aseadas" en una amplia complejidad de "irregularidades" que deberemos llevar lo mejor posible. No podemos estar seguros si es así como Tolkien vió su Quenya. Algunas de las complicaciones potenciales se tratan aquí ampliamente.

Uno de los problemas tiene que ver con el "aumento", la raíz vocal prefijada añadida a la raíz verbal en el tiempo perfecto: tul- "venir", frente a utúlië "ha venido". Cuando se prefija una vocal, en cualquier caso se cambia el ambiente fonético allá donde sigue una consonante. Si nos fijamos en la evolución del Quenya a partir del Elfico Primitivo, esto podría significar en algunos casos que la misma consonante es susceptible de cambio.

Tomemos por ejemplo un verbo como lanta- "caer". La mayoría de los escritores aseguran que su forma perfecta "ha caido" debe ser alantië. Un minuto y medio después de comenzar los créditos de La Comunidad del Anillo de Peter Jackson, podemos oir a Enya cantando mornië alantië "la oscuridad ha caido". La forma alantië se usa también repetidamente en este curso. Sin embargo, uno podría fácilmente deducir que el tiempo perfecto de lanta- podría ser arantië! ¿Porqué? Pues porque lanta- se deriva de la raíz DAT- o más concretamente de su variante infijo nasal DANT-. En el Primer Qenya la d- inicial del Elfico Primitivo se convirtió en l- (WJ:353; pudiendo excepcionalmente convertirse la d- en n-). Así pues, tenemos que lanta- "caer" deriva del primitivo dantâ-. Sin embargo, la d primitiva tomaba un camino muy diferente cuando no era inicial. Siguiendo a una vocal, se convertía en z y más tarde en r; por ejemplo: hemos desarrollado como mir "dentro" es, evidentemente, un significado que proviene del primitivo mi-da "en-a" (ver la nota en la Lección 14). Así, si el aumento del perfecto prefijaba la raíz DANT- antes de que la d- inicial se convirtiera en l-, el viejo adant- podría evolucionar hasta azant-, y luego a arant-, por lo que "ha caido" podría ser arantië en vez de alantië!

Si esto es correcto, otros verbos con idénticas formas podrían sufrir estos mismos cambios en el tiempo perfecto. En Quenya hay dos verbos lav-, uno significa "lamer" y el otro "permitir": el primero procede de la raíz LAB-, por lo que su l- inicial es la original; el segundo viene de la raíz DAB- y puede confundirse con el otro pero solo cuando la inicial d- se convierte en l-. Lav- "lamer" de LAB-, tendría a alávië como su correcta forma perfecta, mientras que lav- "permitir" de DAB- la tendría en arávië (la antigua azávië). Según este sistema, uno debería saber en cada caso si la l- inicial de cualquier verbo es la original o la derivada de la antigua d-, antes de construir su tiempo perfecto!

Pero aquí no acaba la cosa. Tan solo terminamos de abrir la Caja de Pandora de las potenciales complicaciones añadidas, ya que de repente, el Quenya aparece como algo más que un idioma "extremadamente difícil" según la definición del propio Tolkien (Cartas:403). Al igual que muchos lenguajes africanos de nuestro tiempo, el Elfico Primitivo no es ajeno a los principios de palabra nasalizados como mb-, ng-, nd-; seguramente el presidente sudafricano Thabo Mbeki será más capaz de pronunciar antiguas palabras élficas como mbundu "hocico", que la mayoría de los occidentales. En Quenya, la antigua inicial mb- se simplificó a m-: mbundu se convirtió en mundo (Etym, entrada MBUD-). La inicial original nd- del Elfico Primitivo se convirtió de igual manera en n- y, como ejemplo, está la palabra Quenya nulla "oscuro" que parece provenir de la más antigua ndulla (Etym, entrada NDUL-). La inicial original ng- pasó a ser primero ñ- tal y como Tolkien escribía a menudo el sonido de -ng-, similar al de la palabra inglesa king (pronunciado sin distinguir la -g-). Por ejemplo: tenemos ñoldo del primitivo ngolodô (técnicamente ñgolodô). Hacia la Tercera Edad, la inicial ñ- llegó a pronunciarse como una n- normal por lo que en LotR aparece el vocablo Noldor en vez de Ñoldor (aunque aparentemente en la escritura Tengwar se mantuvo la distinción entre ñ- y n-). Para resumir: las originales mb-, nd-, ñg-, se convirtieron respectivamente en m-, n-, ñ-, y en el Quenya hablado, la ñ- se fundió más tarde en n-.

Pero este cambio tan solo se produce cuando las viejas combinaciones iniciales mb-, nd-,ñg-, aparecen al principio de las palabras! Siguiendo a una vocal en el centro de las palabras, estas combinaciones sobreviven. Así pues, la raíz Quenya NDIL- que produce palabras relativas a la "amistad" o "devoción", permanece inalterable en un compuesto como Elandil "amigo de Elfo" (WJ:412), mientras que nd- se simplifica a n- en una palabra como nilmë "amistad". Compararlo con SD:421, donde Lowdham, el personaje de Tolkien, desarrolla este fenómeno (refiriéndose al Quenya como Avalonio). Lo que para nosotros es relevante, es que si un verbo que empieza en m- o n- se deriva de una raíz en mb- o nd-/ñg-, podríamos pensar que estas combinaciones sobrevivirían siguiendo el "aumento" que se produce en la formación del tiempo perfecto. Verbos como namba- "clavar" (raíz NDAM-), nanda- "machacar" (antiguamente ñanda-, raíz ÑGAM-) y mar- "morar, vivir" (raíz MBAR-), podrían perfectamente aparecer como andambië, angandië, ambarië en los tiempos perfectos. Por supuesto, los verbos que comienzan en n- y m- sin más durante toda su historia, no se comportarían así. Si una raíz verbal simple como nac- "morder" fuera así, sin más, sería bastante difícil predecir si el tiempo perfecto es anácië (raíz NAK-) o andácië (raíz NDAK-).

Los verbos que comienzan en h- son también problemáticos. A veces, la h- Quenya se deriva de la forma aspirada kh- del Elfico Primitivo (ver más adelante), la cual evoluciona a -h- también cuando sigue a una vocal, pero a veces, la h- parece venir de la primitiva sk-, como cuando la raíz SKAT- forma el verbo Quenya hat- "romper en pedazos". La primitiva sk- se convierte en h- solo al principio de las palabras. Siguiendo a una vocal, este grupo en ocasiones no cambia y, en otras intercambia sus consonantes formando ks- (o el vocablo regular x-); Tolkien es bastante inconsistente en esta materia. En Etym, entrada MISK-, cita el adjetivo miksa (o mixa) "mojado"; la cabecera de la entrada sugiere que la ks- de la palabra Quenya, proviene de la vieja sk-. En fuentes posteriores, Tolkien nos ofrece el grupo -sk- (sc) sobreviviendo inalterable en Quenya, como en rusco "zorro" (PM:353, VT41:10). Así, uno podría pensar que el tiempo perfecto de un verbo como hat- "romper en pedazos" no debiera ser ahátië, sino axátië o ascátië puesto que la raíz original es SKAT- y el perfecto debería por consiguiente, descender de askât-. Actualmente, aparece cierto verbo ascat- en un texto Quenya (tiempo pasado infijo nasal: ascantë, significando evidentemente "roto en pedazos" -ver SD:310, donde se usa el vocablo askante). En ascantë, la raíz vocálica prefijada se usa al parecer como intensificador y no como un aumento real del tiempo perfecto como tal, aunque quizá este aumento produjera un efecto similar en cualquier otra parte de la palabra.

Y, ¿qué hay de los verbos que comienzan en s-? La s- primitiva permanece inalterable al principio de las palabras, pero entre vocales suena generalmente como -z- y luego se funde en -r-. Así pues, el tiempo perfecto de un verbo como salpa- "sorber" quizá no sea asalpië, sino aralpië del viejo azalpië.

Por otro lado, si s- representa a la vieja F-(más o menos como la th- del inglés "thing"), podríamos verla también entre vocales: el tiempo perfecto de sinta- "desteñir" sería isintië, puesto que la raíz original es THIN- y la forma Quenya antigua, sería Finta-con el tiempo perfecto iFintië(esta ortografía se mantiene en las Tengwar). Pero resulta que la inicial Quenya s- también podría provenir del primitivo grupo de iniciales st-, el cual permanecería inalterable entre las vocales. Sin embargo, no se conocen verbos Quenya derivados de una raíz que empiece en st-. Quizá debamos agradecer ese detalle...

