17 de febrero de 3019 de la Tercera Edad: El destino de la Compañía y el regreso de Gandalf a Lothlórien

17 de febrero de 3019 de la Tercera Edad Gran Río Anduin y Lothlórien. La Compañía del Anillo continúa su travesía descendiendo por el Anduin, mientras un acontecimiento inesperado tiene lugar en los cielos de Lothlórien. Gwaihir el Señor de los Vientos, transporta a Gandalf, quien ha regresado después de su combate mortal con el Balrog.
17 de febrero de 3019 de la Tercera Edad: El destino de la Compañía y el regreso de Gandalf a Lothlórien

Desde las embarcaciones élficas, la Compañía mantiene un ritmo constante mientras navega hacia el sur. Los miembros, aunque en silencio, están atentos a los sonidos de la ribera. Aragorn manifestó en una breve conversación con nuestro corresponsal: "El peligro acecha en cada recodo del río. Debemos estar preparados para cualquier ataque." Gimli también compartió sus pensamientos: "Estos bosques al este no me inspiran confianza. Parece que los ojos nos vigilan desde las sombras."

Entretanto, Frodo Bolsón observaba las aguas profundas con una mezcla de ansiedad y resolución. "El Anillo se siente cada día más pesado," confesó. Sin embargo, la belleza del paisaje de Lothlórien, aún visible a lo lejos, les proporciona un atisbo de consuelo.

En lo alto de los cielos, un testigo privilegiado pudo observar un majestuoso águila surcando el horizonte. "Era como una estrella dorada en pleno día," relató un elfo guardián de Lothlórien. "Gwaihir, el Señor de las Águilas, llevaba a alguien consigo."

Nuestro corresponsal, presente en Lothlórien, fue testigo del descenso de Gwaihir en un claro cercano al arroyo Nimrodel. "Cuando el águila aterrizó, todos los presentes supimos que se trataba de un acontecimiento trascendental," relató. En silencio, Gandalf el Blanco se presentó ante Galadriel y Celeborn. Su presencia era aún más imponente que antes. "He vuelto," declaró con una voz profunda, "y el tiempo es más corto de lo que pensábamos."

Los elfos que presenciaron la llegada de Gandalf expresaron su asombro. "Jamás creímos que alguien pudiera regresar después de caer en Moria," dijo uno de los guardianes. "Este es un signo de que los poderes más altos están en movimiento."

Aunque la Compañía aún ignora el regreso de Gandalf, su destino está inexorablemente ligado a él. Los peligros que enfrentan en el Anduin son solo el preludio de mayores desafíos. Frodo y sus compañeros continúan su viaje con una mezcla de incertidumbre y esperanza.

Seguiremos informando sobre los movimientos de la Compañía y el papel crucial que Gandalf desempeñará en los días venideros.