Curso de Quenya: Lección Tres
Curso de Quenya: Lección Tres - Nombre dual; variación de la raíz

LECCIÓN TRES:

NOMBRE DUAL / VARIACIÓN DE LA RAÍZ:

NOMBRE DUAL:

En la lección anterior hemos visto dos formas del plural Quenya: el siempre misterioso partitivo plural terminado en -li, y el plural normal acabado en -r o en -i (dependiendo de la forma de la palabra). Como casi todos los idiomas reales, el Quenya posee una forma dual, la cual no tiene contrapartida en inglés. El nombre dual hace referencia a "dos cosas", "una pareja de cosas". El dual se forma con una de estas dos terminaciones: -u o -t.

Dentro del espacio temporal ficticio creado por Tolkien, estas dos terminaciones tenían en un principio significados diferentes y así, no terminaban de ser completamente intercambiables. Una nota al pie, en Cartas:427 proporciona alguna información sobre esto. La final -u (del Elfico Primitivo ), se usaba en al caso de pares naturales, de dos cosas o personas pertenecientes de alguna manera a una pareja lógica. P.e.: con arreglo a VT39:9,11, la palabra "labio" tiene su forma dual en peu "labios", que se refiere al "par de labios" de una persona (y no por ejemplo al labio superior de una y al inferior de otra, ya que para definir esto último usaríamos el término "dos labios" y no el de "un par natural"). El nombre veru "pareja casada, marido-mujer", tiene forma dual; en este caso no existe la raíz correspondiente al singular "esposa" (aunque tenemos verno "marido" y vessë "esposa" de la misma raíz; ver LR:352). El nombre alda "árbol" aparece en la forma dual refiriéndose no a una casual pareja de árboles, sino a los Dos Árboles de Valinor: Aldu.

Advertimos que, si el final -u se añade a un nombre terminado en vocal, esta se desplazará: así, el dual de alda será aldu en vez de **aldau, aunque una palabra señalada en PM:138, reproduciendo un borrador de los apéndices de LotR, parece sugerir que Tolkien consideró en algún momento la última de las formas citadas. Hay también una fuente antigua que lleva el término aldaru, aparentemente formado por la adición de la terminación dual -u a aldar "árboles" (el plural normal), pero esto parece ser tan solo un antiguo experimento de Tolkien que, probablemente ya estaría obsoleto cuando se escribió LotR. En la forma dual peu, la vocal final de "labio" no se desplaza por la terminación dual -u. Sin embargo, parece descender de la forma del Elfico Primitivo peñe, en tanto que la forma dual peu viene de peñû (VT39:9), por eso la e de peu no era el final originalmente.

En cuanto a -t, la otra terminación dual, y de acuerdo a lo que figura en Cartas:427, diremos que representa un elemento antiguo: ata. Este, según Tolkien, era originalmente "un puro numeral"; efectivamente se refiere a la palabra Quenya que define al numeral "dos": atta. Pero con la frase "un puro numeral", quiso evidentemente decir qye la terminación dual -t denotaría dos cosas relacionadas casualmente. Por ejemplo, ciryat como la forma dual de cirya "barco", se referiría a dos barcos cualesquiera; ciryat podría ser solo una forma abreviada de la frase atta ciryar "dos barcos". No obstante, Tolkien en un examen posterior,, indicó que en el "Quenya moderno", las formas duales "se usaban solo para referirse a parejas naturales". Precisamente no queda muy claro lo que quiere decir con "Quenya moderno"; podría referirse al Quenya como lengua ritual en la Tierra Media, en vez de a la lengua vernácula de los Eldar en Valinor. En cualquier caso el Quenya de la Tercera Edad al que nos apuntamos en este curso, debe incluirse en lo que Tolkien llama "Quenya moderno", así que aquí seguiremos la regla que dice que cualquier forma dual debe referirse a algún tipo de pareja natural o lógica, y no a dos cosas relacionadas casual o accidentalmente. En otras palabras, la terminación dual -t viene a tener el mismo significado que la terminación dual -u. Un dual como ciryat "dos barcos" (llamados curiosamente ciriat en Cartas:427), podría no referirse en el Quenya moderno a dos barcos cualesquiera, sino a dos barcos que, de alguna manera, constituyen una pareja, como dos barcos hermanos. Si nos queremos referir a dos barcos que no constituyan una pareja lógica o natural (como serían dos barcos vistos juntos al pasar), no deberíamos usar la forma dual, sino simplemente el numeral atta "dos" = atta ciryar.