Tenemos entonces que la combinación primitiva sy- produce la hy- Quenya cuando es inicial, pero cuando va entre vocales la sy- se convierte aparentemente en ry- (como cuando Tolkien en las Etym deriva pirya "jarabe, sirope, almíbar" de la raíz PIS-; la forma primitiva de la palabra debería haber sido pisyâ). ¿Sería posible que el tiempo perfecto de un verbo como hyar- "surcar" (raíz SYAD-), fuera aryárië en vez de ahyárië? Y, ¿qué ocurre con la inicial hl-? Se deriva de la vieja sl-, una combinación que probablemente se convierte en -ll- entre vocales (al menos la primitiva sr- que al principio de las palabras produce la hr- Quenya, que, a su vez, es -rr- entre vocales: Tolkien derivó la palabra Quenya mirroanwë "encarnado" de la primitiva mi-srawanwe, MR:350). Así, ¿pudiera ser que el tiempo perfecto de hlar- "oir" fuera realmente allárië en vez de ahlárië?

Resumiendo: bajo el sistema general de Tolkien aparecen cantidad de complicaciones extras, si uno intenta desarrollar todas las variantes posibles que subyacen en la evolución fonética que imaginó. El aumento y la raíz vocálica prefijada que aparecen en el tiempo perfecto, parecen haber sido prefijados tan rápidamente que las consonantes subsiguientes no han tenido tiempo de asumir la forma inicial destinada a las consonantes en Quenya (en WJ:366, Tolkien cita algunos perfectos "prehistóricos" que llevan ya el aumento). Volviendo a nuestro primer ejemplo, la d- de la raíz DA(N)T- "caer" aún no se había convertido en l- como en lanta-, y así sería posible que el perfecto "ha caido" fuera (azantië>)arantië, al convertirse la d original en z y luego en r, siguiendo a una vocal. De esta forma, ¿podríamos llamar la atención a Enya diciéndole que en la grabación de su canción debería haber dicho mornië arantië en vez de mornië alantië?

No puedo asegurarlo. En este y en todos los otros casos fonéticos citados, resulta sencillamente imposible predecir la extensión del significado de la justificación histórica de Tolkien para con las formas que sucumbieron a la igualdad analógica -si estas igualdades aparecen en los verbos con aumento.

Realmente, ahora no podemos saber si Tolkien consideró alguna vez todas estas cosas. Según la historia que imaginó para el Quenya -que en la Tierra Media nadie tenía una lengua materna, tan solo un idioma ritual antiguo-, parece bastante probable que la gramática del Quenya del Exilio tendería a estar algo más simplificada.

Lanta- como el verbo que corresponde al nombre lanta, tendría el compuesto lasselanta "hoja caída, caída de hoja, otoño" (esta palabra aparece en el apéndice D de LotR, convirtiéndose en una forma absolutamente ortodoxa del Quenya). Si el compuesto fuera lo bastante viejo, "debería" haber sido **lasseranta, ya que la d original de DANT- es aquí intervocálica. Otra posibilidad que ya hemos considerado más atrás, es que los verbos derivados de las raíces originales en mb-, nd-, ñg-, preservarían aún estas combinaciones, siguiendo al aumento propio del tiempo perfecto, con lo que mar- "morar" de la raíz MBAR-, debería tener como perfecto a ambárië y no a amárië. Puede verse en las Etym, que Tolkien derivó la palabra Quenya andamunda "elefante" de la primitiva andambundâ "hocico largo" (ver la entrada MBUD-). Esta forma Quenya también hubiera podido ser **andambunda, si la -mb- original hubiera sobrevivido en esta posición. El segundo elemento "-hocicado", puede verse aquí alterado de -mbunda a -munda por analogía con algunas formas de mundo "nariz" (desciende del primitivo mbundu, inicial mb- que normalmente produce la m- Quenya). Por supuesto, podemos decir como se comportan las formas perfectas aumentadas de algunos compuestos; estas se percibirán probablemente como palabras unitarias, mientras que los compuestos son obviamente más una combinación de dos elementos que, usualmente, pueden figurar también como independientes.

En la medida en que no existen evidencias de lo contrario, los escritores pueden elegir en el tiempo perfecto las consonantes iniciales de los verbos que han sido reformados por la analogía con la forma no aumentada del propio verbo. No hemos querido hacer nuestro Neo-Quenya más complicado de lo que en definitiva quiso Tolkien hacer el suyo.

Un problema parecido tenemos con el prefijo "intensivo o superlativo" an- que se puede prefijar a los adjetivos (Cartas:279). Como se argumentó en la Lección Cinco, la n de este prefijo deba probablemente asimilarse a la siguiente consonante si fuera una de estas: l-, r-, s-, m-. Por ejemplo:

An+lauca "templado" çè allauca "el más templado"

An+ringa "frío" çè arringa "el más frío"

An+sarda "difícil, duro" çè assarda "el más difícil, el más duro"

An+moina "querido" çè ammoina "el más querido"

Ancalima "el/la más brillante", es el único ejemplo contrastado de este prefijo superlativo, y este no requiere asimilación (ya que el grupo -nc- se acepta también en la fonética Quenya). El sistema general, parece necesitar de las asimilaciones tal y como hemos explicado, con el fin de evitar los grupos imposibles -nl-, -nr-, -ns-, -nm- (aunque -ns- se permitió en algunas formas primigenias del "Qenya"). Un ejemplo paralelo implica al prefijo lin- "muchos" (aparece en la entrada LI- en Etym): en un adjetivo mencionado en MC:223: lillassëa "de muchas hojas, muy hojoso, teniendo/poseyendo muchas hojas", la -n de lin- aparece convertida en -l ante la otra l- (compararlo con lassë "hoja").

Sin embargo, un ejemplo de lin- que aparece en las Etym, tiene un interés especial: a partir del nombre norno "roble", se deriva el adjetivo lindornëa "teniendo/poseyendo/habiendo muchos robles". ¿Porqué lindornëa y no **linnornëa, siendo norno la palabra básica? Pues, porque norno "roble" se deriva de la raíz DORON- (bajo cuya entrada se encuentran estas palabras en Etym). Norno es uno de los casos excepcionales donde la inicial d- del Elfico Primitivo produce una n- en vez de una l- en Quenya. Sin embargo, cuando sigue al prefijo lin-, la d- original se preserva en Quenya: quizá el adjetivo lindornëa nos devuelva el primitivo lin-doronôyâ o algo parecido. Mientras que la inicial d- en Quenya cambia eventualmente a l- o n-, la combinación -nd- entre vocales permanece sin cambios.

La pregunta que surge ahora, es: ¿se puede aplicar el mismo principio al prefijo superlativo an-? Tomemos el adjetivo norna "rígido, fuerte", que Tolkien derivó de la raíz DORO- (WJ:413-14). Si añadimos el prefijo an-, "el más rígido/fuerte", ¿sería andorna en vez de annorna? Algo parecido ocurre con los adjetivos comenzados por l- originados a partir de d-: ¿debería una palabra como lumna "siniestro", derivada de la raíz DUB- en Etym, tener como forma superlativa a andumna como consecuencia de esta derivación? Si es así, uno debe en cada caso saber si la inicial l- o n- de un adjetivo es la original o procede de una d- original, antes de construir la forma superlativa.

Complicaciones similares aparecen en el caso de las iniciales m- y n- donde estas se simplifican de las originales mb- y nd-/ñg- (ver nuestro desarrollo de los perfectos con aumento, más atrás). El adjetivo marta "predestinado" parece evidentemente proceder del primitivo mbaratâ (la raíz MBARAT- de Etym), y bien pudiera ser que an-mbaratâ se convirtiera en ambarta en Quenya. El adjetivo nulla "oscuro" proviene explícitamente del antiguo ndulla (entrada NDUL- en Etym), por lo que "el más oscuro" debería ser andulla (por an-ndulla) en vez de annulla. Las palabras que originalmente tienen la inicial ñg- la muestran como ñ- (tal y como se ha descrito antes) en las formas más tempranas o históricas del Quenya, aunque se convirtieron en n- en la pronunciación de la Tercera Edad. Consideremos adjetivos como nóla "culto" o nwalca "cruel" (raíces ÑGOL-, ÑGWAL-): antiguos ñóla y ñwalca. Aplicando el prefijo an- produciríamos angóla y angwalca, si partimos de los primitivos an-ñgôla, an-ñgwalkâ, o posteriormente an-ñóla, an-ñwalca (convirtiéndose -nñ- en -ññ- en cualquier caso, y produciendo también esta combinación la -ng- Quenya -técnicamente -ñg-).

