Aelfwine
Ælfwine de Inglaterra, Hijo de Éadwine, Hijo de Óswine, fue un marinero anglosajón, nacido alrededor del 869 D.C. Siglo X, y único de los mortales de “nuestros días” que navegó por el mar y encontró el Camino Recto, hasta llegar a la Isla Solitaria, Tol Eressëa.
El nombre Ælfwine proviene del inglés antiguo y significaría “Amigo de los Elfos”. También llamado Aelfwine de los Angelcynn, Eriol de Leithien, Angol, Eriollo, Sarothron, Wídlást y Ottor Wæfre.
La historia de Ælfwine / Eriol fue escrita y cambiada muchas veces por Tolkien, de ahí que existan múltiples versiones de su historia.
Como Ælfwine, su historia empieza:
“…cuando tenía nueve años, ya que su padre salio a navegar en su barco Éarendel y nunca volvió.
A causa de los ataques de los daneses, su madre escapó con él de Somerset, donde ellos vivían, hacia Gales occidental, donde su madre tenía parientes.
Era descendiente lejano de Eärendil, y como todos sus descendientes, llevaba el anhelo del mar en su sangre. De ahí que se hiciera un notable marinero y trovador.
Habiendo crecido hasta hacerse un hombre y aprendido la lengua Galesa y mucho del arte del mar regresó a Somerset para servir a Odda, “thegn” (noble al servicio del rey) del Rey Eadweard en la guerra. Al servicio de Odda navegó a lo largo de muchos mares y visitó Gales e Irlanda en muchas ocasiones
Durante sus viajes siempre oía historias sobre el mar y así llego a escuchar las leyendas irlandesas de Maelduin y San Brendan, los cuales habían salido al mar y llegado a "numerosas islas sucesivas, donde encontraron maravilla tras maravilla"
Oyó también acerca de una gran tierra al oeste que había sido destruida. Los supervivientes del desastre se habían asentado en Irlanda y habían morado allí, disminuyendo en número; y todos los descendientes de estos hombres portaban el anhelo del mar en su sangre, de modo que muchos habían navegado hacia el oeste y nunca habían regresado. Ælfwine, conociendo la historia de su padre y de su propio deseo, pensó que él podría ser uno de esos descendientes.
Alrededor del año 915, en el otoño, los daneses atacaron Porlock. En un primer momento fueron rechazados y la compañía de Ælfwine consiguió capturar un "cnearr" danés (un pequeño barco) por la noche. El mejor amigo de Ælfwine era Tréowine de las Fronteras. Al amanecer Ælfwine cuenta a Tréowine su intención de zarpar hacia el oeste, quizá hacia el país del legendario Rey Sheaf. Cosa que había planeado hacía tiempo y tenía preparado un suministro de comida y agua. Tréowine consiente en acompañarle al menos tan lejos como hasta Irlanda. Consiguen otros dos compañeros: Ceola de Somerset y Geraint de Gales Occidental y entonces zarpan.
Navegan hacia el oeste y pasan Irlanda, y después de muchos días de viaje quedaron exhaustos. Un "sueño como de muerte" pareció caer sobre ellos, y pronto se desmayaron. Lo último que sabemos es que Tréowine contempló el mundo hundirse debajo de ellos. Habían entrado en el Camino Recto.
Hay poca certeza de lo que les sucedió a los compañeros de Ælfwine después de que se desmayaran. De hecho no se sabe realmente cuántos lo siguieron a lo largo del todo el recorrido hasta el Camino Recto. Sí que se conoce que Tréowine estaba allí, puesto que se le menciona, (pero incluso él desaparece a partir de este punto). Los otros pudieron haberse quedado en Irlanda o, como se indica en una versión, haber saltado por la borda cuando la nave se elevó sobre el nivel del mar.