Como quiera que las dos terminaciones -t y -u vienen a tener el mismo significado, será necesario determinar algunas reglas para su uso. El definir cual de las dos deberemos usar en cada caso, vendrá determinado por la propia forma de la palabra (así como la forma de la palabra determina también el tipo de terminación plural que debe llevar -i o -r). En Cartas:427, Tolkien advirtió que "la elección de -t o -u, (se) decidía mediante "eufonía"", es decir: la que sonara mejor, añadiendo como ejemplo que -u debería preferirse a -t, si la palabra que debe llevar la terminación dual ya lleva una t o una d (como sonido similar). Así pues, el dual de alda será aldu en vez de **aldat. Parece que por lo que concierne al "Quenya moderno", la final -t podría ser la mejor opción, aunque si el nombre en cuestión ya tiene una t o una d, optaremos por la -u (recordando que este final desplaza a cualquier vocal final). En la lista de duales de la Carta Plotz, ciryat (una pareja de barcos) y lasset (una pareja de hojas), formados a partir de cirya "barco" y lassë "hoja"; se confirma que las palabras que no llevan t o d, tendrán su terminación dual en -t. Quizá sería preferible el final en -u en el caso de los nombres que terminen en consonante, aunque -t no se pudiera añadir directamente a algunas palabras sin provocar un final con un grupo de consonantes, cosa que la fonética Quenya no permite; por desgracia, no hay ejemplos (si a pesar de todo, se usa el final -t, habrá que insertar una vocal ante él, produciendo inevitablemente una terminación más larga (probablemente -et). En los ejercicios que siguen, mostraremos este problema mientras alguien no consiga la solución).

Está claro no obstante, que el Quenya posee algunas formas duales antiguas, que no siguen las reglas normales de la terminación en -t, sustituida por -u solo cuando hay una d o una t en la palabra a la que se ha de añadir. Los ejemplos veru "pareja casada" y peu "labios, par de labios", son prueba de ello; en esas palabras no hay t ni d, pero la terminación es en -u en vez de en -t. Presumiblemente, estas son formas duales "fosilizadas", que reflejan el sistema más antiguo, en el cual, solo la forma -u se usa en el caso de partes del cuerpo pares, como por ejemplo: orejas, ojos, brazos, piernas, pies, manos, etc. (La otra terminación -t, puede emplearse si otras terminaciones se imponen ante el final dual propiamente dicho; volveremos a esto en las siguientes lecciones). La palabra en Quenya que significa "brazo", es ranco; la forma dual para definir "el par de brazos de una persona", no está confirmada, pero mis mejores suposiciones me indican que debe ser rancu. El compuesto hendumaica (perspicaz, sagaz), que se menciona en WJ:337, puede llevar el dual hendu "(par de) ojos". La palabra Quenya que significa "ojo", es hen o hend antes de un final (las Etim. Solo mencionan el plural normal hendi "ojos", LR:364). En el caso de esta palabra, la terminación dual debería ser -u en vez de -t , ya que hay una d en hend. La palabra tál "pie", probablemente lleve el dual talu (ver más adelante el acortamiento de la vocal).

