¿Qué eran el "miruvor" y las "lembas"?

El miruvor

"-Dale esto -dijo Gandalf buscando en sus alforjas y sacando un frasco de cuero-. Sólo un trago cada uno. Es muy precioso. Es miruvor, el cordial de Imladris que Elrond me dio al partir. ¡Pásalo!
Tan pronto como Frodo hubo tragado un poco de aquel licor tibio y perfumado, sintió una nueva fuerza en el corazón y los miembros libres de aquel pesado letargo. Los otros revivieron también, con una esperanza y un vigor renovados. Pero la nieve no cesaba. Giraba alrededor más espesa que nunca y el viento soplaba con mayor ruido."

( El Señor de los Anillos, "El Anillo va hacia el sur")
Resulta hasta cierto punto chocante el calificativo que Gandalf utiliza para referirse al miruvor ("precioso"); pero lo cierto es que viendo de quien proviene el regalo (Elrond), a quien se lo confía (Gandalf), sabiendo la misión que tenía por delante la Compañía del Anillo, y a la vista del inmediato efecto reconfortante del mismo... quizá "precioso" no sea tan exagerado. Cabe preguntarse, eso sí, si quizá no habría alguna razón más para tenerlo en tan alta estima.

Pocas son las veces que se habla de él en la narrativa, en El Señor de los Anillos aparece únicamente en cuatro ocasiones, y tres de ellas (contando la arriba citada) se limitan al uso que hace Gandalf del mismo para beneficio de la Compañía, lo que implica que no aportan dato nuevo alguno. Solamente en una ocasión nos lo encontramos en un contexto diferente, y a la vez más revelador:

"Yéni únótime ve rámar aldaron,
yéni ve linte yuldar vánier
mi oromardi lisse-miruvóreva
Andúne pella Vardo tellumar."

(El Señor de los Anillos, "Adiós a Lórien")
Se trata de una parte del Lamento de Galadriel en Lórien, del que por suerte Tolkien dejó algunas traducciones. Una de ellas (concretamente de esos cuatro versos) sería:

"Los largos años han pasado como rápidos sorbos de dulce néctar en los grandes salones más allá del Oeste, bajo las azules cúpulas de Varda."
( The Road Goes Ever On )
Por lo que parece, el miruvor esconde detrás un misterio más profundo, cuyas raíces se remontan aún a la tierra de Valinor y, según parece, a la mismísima Varda.

En esta traducción Tolkien utiliza las palabras "de dulce néctar" como equivalencia para traducir lisse-miruvóreva, pero un poco después, en los comentarios que acompañan al poema en ese mismo libro, da una nota al respecto de esa elección que de paso aporta nuevos datos sobre la misteriosa bebida:

"miruvóre. Según los Eldar se trata de una palabra derivada de la lengua de los Valar; el nombre que ellos daban a la bebida que servían en sus fiestas. Su fabricación y el significado de su nombre no se conocía con certeza, pero los Eldar creían que estaba preparada a partir de la miel de las inmortales flores de los jardines de Yavanna, aunque era claro y translúcido. [Puede compararse con el νέκταρ [NT.: néctar] de los dioses Olímpicos. Pero la conexión de esta palabras con ‘miel’ es debida principalmente a los botánicos modernos (aunque Eurípides utilizó νέκταρ μελισσαη, ‘bebida divina de abejas’, como perífrasis poética para ‘miel’). Un probable significado etimológico de νέκταρ es ‘vencedor de la muerte.’ Compárese con αμβροσία [NT.: ambrosía] ‘inmortalidad’, la comida de los dioses.]"
(The Road Goes Ever On)
Parece que la cosa empieza a estar ya bastante más clara. Sin duda una bebida que procede de los propios Valar ha de ser algo en verdad "precioso", aunque solo sea por la escasez con que pudiera haber llegado a la Tierra Media.

Hagamos pues un pequeño resumen de lo que sabemos del miruvor: era un licor tibio y perfumado de color claro y translúcido, y capaz de reconfortar el corazón de quienes lo bebían. Los Valar lo servían en sus fiestas, y se creía que estaba elaborado a partir de la miel de las flores de los jardines de Yavanna.

Sería interesante conocer el significado literal del nombre, pero como el propio Tolkien indica en el fragmento citado arriba: "su fabricación y el significado de su nombre no se conocía con certeza". Sin embargo si nos dejó algún dato más referente al origen Valarin (la lengua de los Valar) del nombre:

"miruvóre, miruvor «un vino o cordial especial». V[alarin] mirubhōzē-; se dice que al principio era una palabra más larga, que contenía el elemento mirub- «vino»."
( La Guerra de las Joyas, "Los Quendi y los Eldar")

Las lembas

"A la mañana, mientras comenzaban a embalar las pocas cosas que les quedaban, unos elfos que hablaban la lengua de la Compañía vinieron a traerles regalos de comida y ropa para el viaje. La comida consistía principalmente en galletas, preparadas con una harina que estaba un poco tostada por afuera y que por dentro tenía un color de crema. Gimli tomó una de las galletas y la miró con ojos dudosos.
-Cram -dijo a media voz mientras mordisqueaba una punta quebradiza. La expresión del Enano cambió rápidamente y se comió todo el resto de la galleta saboreándola con delectación.
-¡Basta, basta! -gritaron los Elfos riendo-. Has comido suficiente para toda una jornada.
-Pensé que era sólo una especie de cram, como los que preparan los Hombres de Valle para viajar por el desierto -dijo el enano.
-Así es -respondieron los Elfos-. Pero nosotros lo llamamos lembas o pan del camino y es más fortificante que cualquier comida preparada por los hombres y es más agradable que el cram, desde cualquier punto de vista."

