Conflictos y rivalidades: Dunlendinos, Freca y Wulf en la Historia de Rohan
En la película "La Guerra de los Rohirrim", uno de los aspectos que promete ser de los más interesantes, es el enfoque en los enemigos históricos de los Rohirrim: los Dunlendinos. Este pueblo, despojado de sus tierras ancestrales, mantuvo durante siglos un resentimiento profundo hacia los habitantes de Rohan. A través de figuras como Freca y Wulf, la historia de esta enemistad adquiere un rostro humano, complejo y trágico. Este artículo se adentra en la historia de los Dunlendinos y revela cómo las acciones de Freca y Wulf desencadenaron uno de los conflictos más sombríos en la historia de Rohan.
Los Dunlendinos: Origen, Historia y Cultura
Los Dunlendinos, también conocidos como Gwathuirim, eran un pueblo humano que habitaba la región de Dunland, situada al oeste de las Montañas Nubladas y al sur de Rohan. Su nombre, "Dunlendinos", deriva de "Dunland", que significa "Tierra Oscura" o "Tierra de las Colinas", en referencia a su geografía y a la complexión de sus habitantes.
Los Dunlendinos descendían de los hombres que, durante la Primera Edad, no viajaron a Beleriand y permanecieron en las tierras del oeste de la Tierra Media. Se cree que estaban emparentados con la Casa de Haleth, uno de los tres linajes de los Edain. Estos grupos se asentaron en los valles de las Ered Nimrais (Montañas Blancas) y en las regiones de Minhiriath y Enedwaith. Con el tiempo, algunos migraron hacia el norte, estableciéndose en las Tierras Brunas y en Eriador, donde se convirtieron en los antepasados de los Hombres de Bree.
Durante la Segunda Edad, habitaban los densos bosques a lo largo de los ríos Fontegrís e Isen. La llegada de los Númenóreanos, que talaron extensivamente estos bosques para obtener madera, generó tensiones y conflictos. Los Dunlendinos resistieron la expansión númenóreana, pero finalmente fueron desplazados hacia las Tierras Brunas y Dunland.
En la Tercera Edad, los Dunlendinos se establecieron en Dunland y en los valles septentrionales de las Montañas Blancas. Eran principalmente agricultores y pastores, manteniendo una cultura y lengua distintivas. La Gran Peste de 1636 T.E. despobló gran parte de Calenardhon (futuro Rohan), lo que permitió a los Dunlendinos migrar hacia esas tierras. Sin embargo, en 2510 T.E., tras la Batalla del Campo de Celebrant, Calenardhon fue cedido a los Éothéod, quienes fundaron el reino de Rohan y expulsaron a los Dunlendinos, generando un profundo resentimiento que perduró durante siglos.
Los Dunlendinos eran generalmente altos, de piel cetrina y cabello oscuro, rasgos que contrastaban con los Rohirrim, conocidos por su cabello rubio y piel clara. Su lengua era distinta del Oestron (Lengua Común) y estaba relacionada con la de la Casa de Haleth. Algunos Dunlendinos también hablaban una forma rudimentaria de Oestron.
La relación entre los Dunlendinos y los Rohirrim estuvo marcada por conflictos. Los Dunlendinos consideraban a los Rohirrim como invasores que usurparon sus tierras ancestrales. Este antagonismo fue explotado por Saruman durante la Guerra del Anillo, quien reclutó a los Dunlendinos para atacar Rohan. Participaron en la Batalla del Abismo de Helm, pero fueron derrotados. Tras la batalla, los Rohirrim permitieron a los Dunlendinos sobrevivientes regresar a sus hogares, con la condición de cesar las hostilidades y retirarse al oeste del río Isen.
Después de la Guerra del Anillo, las relaciones entre los Dunlendinos y los Rohirrim mejoraron bajo el reinado del rey Éomer y el rey Elessar. Se establecieron acuerdos que permitieron a los Dunlendinos asentarse en ciertas áreas de Rohan a cambio de tributos, iniciando una era de paz entre ambos pueblos.