VARIACIÓN DE LA RAIZ:

Este es un tema con el que habremos de emplear algunas líneas y, aún cuando estemos en los primeros niveles de este curso, es algo que no se puede evitar. Entraré en detalles, pero podéis estar seguros de que no seréis capaces de recordar todas las palabras y ejemplos que vais a ver; limitaos pues, a intentar entender lo máximo posible de este apartado.

A veces la forma de una palabra Quenya sufre cambios cuando se le añaden terminaciones. Yan antes hemos mencionado dos palabras. Si añades un final a tál "pie", p.e.: -i, para formar el plural, o una -u para formar el dual, la vocal larga á, se acortará y se convertirá en a. Así, el plural "pies", será tali en vez de **táli y el dual "un par de pies", será talu en vez de **tálu. En cada caso, se puede decir que tál "pie", tiene la raíz -tal. De la misma manera la palabra hen "ojo", tiene la raíz hend- y su plural será hendi en vez de **heni. La forma de la raíz no se produce sola, sino que se forma mediante adiciones. Cuando presentamos una glosa, representaremos cada variación radical mediante la forma original seguida de la forma radical (entre paréntesis), con un guión donde comienza la terminación, p.e.: tál (tal-) "pie", hen (hend-) "ojo".

En el caso de tál frente a tal-, la variación se debe al hecho de que frecuentemente las vocales se alargaban en las palabras monosílabas, pero cuando la palabra tenía terminaciones, obviamente quedaba con más de una sílaba, y entonces, el alargarla no tenía demasiado sentido (otro ejemplo del mismo caso, parece ser nér "hombre", plural neri "hombres", MR:213/LR:354). Originalmente, la vocal era corta en todas las formas. Es cierto que la forma de la raíz da una idea de cómo quedará la palabra, y en una primera etapa de la larga evolución lingüística, Tolkien tuvo una idea detallada de todo esto. Hen "ojo" en su raíz hend-, refleja la "base" primitiva KHEN-D-E, de la cual es el último derivado (LR:364). El Quenya podría no tener -nd al final de una palabra y simplificarlo a un final -n cuando la palabra está sola (así hen representaría de alguna manera la forma completa imposible que sería hend), pero ante una terminación, -nd- no es el final y, por consiguiente, puede estar. Muchas variaciones radicales se componen de enjambres de sonidos que no se permiten al final de las palabras, por lo que pueden aparecer por cualquier otro sitio. Una palabra como talan "piso, planta", no tiene a **talani como plural, como cabría esperar, sino a talami. El radical es talam- porque es esa la forma de la raíz de la palabra en el Elfico Primitivo: TALAM (LR:390). Porque Quenya se desarrolló a partir del Elfico Primitivo, y este tiene una regla que dice que solo determinadas consonantes pueden estar al final de las palabras, y m no es precisamente una de ellas. La consonante permitida más cercana, es n, y por eso la vieja palabra talam se convirtió en talan, aunque su plural sigue siendo talami (y otras formas que se pueden añadir a la palabra), la m que no va al final, persiste sin embargo. Otro caso similar es filit "pajarito", que tiene el radical filic-, plural filici "pajaritos": la raíz primitiva de la palabra era PHILIK (LR:381), pero Quenya no permite la -k al final de una palabra, por eso debe ir la -t. Cuando no sea final, dejaremos la k (mejor dicho: la c, en este curso).

En algunos casos, la forma "independiente" es un tipo de palabra simplificada o acortada, donde la forma del radical es reflejo de la forma original. Por ejemplo, Tolkien imaginó que la palabra merendë "fiesta, festival" se acortaba a meren, aunque el radical es merend- (LR:372). Así que el plural de meren es merendi, y no **mereni. Cuando está sola, la palabra nissë "mujer", se reduce a nis (o nís con vocal larga) , pero ante el final, se mantiene la doble ss, por lo que el plural "mujeres" será nissi (LR:377, MR:213). Un caso parecido es el de Silmarillë, el nombre de una de las legendarias joyas creadas por los Fëanor; generalmente esta palabra se acorta a Silmaril, pero ante las terminaciones, la doble ll de la forma completa, se preserva (Silmarill-), por lo que el plural será siempre Silmarilli. En el caso de las palabras compuestas, es decir, palabras formadas por otras varias palabras, el segundo elemento del compuesto acostumbra a reducirse, pero la forma completa puede volver a aparecer en una terminación, p.e.: el nombre Sindel "Elfo Gris" (WJ:384), incorpora -el como una forma reducida de Elda "Elfo". El plural de Sindel no es **Sindeli, sino Sindeldi, preservando el grupo -ld- que aparece en Elda (aunque la terminación -a se pierde en el compuesto, no podemos formar el plural **Sindeldar).

