Lugar de origen o emplazamiento habitual: Kelvar de Arda, especialmente en Nîn-in-Eilph.
Lengua o dialecto: ninguno; se desconoce si hablaban como las Águilas de Manwë.
Raza de aves acuáticas, creada por Eru y los Ainur junto con todo el kelvar de Arda. De color negro y mas comúnmente de blanco-espuma, vinculadas al Vala Ulmo, (de forma similar a las Águilas vinculadas a Manwë), de mayor tamaño y fuerza que las actuales.
Cisne tenia la traducción de alph (sing), eilph (pl) en sindarin; alqua en quenya; alpa en telerin; alch en avarin y ealc en nandorin.
En la historia del Gran Viaje de los elfos se cuenta cómo los Teleri fueron finalmente llevados a Eldamar por los Cisnes de Ulmo, tras un largo exilio en Tol Eressëa, la Isla Solitaria. Ossë el Maia fue en busca de los Teleri y les enseñó cómo construir una gran flota que pudiera transportar a todo su linaje. Una vez terminados los barcos, los Cisnes de Ulmo, Señor de las Aguas, llegaron procedentes del oeste.
Estas brillantes criaturas, del color blanco de la espuma, volaban describiendo grandes círculos alrededor de las naves de los elfos. Mediante muchas y largas cuerdas, los Cisnes tiraron de la gran flota de barcos élficos hasta llevarla a Eldamar. Entonces, enormes y majestuosos, como si no se hubieran dado cuenta de lo realizado y acudieran a alguna llamada salvaje, partieron. Pero, antes de que sus picos indiferentes soltaran los cabos, aquella blanca bandada engendró en los corazones de los elfos un conocimiento de los vientos que soplan en los mares y un dominio de las blancas naves que los surcan. Se dice que, cuando esos elfos escuchan el sonido del mar en la orilla, todavía oyen el batir de las gigantescas alas de los Cisnes.
Después de esto, los Teleri reverenciaron a los Cisnes, recibiendo el nombre de Elfos del Mar, debido a la gran sabiduría que los grandes Cisnes les concedieron. En el lugar al que los Cisnes de Ulmo los llevaron, los Teleri edificaron una ciudad que se llamó Alqualondë, el “Puerto de los Cisnes”. Allí construyeron los más hermosos barcos de Arda, incluso más hábilmente concebidos que los primeros, y los hicieron con las formas de los Cisnes de Ulmo, con enormes alas blancas y picos de oro y negro azabache.
El Vala Ulmo envió siete grandes cisnes para dirigir a Tuor a Vinyamar, donde encontró un escudo que tenía “un emblema del ala de un cisne blanco”. Tuor ya gustaba de estos pájaros desde su estancia en Mithrim, donde los cisnes parecen haber sido abundantes, ya que su padre adoptivo, Annael, y su gente, tenían al cisne como símbolo. Partiendo de Vinyamar, los siete cisnes de Ulmo se acercaron a Tuor y le ofrecieron una pluma cada uno, que Tuor coloca en la cresta de su yelmo.
Posteriormente, Tuor seria el líder de la Casa del Ala de Cisne o Ala Blanca en Gondolin (Casa del Cisne en los primeros escritos).
Los Teleri no era los únicos en la utilización de la forma de cisne en la construcción de barcos: la proa del barco de Eärendil, Vingilótë “fue construida con forma de cisne”, y los Elfos de Lothlórien fabricaron una embarcación con forma de cisne, tan bien hecha que parecía un verdadero cisne gigantesco. En los primeros escritos de Tolkien se relata como Aulë fue el primero en construir barcos con forma de cisne.
Un tardío manuscrito de Tolkien concerniente a Númenor relata la existencia de unos legendarios cisnes gigantes en la zona de Gorbelgod.
En la Tercera Edad, el emblema de los Caballeros Cisne de Dol Amroth era un barco plateado en forma de cisne, sobre fondo azul marino, y sus marineros usaban barcos con proas en forma de cisne.
Según los escritos, en la Tercera Edad, los cisnes eran sobre todo abundantes en el Nîn-in-Eilph (Flota de los Cisnes), una región pantanosa alrededor del río Glanduin, en Eriador.
Tambien encontramos referencia del cisne en la lista de criaturas vivientes que recita Bárbol al encontrarse con los hobbits Merry y Pippin: “…el cisne el más blanco…”
En un poema sobre Tom Bombadil, Tolkien relata como Tom lleva en su sombrero una pluma de ala de cisne.