Los adjetivos que empiezan en v- también pueden ser problemáticos. A veces, v- proviene de la b- primitiva, y otras veces, de la w-. En la forma más antigua que se recuerda de la w- Quenya esta permanece inalterable, así que la diferencia original b- frente a w- se preservó como v- frente a w- (las palabras originales que empiezan con w- son escritas así por Tolkien generalmente, p.e.: wendë además de vendë "doncella". Parece que tras la inicial w- convertida en v-, la combinación -nw- permanecería sin cambios; p.e.: no hay pista alguna que indique que una palabra como anwa "real, actual, verdad" pueda convertirse en **anva. Así podemos decir que un adjetivo como véra "privado" se convertiría en anwéra si se le aplicase e prefijo an- ya que en el Viejo Quenya este adjetivo aparece como wéra (PM:340).

Por otro lado, un adjetivo con v- derivada de la original b- podría actuar de forma diferente. Varna "seguro" viene del original barnâ (raíz BAR-) y an-barnâ podría perfectamente convertirse en ambarna en Quenya, mediante la asimilación nb>mb. Así pues, aplicando correctamente el prefijo an-, ¿podemos saber si la inicial v- de un adjetivo Quenya viene de la b- o de la w-?

Al menos no hay duda de que los adjetivos que empiezan por w- eran originalmente anw- si se les aplicaba el prefijo an-; en la Lección Cinco, figura anwenya "el más verde" como un ejemplo posible de esto (Huy!! Wenya "verde" deriva de la raíz GWEN- y mientras que la inicial gw- se simplificaba a w-, el grupo ngw- sobrevivía entre las vocales... a lo mejor, "el más verde" debería ser angwenya entonces!! Bien: la palabra más común para definir "verde" es laica o laiqua...). La verdadera cuestión es si el prefijo an- puede simplemente añadirse sin más a las formas que empiezan en v-, sin tener en consideración el histórico escenario subyacente. Si wenya se convierte en venya, ¿podría ser anvenya "el más verde", independientemente de la fonética histórica? Quizá...

Tenemos un ejemplo paralelo que afecta al prefijo en- "re-, otra vez". En las palabras contrastadas envinyanta "renovado" (MR:405) y el título de Aragorn envinyatar "Renovador", vemos que simplemente se prefija a una palabra incorporando la forma contemporánea de vinya "nuevo". Si vinya viene de binyâ, entonces Aragorn "debería" haberse autonombrado **Embinyatar. Las formas comprobadas Envinyatar, envinyanta, sugieren que uno no siempre debe tomar en consideración toda la evolución que supuestamente subyace en las palabras tal y como aparecen en el Quenya de la Tercera Edad. No existe razón para creer que los prefijos en- y an- deban ser diferentes en ese sentido. Así pues, "el más nuevo" será simplemente (an-+vinya =) anvinya. Aunque si fue anwinya en las etapas antiguas, la forma prefijada también se hubiera podido ver alterada cuando winya se convirtió en vinya (aún cuando nw- permaneciera en palabras como anwa "verdad"). Este principio puede resultar relevante para muchos de los problemas potenciales que aquí se tratan.

También podemos considerar a las antiguas consonantes "aspiradas" kh, th, ph, pronunciadas más o menos como en "backhand, outhouse, scrap-head" (remitiéndome a mis propios ejemplos de la Lección Uno). En el Quenya, la inicial kh- fue primero ch- como el alemán ach; más tarde fue debilitándose hacia el sonido inglés de la h. La inicial original ph- se convirtió en la f- Quenya. La th- se pronunció al principio como la th inglesa (como en "think") y más tarde, este sonido derivó a s-. Así que las formas primitivas como kwithwâ, phirin-, thausâ produjeron los adjetivos Quenya hiswa "gris", firin "muerto" y saura "sucio" (relativo al nombre Sauron). No obstante, siguiendo a algunas consonantes, las aspiradas primitivas kh-, ph-, th-, perdieron su aspiración (el elemento -h-) y se convirtieron en las no aspiradas k, p, t. Estos sonidos han sobrevivido en el Quenya (k=c). Esta pérdida de aspiración tuvo lugar siguiendo a la -n-, desde el momento en que Tolkien derivó el verbo Quenya manca- "comerciar" de la raíz MBAKH- "intercambio": evidentemente este temprano mbakh sufrió una "infixión" (introducción) nasal, y nkh se convirtió en nk(nc) en manca-. Si hubiera pasado lo mismo siguiendo al prefijo superlativo an-, an-khithwâ, an-phirin- y an-thausâ se hubieran convertido en Quenya en anciswa, (anpirin>)ampirin y antaura: unas formas sorprendentes si se comparan con hiswa, firin, saura sin los prefijos. Este sistema podría llevarnos a confusión con otras palabras: ¿son los adjetivos taura "poderoso" y saura "sucio" lo suficientemente diferentes como para no poder compartir la forma superlativa antaura?!! En la entrada PHIR- de Etym (de la cual se deriva el adjetivo firin "muerto"), puede verse que Tolkien también menciona una palabra que significa "inmortal": ilfirin. En este caso, firin va suplementado con la partícula negativa il-. Curiosamente, Tolkien hizo notar que la forma ilfirin se presentaba como "para *ilpirin". En otras palabras: siguiendo a la -l-, el original ph- de la raíz PHIR- se convierte en -p-, por lo que la palabra en Quenya debería ser ilpirin, aunque Tolkien puso un asterisco en esta forma para indicar que no se usaba. Se reformó como ilfirin por analogía con la palabra firin. Así pues, probablemente lo correcto sea permitir a los adjetivos conservar sus consonantes iniciales normales aún cuando el prefijo superlativo an- figure delante de ellas.

Si empezamos a considerar como la evolución fonética subyacente afectaría a las formas declinables en Quenya, podrían surgir otras posibles complicaciones con los nombres terminados en -il que descienden de la terminación primitiva -la. La idea de Tolkien era que una palabra primitiva como makla "espada", se convirtiera primero en makl, ya que el final en -a corta desapareció muy pronto. Este makl se pronunciaba en dos sílabas: mak-l con una -l silábica al final (como en el inglés "little"). De forma eventual se desarrolló una nueva vocal -i- ante la -l silábica, así pues, la palabra resultante terminaba en -il. De esta forma, la original makla se convirtió en la macil Quenya. Otras palabras de este tipo, son: tecil "pluma" y hecil "proscrito" (del primitivo tekla, hekla).

Pero, ¿qué ocurre si algunas palabras deben llevar terminaciones de caso? Si por ejemplo, tenemos que añadir la terminación instrumental -nen a macil para expresar "con una espada", ¿debemos formarlo a partir del primitivo makla-nen?

Esta combinación podría tener un desarrollo distinto. En makla-nen la final -a de makla no es el final real, por lo que probablemente no se perderá. Se puede aducir que en Quenya la forma para definir "con una espada" justificada históricamente, sería algo como malcanen -ya que en Quenya el grupo -kl- cuando se halla entre vocales, se vuelve a -lk-=-lc- (p.e.: alcar "gloria" viene del primitivo aklar-; compararlo con el Sindarin aglar). Similarmente, "con una pluma" (tecil), sería telcanen, ya que tecil desciende del primitivo tekla.

Cuando se construyen formas de caso, ¿se permite tomar el camino más corto, esto es: comenzando por macil. Tecil, etc. y declinándolos como otros nombres? (el instrumental de macil sería entonces macilenen con una vocal conectora ante -nen, o macilden desde macilnen con la transformación normal -ln->-ld-). Se puede observar que tras derivar el nombre Quenya hecil "proscrito" del primitivo hekla, Tolkien también mencionó las formas masculina y femenina del mismo: hecilo (masculino) y hecilë (femenino) (WJ:365). Estas palabras parecen derivarse añadiendo simplemente las terminaciones del masculino (-o) y del femenino (), a la palabra hecil como si se tratara de una forma Quenya contemporánea: la terminación masculina -o, desciende probablemente del primitivo , y el primitivo hekla-ô podría convertirse en **helco en Quenya -aunque esta forma no aparece. Si las terminaciones derivadas se pueden añadir al nombre hecil sin más complicaciones, tal vez también sea lícito añadir las terminaciones de caso a estos nombres acabados en -il, sin que nada raro le ocurra a la raíz del propio nombre. Otra vez puede que no sea necesario tener en cuenta toda la historia del desarrollo que supuestamente ha dado lugar a las formas contemporáneas ("sincrónicas", como prefieren llamarlas los lingüistas) de los nombres.

Como ya he indicado, actualmente no existen respuestas a estas cuestiones. Hemos tocado de pasada algunas de las potenciales implicaciones del sistema general de fonética de Tolkien, el cual es inseparable de su visión de cómo debía desarrollarse el Quenya a partir de las más antiguas formas del élfico. Como hemos visto, hay algunos indicios de que la igualdad analógica se permite en ciertas ocasiones, pero también hay ejemplos que apuntan en la dirección contraria. Solo las futuras publicaciones podrán darnos más luz acerca de estos problemas, teniendo en cuenta que Tolkien desarrolla muchas materias en sus manuscritos. Habrá ciertamente algunas pistas que nos den idea del profundo interés de Tolkien por la histórica evolución de sus lenguas (lo que a él seguramente le parecería más importante que sus "modernas" o "sincrónicas" manifestaciones).