En otros casos, una palabra se puede contraer cuando se le añaden terminaciones. En estos casos, la forma radical no refleja la más vieja y completa forma de la palabra en cuestión. Estas contracciones se llevan a cabo generalmente en palabras de dos sílabas que contienen dos vocales idénticas, p.e.: feren "haya", se reduce a fern- ante una terminación, y su plural será ferni en vez de **fereni. WJ:416, indica asimismo que laman "animal" se puede reducir a lamn- ante una terminación, así tendremos lamni "animales", aunque la forma reducida lamani también se usa. Ocasionalmente, las formas contraidas sufren algunos cambios cuando se comparan con las normales; como el plural de seler "hermana" que podría ser **selri, pero que como lr es un grupo no permitido en Quenya, deberemos cambiar a ll, con lo que el plural "hermanas", será selli (LR:392).

Hay otra variante del radical que está bastante menos comprobada en cuanto a los nombres se refiere, pero hay indicios de algunos efectos de cambio en la vocal final de algunas palabras cuando se les añade una terminación. En Quenya, las vocales finales -o y , se convierten a veces en las finales -u e -i del Elfico Primitivo. En una cierta etapa de la evolución de la lengua, la versión original de la -i corta, se convertía en -e cuando la vocal era final; lo mismo pasaba con la -u corta que se convertía en -o. Por ejemplo: la palabra primitiva tundu "colina", se convierte en tundo en Quenya (LR:395). Aunque este cambio solo se produce cuando la vocal es final, es posible que se conservara el atributo original ante una terminación. El plural "colinas" podría muy bien ser tundur en vez de tundor, aunque ninguno de los dos está contrastado. Con arreglo a SD:415, el nombre Quenya lómë "noche" tiene a lómi- como radical, lo que evidentemente, significa que la vocal final , cambia a -i si se añade una terminación tras ella. P.e.: añadiendo a lómë la terminación del dual -t (para expresar "un par de noches"), tendríamos lómit en vez de lómet. Esto es así, porque lómë procede del vocablo primitivo dômi (LR:354), e -i nunca se convertirá en -e excepto cuando sea final. Pienso que ciertas palabras de Namárië como lírinen y súrinen, son buenos ejemplos de este fenómeno: estas son formas de lírë "canción" y súre "viento" (la última da testimonio de sí misma en MC:222; el significado del final -nen que se ve en lírinen y súrinen se dilucidará en una próxima lección). Si originalmente, esta palabra que terminaba en -i se convirtió más tarde en (solo siendo final), podría ser porque en esta palabra, fuera plausible de convertirse en -i- ante la terminación. Diríamos entonces que el radical de súrë, es súri-.

Parece ser que existen variaciones similares concerniendo a la vocal final -o que, en algunos casos, proviene del final primitivo -u; otra vez el atributo antiguo de la vocal, puede resurgir si se le añade una terminación. Por ejemplo: rusco "zorro", se dice que tiene el radical ruscu-, por eso, si le añadimos la terminación dual hablando de "un par de zorros", la forma resultante sería probablemente ruscut en vez de ruscot. Sin embargo, el tratamiento de este fenómeno no es extensivo a los escritos publicados de Tolkien; de acuerdo con lo establecido en SD:415 y VT41:10, lómë y rusco, tienen los radicales lómi- y ruscu-, siendo estas las referencias explícitas más acertadas que hemos conseguido.