(El Señor de los Anillos, "Adiós a Lórien")
Sin lugar a dudas, las lembas demostraron ser uno de los regalos más útiles de entre todos aquellos que Galadriel entregó a la Compañía al partir de Lórien. Las lembas fueron el último sustento de Frodo y Sam mientras se acercaban al término de su misión, y no es aventurado afirmar que sin aquellas especialísimas galletas seguramente no lo habrían conseguido.

La cita anterior nos aclara el aspecto y las propiedades del "pan del camino" de los Elfos: unas galletas de harina tostada y color crema por dentro que, además de agradables al paladar (y si no que se lo pregunten a Gimli) aportaban el sustento necesario para todo un día de viaje. Quizá puede parecer que con esto ya está todo dicho sobre las lembas; pero nada más lejos de la realidad, aún hay algunos detalles más que sin duda son de gran interés. Empecemos por su origen:

"Los Eldar dicen que recibieron este alimento de los Valar, al principio de los días del Gran Viaje. Porque estaba hecho de un cereal que Yavanna creó en los campos de Aman, y les envió un poco por medio de Oromë para socorrerlos en la larga marcha."
( Los pueblos de la Tierra Media, "De las lembas")
Por lo que parece los Elfos conocían y utilizaban las lembas desde hacía más tiempo del que podríamos suponer. La primera aparición (y única anterior a la de El Señor de los Anillos) en la narrativa histórica de la que tenemos constancia la encontramos en El Silmarillion , en este caso es Melian la que entrega a Beleg Cúthalion un paquete de lembas cuando éste parte en busca de Túrin:

"-Otro don te daré, Cúthalion -dijo Melian-, que te será de ayuda en el desierto, y también ayudará a quienes tú escojas. -Y le dio una ración de lembas, el pan del camino de los Elfos, envuelto en hojas de plata, y las hebras que lo ataban estaban selladas en los nudos con el sello de la Reina, una oblea de cera blanca moldeada como la flor de Telperion; porque de acuerdo con las costumbres de los Eldalië, sólo a la reina cabía guardar o dar lembas. En nada mostró Melian un más grande favor a Túrin que en este regalo; porque los Eldar nunca antes habían permitido que los Hombres consumieran este pan del camino, y rara vez volvieron a hacerlo."
(El Silmarillion, "De Túrin Turambar")
Hay dos detalles interesantes en este fragmento que aportan nuevos datos. Por un lado tenemos la afirmación de que "sólo a la reina cabía guardar o dar lembas", y por otro el comentario de que "los Eldar nunca antes habían permitido que los Hombres consumieran este pan del camino, y rara vez volvieron a hacerlo". Ambos puntos tienen su explicación; pero empecemos por el segundo:

"Sólo los Eldar sabían cómo preparar este alimento. Se hacía para reconfortar a los que tenían que emprender un largo viaje por las tierras salvajes, o a los heridos cuya vida corría peligro. Los Eldar no se lo daban a los Hombres, salvo sólo a unos pocos a quienes amaban, en caso de gran necesidad.*

[Y la nota al pie reza:]

* El motivo no era la codicia o los celos, aunque en ningún momento hubo una gran cantidad de este alimento en la Tierra Media, sino que a los Eldar se les había encomendado conservar este don para sí y no ponerlo en común con los habitantes de las tierra mortales. Porque se dice que, si los mortales comen de este pan con frecuencia, se cansan de la mortalidad, desean vivir entre los Elfos y anhelan los campos de Aman, adonde no pueden ir."
(Los pueblos de la Tierra Media, "De las lembas")
La excepcional importancia de la misión de la Compañía del Anillo no ofrece dudas; pero esa idea queda aquí reforzada tras saber lo realmente extraordinaria, por inusual, que era la entrega de las lembas a los "mortales". Además, este fragmento nos aclara las dos situaciones en las que se utilizaba las lembas: largos viajes (como ya sabíamos) y alimentar a los heridos de extrema gravedad.

Respecto al primer punto de lo dicho en el pasaje citado de El Silmarillion, nos encontramos con este fragmento:

"Como venía de Yavanna, la reina o la más noble de las mujeres elfas de cualquier pueblo, grande o pequeño, tenía la custodia y el don de las lembas, por cuya razón eran llamadas massánie o besain, la Dama, o dadora de pan."
(Los pueblos de la Tierra Media, "De las lembas")
Recordemos que Melian era la Reina de Doriath, mientras que Galadriel era la Dama de Lothlórien, luego ambas ostentaban el título "dadora del pan" entre sus respectivos pueblos (massánie en Quenya y besain en Sindarin).

El texto titulado "De las lembas", del que se han extraído las citas anteriores, recoge además algunos datos más, quizá de menor relevancia, pero sin duda curiosos. Por ejemplo, comenta que el cereal se cultivaba en lugares guardados y claros soleados, sembrándose en cualquier estación (salvo cuando había heladas); crecía con rapidez y se recolectaba a mano; y de los tallos se hacían unas cestas en las que se conservaba el grano a salvo de plagas o roedores. También resulta interesante como se mantenía el secreto de su elaboración, restringido a unos pocos:

"Desde la espiga hasta la galleta a nadie se le permitía tocar el grano, salvo a las mujeres elfas llamadas Yavannildi (Ivorwin para los Sindar), las doncella de Yavanna; y el arte de hacer las lembas, que habían aprendido de los Valar, era un secreto entre ellas, y así lo ha sido siempre."
(Los pueblos de la Tierra Media, "De las lembas")
Para finalizar, hay que hacer alguna referencia al significado de su nombre: lembas es su forma Sindarin, que significa "pan de viaje", en tanto que en Quenya se le daba el nombre de coimas, "pan de vida".


© Las FAQ de ElFenómeno, 2002