VARIACION DE LA RAIZ:

En la Lección Tres de este curso, se presentó un hecho importante del Quenya: en algunos casos, la forma simple de una palabra (sin adiciones), sufre ciertas variaciones cuando debe llevar algún apéndice añadido. Es el caso de la forma talami, el plural de talan "suelo, piso, planta", que no es **talani, debido a que la raíz tiene la forma talam-. De manera habitual, la forma de la raíz refleja como aparecía la palabra en las épocas más antiguas de la lengua (p.e.: talam se convirtió en talan porque en una época determinada en el Quenya no se toleró durante mucho tiempo una final -m, y se cambió al sonido más cercano permitido: la -n). Para tranquilizar a todo el mundo, yo mismo escribí: "El estudiante no debe desesperar pensando que toda suerte de cosas extrañas van a ir sucediéndole en el momento en el que intente añadir un sufijo a una palabra Quenya, ya que no existe un margen muy amplio de error, no hay muchas posibilidades para equivocarse (o al menos, no demasiadas cosas que memorizar). La mayoría de las palabras Quenya parecen comportarse bastante bien, no ofrecen formas distintas de raíz que haya que recordar; se añade la terminación y...eso es todo!!". Ahora vamos a intentar hacer un exámen de las palabras concretas que tienen formas especiales en su raíz.

El mismo Tolkien se refirió a estas formas radicales de varias maneras. A veces, las relacionaba como nosotros aquí, con un guión en el lugar en el que se debe insertar la terminación, p.e.: nén, nen- "agua" (Etym, entrada NEN-). Esto indica que, el plural "aguas" será neni en lugar de **néni. Otras veces, Tolkien menciona una forma completamente enfática, la mayor parte de las veces el plural o el genitivo (que en Etym aún tiene la terminación -(e)n en vez de -o; en el Quenya estilo LotR, estas formas son aún presumiblemente válidas, aunque deberían tomarse como dativo). El hecho es que talan "suelo, piso, planta" tiene la raíz talam-, y Tolkien lo indica citando el plural talami (ver Etym, entrada TAL-, TALAM-). En la misma entrada, menciona también la palabra tál "pie". Ante las terminaciones, esta palabra aparece como tal-, con una vocal corta, y para indicar esto, Tolkien citó la forma "g.sg." ("genitivo singular", más tarde "dativo singular") talen.

Resumiendo varios grupos de formas radicales, nos sale un cuadro como sigue: algunos pocos nombres, que tienen sus formas simples terminadas en -n, -r o -l, y que tienen su forma radical con una -d- añadida a la consonante en cuestión:

* andon "gran puerta">andond-

* car "construcción, casa", también "hazaña">card-

* falmarin "ninfa, espíritu del mar">falmarind-

* fion("halcón"(?) -la glosa de Tolkien era ilegible) fiond- (también fion- solo).

* hen"ojo">hend-

* hwan"esponja">hwand-

* Laurelin(el nombre del Arbol Dorado de Valinor)> Laurelind- (también Laureling-; ver más adelante)

* Lórien(nombre de un sitio)>Lóriend- (locativo Lóriendessë en RGEO:66)

* meren "festejo">merend-

* neltil "triángulo">neltild-

* óman "vocal">omand- (p.e.: el plural omandi se encuentra mal impreso o mal interpretado como amandi en la entrada OM- en Etym, tal y como se halla publicado en LR; no obstante se puede dar como correcto que la vocal larga inicial se convierta en corta)

* pilin"flecha">pilind-

* sar"piedra (pequeña)">sard-

* Solonel"Elfo Teler">Soloneld-

* Taniquetil(nombre de una montaña)>Taniquetild- (pero en el ablativo, la forma contraída Taniquetillo quizá sea una opción mejor que Taniquetildello)

* wen"chica, doncella">wend-

* wilwarin"mariposa">wilwarind- (en esta palabra y en la anterior, deberíamos leer "v" en lugar de la vieja "w" del Quenya del Exilio).

En Namárië encontramos la palabra oromardi, traducida como "altas estancias". Como quiera que mardi es el plural de la forma mar- "casa" (como los de car- y sar- que son cardi y sardi), la palabra mar también pertenece a esta categoría. Pero mardi podría ser también el plural de mardë "estancia", la cual no está confirmada de forma diferente.

¿Debe la terminación -on, que se encuentra en nombres masculinos (p.e.: Ancalimon, Sauron), convertirse en -ond- ante una terminación? Tolkien nos informa de que Sauron proviene del viejo Tahurond (Cartas:380). Así pues, ¿será Saurondo el genitivo y Sauronden el dativo? Por otro lado, las terminaciones patronímicas -ion "hijo" e -iel "hija", no varían evidentemente (es decir: no las convertiremos en **-iond- e **-iel-), aunque correspondieran a las palabras independientes yondo, yeldë:

En PM:192,196 al igual que en 441, encontramos Isildurion: en vez de **Isilduriondi "los herederos (literalmente: "hijos") de Isildur", y de igual manera Anárioni en lugarde **Anáriondi "los herederos de Anarion". Así pues, las terminaciones patronímicas -ion "hijo de..." y (seguramente de igual manera) -iel "hija de...", no cambian ante los sufijos gramaticales. Probablemente, estas terminaciones representan las formas más simples de las raíces YON-, YEL-, mientras que las formas independientes yondo, yeldë incluyen un "alargamiento" de la consonante media (-n- convertida en -nd- y -l- convertida en -ld-).

NOTA: La terminación -riel del nombre Altariel "Galadriel", no tiene nada que ver con -iel "hija de..."; es simplemente una forma contraída de riellë "dama engalanada", por lo que el nombre se convierte en Altariell- en vez de permanecer como **Altariel- ante una terminación (genitivo: Altariello "de Galadriel" en RGEO:66).

Otras terminaciones frecuentes en los nombres, como -dil o -nil "amigo, amante", tampoco se convierten en **-nild-, **-dild- ante una terminación, aunque esta se corresponda con las palabras independientes nildo, nildë "amigo" (masculino y femenino, respectivamente). Esto queda evidenciado en la forma Nendili "amantes/amigos del agua" en WJ:441 (no: **Nendildi. Una vez más, la terminación debe asumir la representación de la forma más simple de la raíz original NIL-, NDIL-.

Algunas raíces añaden una -t (históricamente hablando, diremos que la -t final se ha perdido en las forma simples):

* oron" montaña">oront-

* umbar" fe, destino">umbart- (similarmente en el nombre Turambar®Turambart-, conteniendo ambar(t)- como otra palabra definiendo "destinado" y no relacionada con Ambar "mundo"; la forma instrumental de ambar está confirmada como ambartanen).

* Mandos (nombre cotidiano del Vala Námo, y más propiamente, el lugar en el que habita)>Mandost-.

Ya que el elemento final de coimas "lembas, pan de la vida", es una forma reducida de masta "pan" (Etym, entrada MBAS-), coimas podría convertirse en coimast- ante las terminaciones. Compararlo con Mandos, Mandost-; el elemento final de este nombre sería una forma acortada de osto "castillo, fortaleza, ciudadela, ciudad fortificada". En sus últimos escritos, Tolkien ya experimentaba con massa (no masta) como una palabra con el significado de "pan", por lo que coimas quizá tenga la raíz coimass-.

Algunas raíces son contraídas. Esto es un simple reflejo de la "síncopa" Quenya regular (este es el proceso por el que la segunda de dos vocales cortas e idénticas, desaparece en una palabra de más de dos sílabas, como cuando la primitiva galadâ "árbol" produjo la Quenya alda; advirtamos como la segunda -a- de la palabra primitiva ha desaparecido). En este caso, la forma de la raíz no refleja la forma más antigua de la palabra; se ha acortado. La lista que sigue, cubre con excesiva confianza la mayoría de las raíces contraídas mencionadas en los escritos publicados de Tolkien:

* coron"globo, pelota">corn-

* feren"haya (árbol)">fern-

* haran"cacique">harn-

* huan"perro de caza, podenco">hún-

* laman"animal">lamn- (existe también la forma no contraída laman-)

* nelet"diente">nelc- (con contracción y variación t/c; ver más adelante)

* seler"hermana">sell- (por el viejo selr- o el actual sels-, ya que la raíz es THELES-)

* soron"águila">sorn-

* toron"hermano">torn-

En poesía, el nombre elen "estrella" puede aparecer a veces en la forma contraída eld- (plural: eldi, representando al viejo elni [conservado aún así en el dialecto Telerin]; el desarrollo Quenya ln>ld es regular). Sin embargo, por analogía con la forma simple, este nombre conservó la raíz completa elen- aún cuando esta aparezca con terminaciones (plural: eleni en Namárië). Ver WJ:362.

