Cerin Amroth
Tipo de lugar: Colina sagrada en Lothlórien
Ubicación: Centro de Lothlórien, al este del río Celebrant, cerca del río Anduin
Época: Segunda y Tercera Edad del Sol
Importancia: Lugar de memoria y símbolo del amor entre Amroth y Nimrodel; centro espiritual de Lothlórien
Cerin Amroth es una colina elevada y verde situada en el corazón del reino élfico de Lothlórien, en las tierras del oeste del Anduin. El lugar recibe su nombre del rey Amroth, quien en la Segunda Edad habitó allí para convertirse más tarde en una figura legendaria entre los elfos del Bosque Dorado.
En la cima de la colina crecen dos grandes mallorn, los árboles característicos de Lothlórien, cuyas hojas brillan con tonos dorados y plateados. Entre ellos, en lo alto de las ramas, se encuentra un flet o plataforma, desde donde se contempla toda la belleza del reino dorado. En la base de los árboles, el suelo está cubierto por una alfombra de hierba eternamente verde y por flores de elanor y niphredil.
El nombre Cerin Amroth significa literalmente “Anillo de Amroth”, haciendo referencia a su forma y al nombre del que fue rey de Lothlórien antes de Galadriel y Celeborn. En los Cuentos Inconclusos se dice que Amroth tuvo allí su residencia, y que el lugar fue centro espiritual de su reinado. Con el tiempo, Amroth partió hacia el sur buscando a Nimrodel, y su historia acabó en tragedia; pero su nombre perduró asociado a este lugar.
Durante la Tercera Edad, Galadriel y Celeborn residían principalmente en Caras Galadhon, pero Cerin Amroth permanecía como un lugar sagrado y de recuerdo, especialmente para Galadriel. De hecho, se dice que Cerin Amroth era el corazón de Lothlórien y que desde allí, Galadriel preservaba el esplendor del reino gracias al poder del anillo élfico Nenya.
En El Señor de los Anillos, la Compañía del Anillo visita Cerin Amroth, guiada por Haldir. Frodo y Sam son llevados a lo alto del flet en el mallorn más alto de la colina, y desde allí contemplan la Tierra Media como si fuera intemporal, sintiendo la nostalgia de la Primera Edad. Es uno de los momentos más poéticos del libro, cuando el tiempo parece suspenderse y el lector vislumbra la belleza inmortal de los Eldar.
Allí mismo es donde Frodo ve a Galadriel por primera vez, de pie entre las flores de elanor y niphredil, como una visión de los días antiguos.
También es en este lugar donde Aragorn le entrega el Anillo de Barahir a Arwen y donde se juraron fidelidad. Al final de su vida, tras la muerte de Aragorn, Arwen regresa a Cerin Amroth, y allí se acuesta sola y muere, siendo el lugar de su último reposo.
Después de la partida de Galadriel y la marcha de los elfos al oeste al final de la Tercera Edad, Cerin Amroth quedó vacío. En la Cuarta Edad, con la disminución de los Eldar y el fin de la magia de Lothlórien, el lugar perdió su esplendor. Pero en la memoria de los pueblos libres, Cerin Amroth quedó como símbolo de la belleza élfica, la memoria de los Días Antiguos, y el amor inmortal.