En cualquier caso, cuando Ælfwine despertó se encontró a sí mismo tendido en una playa y a un grupo de Elfos que sacaban su nave a la orilla. Había llegado a Tol Eressëa. Pronto consiguió ganarse la curiosidad de los Noldor que vivían en la isla, así como varios nombres: Eriol, “El que sueña solo”, Angol, “Acantilados de hierro” (en referencia a las costas de su tierra natal), y Sarothron, “viajero”. Aprendió la lengua de los isleños y después de un periodo de tiempo se encaminó tierra adentro.
Pronto llegó a la villa de Tavrobel, donde permaneció por largo tiempo. En esta villa vivía también Pengolodh, y Ælfwine aprendió mucho de él. Pengolodh le contó la Ainulindalë, y le mostró la Lammas, el Quenta Silmarillion, el Libro Dorado, la Narn i Chîn Húrin, y los Anales de Aman y los de Beleriand. Ælfwine aprendió mucho de estos trabajos de oídas, y tradujo el Silmarillion, los Anales y la Narn al inglés antiguo (en su mayor parte después de regresar a Bretaña), dando explicaciones a muchos de los nombres. Pengolodh también respondió muchas cuestiones específicas a Ælfwine. Una se conserva el manuscrito titulado Dangweth Pengoloð “Las respuestas de Pengolodh”, escrito probablemente por Ælfwine o Pengolodh, en el que el segundo explicaba el porqué las lenguas Élficas cambiaron en la forma en que lo hicieron.
No se sabe por cuanto tiempo permaneció Ælfwine en Tol Eressëa, pero puede asumirse con seguridad que lo hizo durante varios años – los suficientes como para aprender al menos una lengua nueva, varios trabajos extensos de oídas y comenzar a traducirlos. Finalmente regresó a Bretaña, pero nada se sabe de lo que le aconteció allí. Aunque está claro que continuó traduciendo los trabajos que había recibido o aprendido, y según se relata, el profesor Tolkien utilizó muchos de ellos en sus traducciones.”
Los Cronistas de Arda por Måns Björkman.
Como Eriol, la historia es mas resumida (ya que estos fueron los primeros escritos sobre el tema) y narra como Eriol encontró Tol Eressëa gracias a las indicaciones de un anciano en una isla, y los Elfos lo recibieron e hizo amistad con ellos, y los Elfos (principalmente Lindo, Vairë, Rúmil y otros, en la Cabaña del Juego Perdido) le relataron sus cuentos, aprendiendo “Los Cuentos Perdidos de Elfinesse”. Posteriormente, Eriol aprendió de los Elfos que el anciano que encontró era en realidad Ylmir (Ulmo).
Fue en Tol Eressëa donde Eriol escribió El Libro de los Cuentos Perdidos, donde se narran los días antiguos, después de leer el Libro Dorado de Tavrobel, que los Elfos llaman Parma Kuluina.
En las versiones publicadas de las obras de Tolkien, El Silmarillion y el Señor de los Anillos provienen del Libro Rojo y sus revisiones por Bilbo Bolsón, y Traducciones del Elfico.
Christopher Tolkien decidió quitar todas las referencias de Ælfwine de El Silmarillion ya que podría hacer el trabajo de publicación demasiado complejo. La última versión del Akallabêth contuvo referencias a Ælfwine, pero Christopher Tolkien tuvo que editarlo para publicarlo en El Silmarillion.
Aun así, en algunas escritos que Tolkien escribió después de El Señor de los Anillos, Ælfwine todavía es mencionado, de modo que se presupone que Tolkien no abandono totalmente la idea de las traducciones del Ælfwine, ya que las dos fuentes (el Libro Rojo y Ælfwine) no son mutuamente exclusivos.
Ælfwine también es mencionado como el autor de varias traducciones al inglés antiguo que aparecen en los libros de La Historia de la Tierra Media. Una discrepancia menor es que mientras que Ælfwine es descrito como procedente del noroeste de Inglaterra, sus textos en inglés antiguo están es en el dialecto de Mercian, que era el favorito de Tolkien.