NOTA: La terminación posesiva -va podría aparecer como -wa cuando se añade a nombres terminados en consonante. Es probable que las raíces contraídas no se usen cuando va añadida la terminación de caso, p.e.: la forma posesiva toron "hermano", sería más como toronwa y no como (?)torneva con una raíz contraída+una vocal conectora -e-. Añadiendo -wa tras la consonante final de una palabra, se origina un grupo de consonantes (como -nw- de nuestro ejemplo toronwa) y entonces, no tiene caso la síncopa de la vocal precedente (toronwa no se puede convertir en **tornwa). El mismo principio se puede aplicar a las formas locativas cortas terminadas en -së (en lugar de la terminación completa -ssë, la cual podría necesitar de una vocal conectora colocada delante, en el caso de que no hubiera ya una vocal). Como se explicó en la Lección Quince, la terminación más corta -së parece poder añadirse a los nombres acabados en -t y en -s, o bien ir siguiendo a los nombres terminados en -n y -l, la terminación del locativo podría aparecer como -dë (cambiado de -zë, derivado al original -së); así pues, Tolkien usó meneldë y cemendë como las formas locativas de menel- "cielo" y cemen- "tierra" (VT43:16,17). Aunque coron "bola, pelota" se contrae generalmente a corn- ante las terminaciones, el locativo "en una bola/globo", podría ser corondë -aunque cornessë sería una alternativa también válida. El instrumental, sería probablemente coronnen y no **cornenen.

Las terminaciones en -s de algunas raíces, deberán doblarse ante la terminación de caso:

* eques"diciendo">equess-

* lis"miel">liss-

* nís"mujer">niss-

* Tulkas(el nombre de un Vala)>Tulkass-

Advirtamos como la -í- larga de nís, se convierte en corta ante el grupo de consonantes en niss- (la forma más simple nís, aparece en MR:213, sustituyendo quizá a la forma obsoleta con vocal corta nis que se menciona en Etym, entradas NDIS-, Nι-, NIS-)

MISCELANEAS DE LA VARIACION RADICAL:

* caimasan "dormitorio">caimasamb- (en la primera palabra, -san es una forma reducida de sambë "habitación". Otros compuestos terminados en -san "habitación, cámara", podrían darse de la misma manera)

* filit "pajarito">filic- (originalmente la raíz es terminada en -c, aunque por el desarrollo de la lengua, la palabra que termina en -c no puede alargarse más y deberá cambiarse por -t sin ocupar una posición final, sino "soldada" a la terminación propiamente dicha que seguirá siendo -c. Compararlo con nelet, nelc- más adelante)

* halatir "martín pescador">halatirn- (con una -n extra, ya que el segundo elemento del nombre se deriva de tirno "vigilante"; el nombre Quenya del pájaro significa "pez vigilante")

* Laurelin "L">Laureling- (o Laurelind-; ver más adelante)

* miril "joya brillante">mirill-

* nelet "diente">nelc- (con contracción y variación t/c; la base para las palabras como "diente" se dá como NÉL-EK- en Etym)

* noa, nó "concepción">nów- (pudiera ser que la forma de la raíz fuera solo nó-; Tolkien no es muy claro a este respecto. Citó el plural de como nówi, por lo que noa podría tener a noar como plural)

* peltas "eje">peltax-

* quelet "cadáver">quelett- (Tolkien relacionó una forma arcaica Kwelett- cuyo plural en Quenya sería queletsi; este plural refleja la idea de que una t- ante una -i átona, puede convertirse en -s-. Otra forma de Etym: maisi como plural del adjetivo maitë "manual" -aunque hay algunos indicios que podrían demostrar que tiempo después Tolkien abandonó esta idea, así que el plural de quelet podría ser simplemente queletti)

* quesset "almohada">probablemente quessec- (aunque la conocida o correspondiente palabra en "Noldorin/Sindarin" pesseg indica que la forma primitiva es kwessek-; filit con raíz filic- de PHILIK-, con la "N/S" conocida fileg)

* "león">ráv-

* Silmaril "Silmaril">Silmarill-

* talan "piso, planta, suelo">talam- (un caso similar al que se ha mencionado del cambio de -c- por -t-; originalmente, la raíz terminará siempre en -m)

* "lana">probablemente tów- (de TOW-, nó, nów de NOWO-)

* tol "isla">toll- (plural: tolle, con arreglo a Etym, entrada TOL²-. No existen más ejemplos de plurales terminados en , y quizá LT1:85 cuente con la forma más regular: tolli, lo que indicaría que tolle sería una lectura deficiente o una errata de imprenta)

* yat "cuello">yaht-

El nombre del Arbol Dorado de Valinor, Laurelin, se interpretaba usualmente como "Canción (lindë) de Oro" y tenía la raíz LAURELIND- ante las terminaciones. Pero este nombre, se interpretaba también como "colgante de oro" (linga- "colgar") y consecuentemente se convertía en LAURELING- cuando había que añadirle una terminación (Etym, entrada LIN²-). Los escritores pueden escoger la forma que prefieran.

Como quiera que amil "madre" parece ser una forma acortada de la más larga amillë (VT44:7), es probable que amil tuviera la raíz amill-, genitivo: amillo "de madre".

Las formas terminadas en -t con sus raíces acabadas en -c, requieren atención especial. Hemos mencionado filit "pajarito" (filic-), nelet "diente" (nelc-) y quesset "almohada" (probablemente quessec-). Si añadimos la terminación -wa para obtener el posesivo, seguramente la combinación c-w sea igual a q-u, así obtendríamos (filic-wa =) filiqua "de un pajarito", nelequa "de un diente" (en este caso sin contracción, aunque nelqua sería una forma también posible en Quenya), y quessequa "de una almohada".

Si añadimos la terminación corta del locativo: -së, la combinación resultante es c-s, que podría cambiarse a -x- con arreglo a la ortografía que hemos adoptado aquí: filixë "en un pájaro", nelexë "en un diente" (definitivamente aquí sin contracción, ya que **nelxë es imposible), y quessexë "en/sobre una almohada". Pero con toda certeza, también podríamos usar la vocal conectora -e- y emplear la terminación completa del locativo: -ssë: filicessë, nelcessë, quessecessë.

También se puede decir que los nombres con raíces -m- (-n en las formas más simples), seguirían mostrando la -n- ante la terminación posesiva -wa: el viejo -mw- se convirtió en el -nw- Quenya (ver VT41:5: Tolkien derivó el nombre sanwë "pensamiento", del viejo sam-wê). En cualquier caso, la forma posesiva de talan, talam- "piso, planta, suelo" seguirá siendo talanwa y no **talamwa. ¿Qué sucede con el locativo? A menos que no usemos talamessë con una vocal conectora ante la terminación larga -ssë, talam-se con la terminación más corta acabaría siendo talamze y después talandë, una vez más cambiando la -m- por la -n- como ocurre en la forma más simple, aunque por diferente razón: parece ser que el viejo -md- se convierte en -nd- en Quenya, a raíz de que Tolkien en Etym, derivó pilindi "flechas" de la raíz PÍLIM-. Esta forma plural debe reflejar el viejo pilim-d-î, el grupo -md- convertido en -nd-.

VARIACIONES DE LA VOCAL:

Algunos nombres acortan la vocal larga ante una terminación (o, hablando con propiedad histórica, diremos que la vocal es larga cuando no existe ninguna terminación):

* nén "agua">nen-

* nér"hombre">ner-

* quén"persona">quen-

De acuerdo con la entrada YEN- de Etim., la vocal larga de yén "año largo", se convierte en corta ante una terminación (yen-), aunque en Namárië la forma plural empleada en yeni, con la vocal larga intacta (ver también en VT44:13, la traducción del propio Tolkien de una parte del Gloria in Excelsis Deo, donde tenemos el genitivo plural yénion). Parecería que Tolkien alteró la última etimología de la palabra, por lo que habría ya una vocal larga en las épocas primitivas del lenguaje Elfico. Si queremos definirlo desde una perspectiva "interna", podríamos sostener la teoría de que en el último Quenya del Exilio, el viejo sistema quebró, por lo que la vocal larga se usaba "en todas partes" por analogía con la forma más simple. Si es así, Galadriel podría ser responsable del uso de plurales como (?)néni, (?)néri, (?)quéni "aguas, hombres, personas", aunque con arreglo al viejo y clásico sistema tendrían que haber sido: neni, neri y queni (las formas neri y queni se hallan comprobadas explícitamente).

