Telperion era el mayor de los Dos Árboles de Valinor, llamado el Árbol Blanco, que emitía una luz plateada sobre el dominio de los Valar. El haz de sus hojas eran de un verde oscuro, y su envés plateado, y sus ramas fueron engalanadas con blancas flores brillantes que emitían una lluvia de rocío de luz plateada. Su corteza era de color blanco y era similar a la seda. Su tronco era más proporcionado y esbelto, y sus ramas, más gruesas, enmarañadas y densas que las de su árbol-hermano Laurelin.
Laurelin era el más joven de los Dos Árboles de Valinor, llamado el Dorado, que emitía una luz dorada sobre el dominio de los Valar. Las hojas de Laurelin son de color verde tierno, con bordes dorados, y sus ramas fueron engalanadas con brillantes flores amarillas que emitían una lluvia de luz dorada. Su corteza era muy suave y destacaba la gran belleza de su tronco con respecto a la forma.
Ambos árboles irradiaban luz de forma periódica en intervalos de siete horas, hecho que fue aprovechado por los Valar para medir el tiempo. La primera hora que Telperion resplandeció, ya que él fue el primero en brotar y desarrollarse, fue conocida como “la hora de apertura” y los Valar no la incluyeron en el cómputo del tiempo, pero a partir de ella dieron inicio a las Edades de los Árboles. Mientras Telperion brillaba, Laurelin se mantenía “apagado” y, al menguar el primero, el segundo comenzaba a brillar, mezclándose ambas luces durante una hora. Los días durante las Edades de los Árboles tenían por tanto una duración de doce horas: en cinco de ellas brillaba Telperion y en otras cinco lo hacía Laurelin, en una hora intermedia menguaba el primero y segundo crecía, y en la última hora del día se repetía este mismo proceso a la inversa.
La luz que irradiaban dio luz a las tierras de Valinor ya que la anterior fuente de luz de Arda, (las dos grandes lámparas, Illuin y Ormal) fueron derribadas por el Vala renegado Melkor; y se iniciaron así las Edades de los Árboles en la cronología de Aman. (Edad de la Oscuridad y Edad de las Estrellas en la cronología de la Tierra Media)
Los Dos Árboles de Valinor existieron hasta la llegada del trágico acontecimiento conocido como el Oscurecimiento de Valinor. Finalizada la condena de Melkor, este fue liberado y aliándose con la araña Ungoliant, llegaron en secreto a Valinor e hirieron de muerte a los Dos Árboles. Con la última flor de Telperion y el último fruto de Laurelin, los Valar crearon la Luna y el Sol.
Por fortuna, este no fue el último de los Árboles Blancos, ya que, con anterioridad, Yavanna creó un segundo árbol, Galathilion, idéntico a Telperion salvo que éste no emitía luz propia, como regalo para los Elfos que posteriormente se desplazaron y establecieron en Aman, (ya que estos mostraron una especial adoración por el árbol Blanco), y colocó a Galathilion en la ciudad de Tirion donde los Vanyar y Noldor moraron juntos al principio.
Uno de los vástagos de Galathilion, llamado Celeborn, fue plantado en la isla de Tol Eressëa. Posteriormente, en la Segunda Edad del Sol, un vástago de Celeborn fue entregado como regalo a los Númenóreanos, Nimloth, el Árbol Blanco de Númenor. Nimloth perduró por largo tiempo, pero cuando Sauron tomó el mando de la isla, el rey Ar-Pharazôn lo taló. Por suerte, Isildur logró salvar un fruto de aquel árbol. De este fruto provinieron más tarde los sucesivos Árboles Blancos de Gondor.
Por desgracia, y a diferencia de su Árbol-hermano Telperion, de Laurelin ningún vástago pudo ser salvado, por lo que no quedó en toda Arda nada parecido a Laurelin el Dorado, excepto quizás en Hyarrostar, una de las seis regiones que formaban el reino de Númenor, donde crecía un árbol conocido como Laurinquë que poseía largos racimos de flores amarillas; los Númenóreanos, debido a las historias que habían oído sobre Laurelin, creían de forma errónea que Laurinquë provenía de sus semillas.
Según la leyenda, en el futuro habrá una Batalla Final (la Dagor Dagorath), en el cual Morgoth será definitivamente derrotado y el mal desterrado, y la luz de los Silmarils será usada para crear los Dos Árboles una vez más.
En Gondolin había una representación de cada árbol, fabricadas por el mismo Turgon: la de Telperion, de nombre Belthil construida con plata, malaquita y perlas de la Bahia de Balar, se levantaba en el quinto portal de la ciudad, mientras que la de Laurelin, de nombre Glingal, hecha de topacio y oro, estaba emplazada en el sexto.
Por último, mencionar como curiosidad que tanto los Elfos como los Númenóreanos honraban a los Árboles en sus respectivos calendarios: el cuarto día de la semana de seis días de los Elfos fue llamado El Día de los Dos Árboles de Valinor, “Aldúya” en la lengua Quenya. Cuando los Númenóreanos establecen su propio calendario, mantuvieron esta mención en honor a Nimloth, como recuerdo del Árbol Blanco de los Valar. Tan solo cambiaron el nombre de “Aldúya” a “Aldëa”, “El Día del Árbol”.