Namna Finwë Míriello
Namna Finwë Míriello (traducido como la Ley de Finwë y Míriel y tambien llamado Juicio de Manwë sobre los Esponsales de los Eldar) fue una resolución crucial emitida por los Valar tras un intenso debate, el Debate de los Valar. Esta decisión estableció un precedente en el matrimonio élfico y tuvo profundas repercusiones en la historia de los Noldor y de los Hijos de Ilúvatar.
El rey Finwë, líder de los Noldor, y su esposa Míriel tuvieron un hijo, Fëanor. Sin embargo, el parto agotó a Míriel, quien abandonó su cuerpo y se dirigió a los Salones de Mandos. A pesar de la paciencia inicial de Finwë, su tristeza creció con el tiempo, y su deseo de tener más hijos se intensificó. Ante la negativa de Míriel a regresar a la vida, Finwë buscó la sabiduría y el consejo de los Valar.
La petición de Finwë planteó un dilema para los Valar, ya que sabían que el matrimonio élfico era una unión única según los designios de Ilúvatar. Además, la muerte de Míriel era un evento inusual en la tierra bendita de Aman, y su negativa a regresar los perturbó.
Tras un extenso debate, los Valar promulgaron la Ley de Finwë y Míriel, anunciada por Mandos desde el Anillo del Juicio. Esta ley, registrada en los libros de leyes, establecía que la disolución del matrimonio solo podía ocurrir por voluntad del fallecido o si un alma era condenada a permanecer en los Salones de Mandos hasta el fin de Arda.
Mandos explicó que un nuevo matrimonio solo sería posible en estas circunstancias para evitar conflictos si el cónyuge fallecido regresaba a la vida. Además, la igualdad entre hombres y mujeres élficos hacía que la unión simultánea con múltiples parejas fuera antinatural. Dado que el matrimonio era principalmente una unión del cuerpo, un nuevo matrimonio solo sería permisible si el cónyuge fallecido permanecía incorpóreo y así lo deseaba.
Se consideró inapropiado obligar al fallecido a permanecer incorpóreo, por lo que el cónyuge vivo solo podía volver a casarse con el consentimiento del fallecido.
A pesar de ser informada y advertida por Mandos, Míriel se negó a regresar a la vida. Sin embargo, Mandos declaró que la separación oficial del matrimonio no se produciría hasta transcurridos doce años.
La Ley de Finwë y Míriel estableció un notable precedente al permitir el divorcio élfico, lo que facilitó el nuevo matrimonio de Finwë.
La historia se presenta varias veces a lo largo de El Anillo de Morgoth, el décimo volumen de La Historia de la Tierra Media, y en Los Pueblos de la Tierra Media, el duodécimo volumen.