Existen también ciertas palabras en las que la vocal en la sílaba final de la forma simple, se convierte en vocal larga ante las terminaciones:

* Eruin"Niño de Eru">Eruhín- (como en el plural: Eruhíni; la vocal larga de la palabra independiente hína "niño")

* Valatar"Rey Vala">Valatár- (plural: Valatári; la vocal larga de tár "señor, rey")

* Casar "Enano">Casár- (plural: Casári, o simplemente Casari, WJ:388,389,402)

Los dos primeros ejemplos demuestran como la vocal larga de una palabra se acorta habitualmente cuando la palabra (o una forma reducida de ella, como -hin de hína), aparece al final de un compuesto. Ante las terminaciones se preserva la vocal larga. Como ocurre con Casar, supuestamente una forma prestada del término Khazâd del idioma Khuzdul (idioma de los Enanos).

El propio término Khazâd es, en sí mismo, el plural "Enanos" (en una conversación actual con Enanos, Casar sería más amable, más cortés y más políticamente correcto que Nauco, el cual se deriva del adjetivo nauca "canijo"). Evidentemente es la á larga del término Khuzdul la que se refleja en el plural Quenya Casári.

Atanatári "Padres de los Hombres" (PM:324), es el plural de Atanatar "Padre del Hombre"; esta forma singular está registrada como el nombre propio o personal de uno de los reyes de Gondor (apéndice A de LotR). Advirtamos el alargamiento de la -á- en la forma plural (al igual que en el genitivo plural Atanatárion, MR:373 -en esa fuente, este es el título de una colección de leyendas traducido como "Legendarium de los Padres de los Hombres"). Estos ejemplos indican que la forma plural de atar "padre" es generalmente atári, así como el plural de Casar es Casári, ¿podría entonces atar tener la raíz atár-? Yo creo que no, puesto que en las Etym, el plural de atar es solo atari (entrada ATA-). Suponiendo que Tolkien cambiara de opinión acerca de esto último, es posible que un compuesto largo como Atanatar "Padre del Hombre" no se comporte de igual manera que la forma simple atar "padre". Una forma plural como (?)Atanatari, acentuada en -nat-, hubiera sonado bastante difícil; quizá esto sea porque la vocal de la sílaba siguiente se ha alargado para recibir el énfasis: Atanatári. Puede verse escrito en algunas de las primeras fuentes antes de que Tolkien cambiara la terminación del genitivo de -(e)n a -o, el genitivo de Ilúvatar "Padre de Todos" era Ilúvatáren (LR:47,72). Sin embargo en la entrada "Niños de Ilúvatar" en el índice de Silm, aparece el genitivo revisado del mismo nombre, como Ilúvataro, sin alargamiento de la -a- en la segunda sílaba desde el final. Podríamos pensar que debe leerse (?)Ilúvatáro (aunque acentuando Ilúvataro en -vat-, obtendríamos una acentuación misteriosa).

Anar "Sol" originalmente era Anâr, con una vocal larga en la segunda sílaba desde el final (Etym, entrada ANÁR-, también en SD:306). Con arreglo a lo que Tolkien escribió en la Carta Plotz, el acortamiento de las vocales largas en la sílaba final de las palabras polisílabas, es un hecho en el Quenya del Exilio.

Puede que esta sea la vocal larga que se conserva en el nombre Anárion (hijo de Elendil y hermano de Isildur); el nombre parece significar "Hijo del Sol". ¿Sería el genitivo plural ("de soles") algo parecido a anárion, dando esto lugar a una supuesta existencia de un plural anári, de un genitivo anáro, etc., etc...? No lo sabemos seguro. Parece ser que en una palabra de tres sílabas, la vocal larga en la del centro se acorta (así pues, el énfasis se trasladará a la sílaba inicial de la palabra). P.e.: naraca "áspero" fue relacionado por el propio Tolkien con el viejo narâka (Etym, entrada NARÁK-). Si narâka puede producir el Quenya naraca y no **naráca, eso querrá decir que una forma plural como (?)anári "hijos" podrá igualmente convertirse en anari. El hecho es que la vocal larga sobrevive en Casári "Enanos", y eso se explica fácilmente: esto se presenta como un último préstamo del término Khuzdul Khazâd, y no como una palabra heredada. En efecto, Casári se puede sustituir por Casari (y seguramente ocurra lo mismo en otras formas con terminaciones del tipo de: Casáro o Casaro, como genitivo singular "del Enano"). Ver WJ:388.

En ocasiones el sonido de una vocal final es diferente ante las terminaciones (cambiando una vocal por otra y no simplemente la misma vocal acortada o alargada, como hemos visto antes).

Las palabras terminadas en y -o presentan a veces variaciones radicales cuando se les añaden terminaciones: en el caso de que deriven de las finales cortas -i e -u del Elfico primitivo, se mantendrán las terminaciones -i e -u donde vayan seguidas por una terminación de caso. Esto ocurre continuamente en las formas del aoristo de los verbos primarios: topë "cubrir"çètopin"yo cubro" (la forma topë desciende del viejo topi). En el caso de los adjetivos terminados en , representando casi siempre a la antigua -i, la cualidad original de la vocal se conservaría en la mayoría de los casos. Ocurre a menudo cuando los adjetivos son compuestos, como morë "oscuro, negro"çèMoriquendi"Elfos Oscuros" (ver en Silm este último término). Hay algunas excepciones; ninquë "blanco" viene del primitivo ninkwi y debería tener la raíz ninqui-, aunque vemos ninque- en el nombe Ninquelótë "Flor Blanca" (ver el apéndice del Silm, entrada LOTH-). En el caso de carnë "rojo", Tolkien simplemente usó carne- en la primera edición de LotR en el compuesto Carnemírië "adornado con rubíes" (el fresno de la canción del Ent Bárbol; ver "Las Dos Torres", capítulo 4, libro 3; compararlo con la entrada CARAN- en el apéndice de Silm). Carnemírië también aparece en Cartas:224. Carnë se deriva del primitivo karani y por consiguiente, debería tener la misma raíz carni-. Aparentemente, Tolkien en la segunda edición revisada de LotR, corrigió Carnemírië a Carnimírië. La forma Ninquelótë parece bastante normal, ya que ninqui- se encuentra comprobado como forma radical de ninquë "blanco", en la palabra ninquilda "más blanco". Esta forma se publicó en Tyalië Tyelelliéva #16, pág.24, donde Lisa Star presentó evidencias de una forma de Quenya (o "Qenya") que tenía a -lda como terminación del comparativo.

Estos adjetivos terminados en se distinguen por tener (o deducimos que tienen) sus formas radicales terminadas en -i:

* carnë(carni-) "rojo" (primitivo karani, Etym, entrada KARAN-)

* fortë (forti-) "del Norte" (?)(primitivo phoroti, de lo que deduzco que viene del "Noldorin/Sindarin" forod, con arreglo a la entrada PHOR- en Etym; sin embargo, la palabra Quenya más usual que define "del Norte" parece ser formenya)

* lúnë(lúni-) "azul" (primitivo lugni, Etym, entrada LUG²-, pero en Namárië la forma plural del adjetivo "azul", figura como luini, quizá del singular luinë, ya que es bastante posible que este tuviera también la raíz luini-)

* maitë(maiti- o maisi-) "hábil, mañoso" (primitivo ma?iti, Etym, entrada MA?-)

* morë (mori-) "negro" (primitivo mori, Etym, entrada MOR-)

* nindë(nindi-) "frágil, delgado" (la cabecera de entrada NIN-DI- en Etym, parece representar una palabra primitiva como nindi)

* ninquë(ninqui-) "blanco" (primitivo ninkwi, Etym, entrada NIK-W-)

* nítë(níti-, n/si-) "húmedo, rociado" (primitivo neiti, Etym, entrada NEI-)

* ringë (ringi-) "frío" (la cabecera de entrada RINGI- en Etym, representa aparentemente a una palabra primitiva, no solo a una raíz -aunque tiempo después Tolkien parece que cambió la palabra Quenya que define "frío" a ringa)

* sindë (sindi-) "gris" (primitivo thindi, PM:384 y Etym entrada THIN-)

* varnë (varni-) "marrón, moreno, marrón oscuro" (Tolkien hace explícita mención de la forma radical en Etym, entrada BARÁN-, así pues, la forma primitiva sería barani; compararla con carnë que se ha visto antes)

* vindë (vindi-) "pálido (azul o gris)" ( la forma primitiva windi se dá en las Etym, entrada WIN-/WIND-)

Parece que, virtualmente todos los adjetivos Quenya terminados en , representan a las formas primitivas terminadas en -i, y pertenecerían a esta lista (terenë "esbelto" del primitivo terênê sería la única expresión que se me ocurre ahora). Muchos de los adjetivos terminados en -i definen colores, como se ha visto en la lista anterior.

