Dados mis escasos conocimientos sobre cine, no sé si merece la pena ser leída, pero aquí va mi comentario sobre la película.

No soy crítico ni entendido en cine y no voy a enjuiciar la labor técnica. Hablo desde el punto de vista de espectador amante y respetuoso de los libros. Técnicamente solo comentaré que los 3D me han resultado satisfactorios al comienzo, pero ligeramente mareantes en ciertos momentos. Los 48 fps ni siquiera he notado si han existido…
He disfrutado la película, estar de nuevo en la Tierra Media, salvo algunos momentos, en realidad no muchos, pero los voy a comentar.
No me han gustado las fantasmadas ni las infidelidades absurdas, y la sensación general es que el punto negativo ha sido mayor que tras ver por primera vez LCDA.
A la película le doy un 7.
El comienzo es una delicia, y, lo que es de agradecer, completa la primera parte de ESDLA, con alguna explicación que no se vio en LCDA. El 3D te da la sensación de estar dentro, y quizás empequeñezca algo la estancia hobbit. Pero es natural: ¡es una estancia hobbit!
La parte de Bolsón Cerrado y los Enanos, está muy bien llevada. Un pero: la proporción Gandalf-enanos-hobbit resulta variable. En la escena de los platos, la canción es muy apropiada, pero los enanos resultan demasiado buenos malabaristas con los platos. Esa escena resulta del todo imposible. La canción de Thorin (como todo) es mejor en el original, pero está suficientemente bien. Creo que si no se ha oído antes en V.O., no molestaría en absoluto.
La primera parte del viaje, perfecta. Emocionan los guiños (en toda la película), como la alusión a los cinco magos (aunque supuestamente debería ser un secreto), pero es totalmente absurdo que Gandalf comente que no se acuerda del nombre de los Magos Azules.
La escena de los trolls está muy bien, quitando cierta falta de fidelidad sin importancia (por ejemplo, cuando Bilbo intenta coger el cuchillo en lugar de hurgar en bolsa), pero la lucha tan igualada, sobra, igual que su final, con el ridículo “chantaje” a los enanos, absurdamente aceptado sabiendo que supone la muerte de todos… Una pena el papel de Gandalf, sin ventriloquía, a pesar del buen efecto visual, y me ha defraudado el tamaño de los trolls, más pequeño que el de los trolls de ESDLA, cuando se convierten en piedra.
Radagast se nos presenta como un mago diferente, agradable y bonachón, uno con la Naturaleza, no demasiado perspicaz, y con poderes evidentes. Pero no resulta lógico que conozca las ruinas de Dol Guldur, y le pida al pájaro que le guíe, ni que lleve una pareja de gorriones anidando bajo su sombrero.
El encuentro de Radagast con Gandalf, demasiado casual pero bien, exceptuando su pérdida de memoria y la estupidez de la escena del bicho en la punta de la lengua. Resulta evidente que lo que fuman no es tabaco, y me parece un error: mientras no se demuestre lo contrario la “hierba para pipa“ es una “variedad de Nicotiana”, o sea, tabaco.…
La presencia de Azog su compañía montando huargos y la persecución hasta Rivendel, creo que sobra totalmente, como la ridícula persecución en círculos a Radagast. Y que hablen entre ellos en la Lengua Negra (¿es la Lengua Negra?) es absurdo, cuando los orcos comunes no la conocen más que alguna palabra suelta.
La aparición de Rivendel es espectacular pero la estancia se hace corta. El Concilio no se entiende bien cómo por qué se convoca, parece ser una sorpresa para Gandalf, y parece además quedar sin concluir. Espero que en la VE se vea cómo se ponen de acuerdo para atacar Dol Guldur. Me gusta la relación entre Galadriel -encantadora- y Gandalf, pero no acabo de encajar la telepatía únicamente compartida entre ellos. Tampoco que Saruman insinúe que la simpleza de Radagast se debe al consumo de setas… En la escena en la que Gandalf y Galadriel hablan solos,  el ofrecimiento de Galadriel de ¿aparecer? cuando le necesite y su desaparición “mágica” resulta ridícula e innecesaria.  Y que los enanos partan sin Gandalf un sinsentido, porque hace imposible que luego les pueda encontrar y saber que están presos en la Ciudad de los Trasgos.
La pelea de los Gigantes de Piedra, impresionante, pero imposible. Que con el resquebrajamiento de la montaña y los choques bruscos aguanten los personajes sin despeñarse, estando en esa vereda tan estrecha, es totalmente imposible. Resulta un fantasmada.
La caída en la Ciudad de los Trasgos, en plan trampa, es una adaptación que no molesta, pero todas las largas caídas al vacío resultan imposibles de creer saliendo ilesos. La misma ciudad resulta exageradamente amplia. Es una montaña hueca en lugar de una lógica sucesión de galerías y cuevas, pero la carrera a lo largo de los puentes resulta muy llamativa y efectista. El Gran Trasgo, impresiona, pero absurdo que reconozca visualmente a Thorin. La aparición de Gandalf, impresionante, y la huída posterior algo larga. Eché en falta la muerte del Gran Trasgo como es en el libro. No veo que aporte nada ese cambio.
La escena de los acertijos en la oscuridad -cambios tolerados- bien hecha, aunque demasiado clara. No me gustó la forma de ponerse el Anillo -doble casualidad- igual que Frodo, ni que quede atascado y pierda los botones al principio, y no a la salida. Ese cambio aporta poco.
En el reencuentro con la compañía eché a faltar la evidencia de un vigía al que Bilbo sortee sin ser visto, pero por lo demás, bastante bien, exceptuando el cambio del respeto que le empiezan a tener por la desconfianza de Thorin..
Y “en la sartén al fuego”,  resulta absurdo el efecto dominó de los pinos, y una fantasmada la parte final con el último pino, el único que aguanta, y con los enanos que se caen pero no, y cuando caen acierten todos, y Gandalf, a caer sobre un águila que casualmente pasa por ahí...
El final, con la visión de la Montaña Solitaria y el despertar de Smaug, resulta magnífico y prometedor.