No debemos desesperar, pero pensemos que todas estas cosas extrañas suceden cuando se añaden terminaciones a una palabra Quenya, así que disponemos de un enorme potencial para cometer embarazosos errores (o al menos una gran cantidad de material para memorizar). La mayoría de las palabras Quenya, parecen comportarse bastante bien, sin diferencias que tener que recordar en sus formas radicales; solo añadir la terminación y ya está. Donde sepamos que hay formas radicales diferentes (o donde tengamos buenas razones para sospechar que las hay), lo indicaremos al presentar la palabra, si es relevante para los ejercicios.

Sumario de la Lección Tres:

Además de la(s) forma(s) plural(es), el Quenya tiene también un número "dual" para definir un par de cosas formando un tipo de pareja natural o lógica (asumimos que dos cosas asociadas solo casualmente, se definen con un plural normal en conjunción con el numeral atta "dos"). El dual se forma con una de estas dos terminaciones: -t o -u (la última desplaza a la vocal final; el dual de alda "árbol", seráaldu y no **aldau. La elección preferida parece ser -t pero si la palabra ya lleva una terminación añadida y esta contiene una t o una d, es preferible el final alternativo en -u (por motivos de eufonía, si quieres, para evitar una aglomeración de t o sonidos similares). Sin embargo, parece haber cierto número de viejas y fosilizadas formas duales que terminan en -u aunque no haya t o d en la palabra en cuestión, como veru (pareja casada), y peu (par de labios). El último ejemplo sugiere que todas las partes del cuerpo que se presentan en parejas, deben definirse con la forma dual terminada en -u y no en -t, independientemente de la forma de la palabra (aunque es evidente que se prefiere la -t, si hay otras terminaciones inmiscuidas ante el propio final dual; tendremos más de todo esto más adelante).

Unas pocas palabras en Quenya sufren cambios cuando las terminaciones son apéndices de ellas mismas, como talan "piso" que se convierte en talam-, plural talami. Sería talam- la forma radical de talan. De la misma manera, las vocales finales -o y , aparecen a veces como -u e-i respectivamente si se añade alguna terminación; de esta manera, Lomé "noche" tiene como radical a lómi-. En muchos casos, la forma del radical rememora la vieja forma de las palabras (sonidos o combinaciones que no sobrevivieron al final de una palabra, son preservados pero no como final), aunque la forma del radical también puede representar una contracción.

VOCABULARIO:

Atta: dos

Hen(hend-): ojo

Ranco: brazo

Ando: puerta

Cirya: barco

Aiwë: pájaro

Talan(talam-): piso

Nér(ner-): hombre (macho adulto de una especie racional: Elfo, Mortal u otros)

Nís(niss-): mujer (similarmente: hembra adulta de una especie racional)

Sar(sard-): piedra (piedra pequeña, no piedra como material)

Alda: árbol

Oron(oront-): montaña

EJERCICIOS:

1.: Traducir al español:

A. Hendu

B. Atta hendi (y responde: ¿cuál es la diferencia entre este y el hendu de arriba?)

C. Aldu

D. Atta aldar (y responde otra vez: ¿cuál es la diferencia entre este y el aldu anterior?)

E. Minë nér ar minë nís

F. I sardi

G. Talami

H. Oronti

2.: Traducir al Quenya:

I. Dos barcos (solo dos barcos que se cruzan accidentalmente)

J. Dos barcos (dos barcos, gemelos, iguales)

K. Brazos (los dos brazos de una persona)

L. Dos montañas (iguales, como "Twin Peaks" si quieres; usa la forma dual)

M. Doble puerta (forma dual)

N. Dos pájaros (una pareja)

O. Dos pájaros (SOLO dos pájaros)

P. Hombres y mujeres


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