Ciertos nombres terminados en , pueden tener sus formas radicales acabadas en -i, la cual cambiaría ante las terminaciones y cuando aparece más de un nombre en el primer elemento de un compuesto. La que sigue, sería una lista parcial de algunos de esos nombres (no están incluidos los del material "Qenya" más temprano de Tolkien):

* ehtë (ehti-) "lanza" (desde Etym, Tolkien derivó esta palabra de EKTI- en vez de hacerlo de EKTE-, como hizo al principio)

* finë (fini-) "un pelo" (primitivo phini, PM:362; Finicáno como el nombre Quenya de Fingon en algunos bocetos PM:361 nº.35, aunque más tarde, Tolkien lo cambió a Findecáno, usando otra palabra para definir "pelo")

* hísë "niebla" (primitivo khîthi, Etym entrada KHIS-, KHITH-; también el compuesto Hísilómë, el nombre de un sitio que se menciona en Silm)

* linwë (lingwi-) "pez" (primitivo liñwi, Etym entrada LIW-; el compuesto lingwilócë "pez-dragón, serpiente de mar" en Etym entrada LOK-)

* lírë (líri-) "canción" (el instrumental lírinen en Namárië)

* lómë (lómi-) "noche" (primitivo dômi-, Etym entrada DOMO-; SD:415, confirma explícitamente esta forma radical)

* nengwë(nengwi-) "nariz, hocico" (la cabecera de la entrada NEÑ-WI- en Etym, representaría a una palabra primitiva completa y no solamente a una raíz)

* noirë (noiri-) "tumba" (compuesto Noirinan "Valle de la Tumba", "Valle de las Tumbas", UT:166 -a menos que el significado de este compuesto contenga la forma plural noiri "tumbas")

* porë (pori-) "comida" (primitivo pori, Etym entrada POR-)

* súrë (súri-) "viento" (caso instrumental: súrinen en Namárië)

* rincë (rinci-) "ostentación" (primitivo rinki, Etym entrada RIK(H)-)

Debemos sin embargo advertir, que las formaciones adjetivales derivadas de estas palabras mediante la adición de -a a la vocal final, no provocará que la se convierta en -i. Esto es evidente en el ejemplo nengwëa "nasal", un adjetivo derivado de nengwë "nariz" (Etym, entrada NEÑ-WI-). Quizá la esperada forma **nengwia sea alterada por analogía con los otros muchos adjetivos acabados en -ëa.

En Etym, la palabra Quenya para decir "día" es arë derivada de ari (AR¹), por lo que la forma radical sería ari-, pero Tolkien cambió después esta palabra por aurë. Que esta última tenga sin embargo la forma radical (?)auri- es incierto y bastante dudoso.

La lista anterior de nombres tan solo comprende los ejemplos que Tolkien mencionó explícitamente con la forma primitiva terminada en -i, o aquellos en los que la raíz -i se puede observar directamente en algunas formas declinadas o compuestas. Por supuesto, existen muchas palabras terminadas en cuya forma primitiva no se cita, y así, no podemos tener la completa seguridad de si la terminación Quenya deriva de la -i corta (en cuyo caso pertenecería a la lista anterior), o de una antigua (en cuyo caso la Quenya no cambiaría sus cualidades siendo final). Se puede no obstante asumir que, el nombre tallunë "planta del pie", es una raíz -i (talluni-), ya que deriva del viejo talrunya (Etym, entrada RUN-. Probablemente la idea es que talrunya produjo el talruny del Eldain Común, tras la pérdida de la -a corta final, y que la consonante -y- se convirtió en la vocal -i- (talruni, la forma que directamente subyace en la tallunë Quenya). Comparar la evolución aparente de la palabra ango, angu- de raíz -u, que proviene de angwa mediante angw y angu; ver más adelante.

De forma paralela a la raíz -i, hemos mostrado solo la raíz -u, viendo a la -o como vocal final de la forma más simple, pero siendo una -u- ante las terminaciones. Allá donde la forma simple de varios nombres termina en -co o en -go, el plural nominativo termina en -qui o en -gwi, respectivamente (en lugar de hacerlo en -cor y -gor como sería lo "normal"). Compararlo con WJ:390, donde Tolkien establece que urco "espectro, Orco" debe descender de urku o uruku, porque su plural es urqui. La implicación es que si urco descendía de ur(u)kô, su plural debería haber sido **urcor. En el caso del nombre tulco "soporte, puntal", derivado de tulku (Etym, entrada TULUK-), Tolkien no anotó nada acerca de la forma plural pero, dada la derivación, probablemente sería tulqui en vez de (?)tulcor (o, ¿porqué no (?)tulcur).

NOTA: Telco"pierna" es un caso especial, su plural es telqui, pero Tolkien estableció a esta forma como "analógica" (Etym, entrada TÉLEK-). Parece ser que telco no sería en realidad una raíz -u; el plural telqui se forma simplemente por analogía con el plural de otros que SI son realmente de raíz -u. Aragorn es la traducciónQuenya de "zancos, trancos", Telcontar parece tener algo que ver con telco "pierna" (podría ser el verbo telconta- "usar la pierna" . "Andar a zancadas" se implica en eso), y el hecho es que no vemos **Telcuntar que nos confirmaría que telco "pierna" no es una raíz -u a pesar de su forma plural.

Como ya se ha visto, solo los nombres terminados en -co derivados del antiguo -ku, tienen sus plurales acabados en -qui (=-cwi), los nombres terminados en -go derivados del antiguo -gu, tienen las formas plurales acabadas en -gwi. El nombre ango "serpiente", tiene la raíz angu- como resulta evidente en el compuesto angulócë "dragón", que aparece en Etym, entrada LOK- (literalmente "serpiente, bicho", compuesto de ango y lócë), y la entrada ANGWA- confirma que ango tiene el plural angwi (en este caso la -u de la raíz parece haberse desarrollado a partir de una -w original, la cual se ha convertido ante la pérdida de la -a corta final en el Eldarin Común: angwa>angw, y después angu, produciendo el angu, angu- del Quenya). El nombre lango "garganta" tenía de igual manera el plural langwi, al proyectar Tolkien deliberadamente su derivación de langu, cambiándolo después de lango a lanco. Ver las entradas LAK¹-, LANK- en Etym. Pudiera ser que la sustitución de lanco tuviera también su origen en la derivación a partir de lanku, en cuyo caso, debería tener la raíz lancu-, y su plural sería lanqui, aunque nada de todo esto está comprobado.

Aunque no se halla incluida en el material "Qenya", esta lista abarcaría supuestamente todos los conocidos de raíz -u:

* ango (angu-, plural angwi) "serpiente" (Etym, entrada ANGWA-, compuesto de angu-: angulócë en Etym, entrada LOK-)

* líco (evidentemente lícu-) "cera"; compararlo con la palabra relacionada lícuma "vela, cirio"

* malo (malu-) "polen, polvo amarillo" (primitivo smalu en Etym, entrada SMAL-)

* orco "Orco, espectro" (orcu-, plural: orqui)(primitivo órku, Etym entrada ÓROK- o una forma influenciada por el Sindarin urco (WJ:390); esa influencia Sindarin puede tratarse como un nombre normal terminado en -o, y así tendríamos la forma plural orcor; compararla con MR:74 y WJ:390)

* ranco (rancu-, plural: ranqui) "brazo" (primitivo ranku, Etym entrada RAK-)

* rusco (ruscu-, plural: rusqui) "zorro" (PM:352, VT41:10)

* súlo (súlu-) "copa" (primitivo suglu, Etym entrada SUK-)

* tulco (tulcu-, plural (seguramente): tulqui) "soporte, pilar" (primitivo tulku, Etym entrada TULUK-)

* tumbo (tumbu-) "valle profundo (bajo o entre montañas)" (primitivo tumbu. Etym entrada TUB-)

* tumpo (tumpu-) "joroba" (la cabecera de la entrada en Etym, representa aparentemente a una palabra primitiva y no solo a una raíz)

* tundo (tundu-) "colina" (primitivo tundu, Etym entrada TUN-)

* ulco "perverso" (como nombre) (ulcu-; está confirmado el ablativo ulcullo en VT43:12, 23-24; probablemente su plural sea ulqui)

* urco "trasgo, espectro, Orco" (urcu-, plural: urqui) (primitivo urku o uruku, WJ:390)

* Utumno (Utumnu-) "Utumno", la primera fortaleza de Melkor (la forma primitiva era también Utupnu (MR:69), o Utubnu en Etym, entrada TUB-)

En el caso de rauco "demonio", Tolkien parece no estar muy seguro en la decisión entre si la forma primitiva era ranku/rankô, o pensar que tal vez ambas habían coexistido (WJ:390). Si fue ranku, el Quenya rauco debería tener la raíz rancu- (plural: (?)ranqui). Una forma plural del compuesto Valarauco "Demonio del Poder" (WJ:415 = Balrog en Sindarin), aparece en la actualidad en Silm, pero su forma es aún mucho más sorprendente: ¡¡¡Valaraucar, con la vocal -a- ante la terminación del plural!!! Esto reflejaría una alternativa bastante distinta a la de la primitiva formación raukâ- (ver "VARIACION DE LAS VOCALES FINALES?" más adelante).

Tuo "músculo", que Tolkien derivó del primitivo túgu (entrada TUG- en Etym), es un caso peculiar. Si tuo es un "raíz -u", podríamos pensar en la forma tú- (de tú`u-) ante las terminaciones, o solo en tu-, ante un grupo de consonantes (p.e.: dativo: tún "para un músculo", ablativo: tullo "de un músculo"). Pero también es posible que -ú`u- sufriera una falta de asimilación a -uo- (como en el caso conocido de -o`o-) en lugar de contraerse a -ú-; si es así, simplemente usaremos tuo- también ante las terminaciones.

Existe un hecho probable que afecta a las raíces i- y u-, que no aparece desarrollado en ningún sitio en el material publicado, y que parece una consecuencia necesaria del sistema general: en el arcaico "Libro del Quenya" que definía al "objeto" o forma acusativa ciryá, como acusativo de cirya, la longitud de las vocales finales respetaba la cualidad original de la vocal: tan solo las finales originales cortas -i e -u se convertían en Quenya en finales y -o. Así pues, finë "pelo" con la raíz fini-, tendría a finí como su forma acusativa, mientras que súlo "copa" con la raíz súlu- tendría como acusativo a súlú. Sin embargo, en el Quenya que se hablaba en la Tierra Media, no existía distinción alguna entre el nominativo y el acusativo; "se expresaba adecuadamente mediante el orden de las palabras" (Carta Plotz).

Fonéticamente, los viejos acusativos finí y súlú habrían producido fini y súlu en el Quenya del Exilio, siendo distintos de los nominativos finë, súlo -aunque Tolkien parece querer decirnos que esas formas diferentes del acusativo fueron definitivamente desechadas en cualquier caso.

¿VARIACION DE LAS VOCALES FINALES?

Otro tipo de variación de la raíz está tan pobremente tratado que, seguramente debe existir meramente a nivel "interno", o simplemente se trata de un reflejo de la indecisión del propio Tolkien a la hora de definir con cierta exactitud la forma de una palabra. Ya hemos mencionado anteriormente como Valarauco "Demonio del Poder" (WJ:415; el balrog Sindarin), tiene como plural a Valaraucar (si hemos de confiar en el Silm). ¿Porqué se convierte la -o de la forma simple en una -a- ante la -r de la terminación del plural? ¿Se podría dar el mismo tratamiento a otras terminaciones como la del dativo (?)Valaraucan = "para un Valarauco"? Solo tenemos un posible ejemplo de esta variación de -o a -a: en Etym, la palabra Quenya que significa "raíz" es sundo (entrada SUD-), y esta palabra aparece en más sitios como referencia a las "raíces" o "bases" lingüísticas (WJ:319). La forma plural "raíces" aparece como sundar en el compuesto Tarmasundar "Las Raíces del Pilar" (el nombre de las laderas del monte Meneltarma en Númenor, UT:166). Pero estas variaciones de -o a -a, se justifican difícilmente en el escenario del desarrollo del Quenya a partir del Elfico Primitivo (como contraste, se explicaría fácilmente mediante el hecho de que a veces los finales -o y se convierten en -u e -i ante las terminaciones: las originales cortas -u e -i, cambiaban en la posición del final, pero no en cualquier lugar). Debemos advertir que en ninguno de los dos casos "comprobados", el singular y el plural provienen de la misma fuente, incluso siendo casi contemporáneos. Así, pudiera ser que Tolkien pensara a veces en una palabra Quenya como balrog para definir Valarauca (plural: Valaraucar), y no Valarauco, y también pudiera ser que dudara entre sundo y sunda como definición de "raíz". Es posible incluso que sundo se empleara especialmente con referencia a la "raíz lingüística" ("base, raíz de palabra"), mientras que sunda se refiriera a una "raíz natural" (de un árbol, etc., usada también metafóricamente como las laderas de una montaña).

LAS VOCALES FINALES "PERDIDAS", ¿SE CONSERVAN ANTE LAS CONSONANTES FINALES?

Cuando una terminación comienza en consonante (como la del alativo: -nna), necesita de una vocal "conectora" para añadirse a un nombre que termine también en consonante, a fin de evitar un grupo imposible (impronunciable) de consonantes (a menos que la terminación en sí misma, se halle simplificada de algún modo). Podemos usar -e- como vocal de conexión y, esta sería la vocal más neutra (como en la forma alativa Elendilenna "a Elendil", PM:401). El Quenya perdió ciertas vocales cortas y finales con referencia al Elfico Primitivo, y uno se pregunta cuantas de esas vocales podrían haberse conservado ante ciertas terminaciones.

Como se ha visto antes, el nombre Mandos tiene la raíz Mandost- porque el elemento final es una forma reducida de osto "castillo, ciudad fortificada" (MR:350). ¿Debería conservarse el final -o original de osto en algunas formas de caso, p.e.: (?)Mandostonna el alativo "a Mandos"? O bien, ¿se debe también aquí introducir la -e- conectora para obtener (?)Mandostenna? ¿Qué ocurre con un nombre como tol "isla"? Se supone que deriva del primitivo tollo y, por consiguiente, su raíz será toll- y su plural tolli (tolle en Etym, entrada TOL²-). Pero, ¿debe conservarse la -o final del original tollo en casos como p.e.: el locativo para formar (?)tollossë "en una isla"? Si es así, la raíz de tol se podría haber citado como toll(o)-, con final -o, apareciendo tan solo ante las terminaciones que empiecen por consonante.

La forma instrumental de ambar, ambart- "destino" (más comunmente umbar, umbart-), está asumida como ambartanen en UT:138. Vemos como la vocal -a- aparece ante la terminación instrumental -nen. La idea de Tolkien parece ser la de que la palabra que define "destino" debía de ser algo como m`barta en el Elfico Primitivo, y que el final original -a debía conservarse en la forma instrumental ambartanen, aunque esta vocal (como la -t- que le precede), ha desaparecido en la forma simple ambar "destino, maldición".

La forma locativa de tál, tal- "pie", aparece como talassë en un manuscrito tardío (VT43:16; asumo que el tál que hemos visto aquí significa "pie", aunque no existe en esa fuente ninguna glosa al respecto). Una vez más, la idea parece ser que "pie" fuera tala en el Elfico Primitivo, y que la final -a original se conserva ante las terminaciones que comienzan con una consonante. El material (como de costumbre) es menos que consistente. En las Etym, entrada TAL-, el genitivo (posteriormente dativo) de tál es talen, cuya forma probablemente se representaría mejor como tal-+la terminación del genitivo (ahora dativo) -n, incluyendo la clásica -e- conectora apareciendo entre el nombre y la propia terminación de caso, al objeto de impedir la forma imposible **taln. ¿Podría el mismísimo Tolkien asegurarnos que el dativo de tál, tal- sería talan en vez de talen, yendo a talassë como forma locativa? Supuestamente, la forma talassë se ha tomado de una más completa declinación de tál, por lo que la misma fuente (1967) podría tener la respuesta, aunque no está a nuestra disposición.

No podemos llegar a conclusiones definitivas en este tema; normalmente se usaría la vocal conectora "neutral" -e-, o al menos hay grandes razones para creer que no se prefería a cualquier otra vocal. Debemos advertir que -i (en lugar de -r) es, en cualquier caso, la terminación plural preferida, por lo que si tol, toll- "isla" aparece como tollo- ante las terminaciones de caso que empiezan en consonante, el plural "islas" debería ser tolli (confirmado por LT1:85) en lugar de **tollor. El mismo principio debería aplicarse a todas las terminaciones de caso que incorporan el elemento plural -i-, como p.e.: el dativo plural -in o el plural instrumental -inen, y también sería aplicable a las otras terminaciones de caso que empiezan por vocal, como el genitivo acabado en -o. Así, aunque "por el destino, por la maldición" está confirmado y aceptado como ambartanen, la forma plural correspondiente "por (los) destinos/(las) maldiciones", probablemente debería ser ambartinen, sin una -a- ante la terminación. El genitivo debería haber sido ambarto (por lo que el viejo ambartao desaparecería, incluso si hubiera existido alguna vez).