Freca: El origen de la enemistad
Freca era un hombre poderoso y acaudalado que ejercía control sobre un extenso feudo en el curso inicial del río Adorn. Aunque afirmaba ser descendiente del rey Fréawine, muchos de sus contemporáneos sospechaban que su linaje tenía fuertes lazos con los Dunlendinos, lo cual quedaba reflejado en la apariencia y cultura de los habitantes de sus tierras. Estas sospechas se acentuaban por las características físicas de Freca: un hombre gordo, de cabello oscuro y piel cetrina, rasgos típicos de los Dunlendinos.
A pesar de estas dudas sobre su origen, Freca gozaba de un importante estatus en Rohan, siendo miembro del consejo del rey Helm. Su riqueza y la fortaleza ubicada en el nacimiento del Adorn consolidaban su influencia, pero también despertaban desconfianza entre los Eorlingas.
En el año 2754, Freca acudió a una reunión en Edoras, acompañado de un batallón de sus vasallos, para exigir que su hijo Wulf se casara con la hija menor del rey Helm. Aunque pretendía mostrar fuerza, su tono arrogante y su actitud desafiante lo llevaron a un enfrentamiento verbal con el monarca. La reunión, aparentemente tranquila, culminó de forma drástica cuando Helm, enfurecido, golpeó a Freca con tal fuerza que lo mató. Este acto, que le valió a Helm el apodo de "Mano de Hierro", marcó un punto de no retorno en la relación entre Rohan y los vasallos de Freca.
El supuesto origen mixto de Freca —siendo parte rohir y parte dunlendino— fue un factor crucial en la creciente tensión. Mientras que sus tierras albergaban una población culturalmente híbrida, su lealtad y la de sus seguidores eran, al parecer, ambiguas. La muerte de Freca desató el resentimiento de su hijo Wulf y de sus vasallos, quienes se alzaron en armas contra Rohan pocos años después.
Wulf: El vengador de los Dunlendinos
Al igual que pasaba con Freca, se decía que Wulf era un hombre de origen mixto, descendiente tanto de los Rohirrim como de los Dunlendinos, lo que le otorgaba un lugar ambiguo en la sociedad de Rohan. Aunque era un señor feudal poderoso con extensos territorios a ambos lados del río Adorn, tanto él como sus vasallos eran vistos con desconfianza por los Eorlingas debido a sus lazos con los Dunlendinos. Wulf heredó no solo las tierras y la influencia de su padre, sino también el resentimiento acumulado por las tensiones históricas entre ambos pueblos.
Físicamente, Wulf reflejaba esta mezcla de linajes: era un hombre robusto, con rasgos que evidenciaban su herencia dunlendina, como el cabello oscuro y la piel cetrina, pero también poseía la fortaleza y determinación de los Rohirrim. Tras la muerte de su padre a manos del rey Helm Mano de Hierro en 2754, Wulf juró venganza. Desde su fortaleza en el Adorn, comenzó a preparar a sus vasallos para la guerra, cultivando alianzas con los Dunlendinos y atrayendo la ayuda de los Corsarios de Umbar, quienes buscaban debilitar a Gondor por el oeste.
En el año 2758, Wulf lideró un ataque masivo contra Rohan, aprovechando el caos del Largo Invierno. Su campaña estuvo marcada por varias victorias decisivas como fue el caso de la victoria en los Vados del Isen, donde derrotó al ejército de Helm, consolidando su dominio sobre el oeste de Rohan. O también la conquista de Isengard y Edoras. Tras cercar Edoras y matar a Háma, hijo de Helm, Wulf tomó la ciudad y se proclamó rey de Rohan. Desde el trono de Meduseld, gobernó durante el crudo invierno, aunque su reinado estuvo plagado de dificultades debido al hambre y las duras condiciones climáticas.
Pero mientras Wulf consolidaba su poder, los Rohirrim no se rindieron. Con la llegada del deshielo, Fréaláf, sobrino de Helm, descendió de las Montañas Blancas con un pequeño ejército y tomó por sorpresa a Wulf y sus fuerzas debilitadas. Wulf murió en el asalto final a Edoras, poniendo fin a su breve y controvertido reinado.
El ascenso y caída de Wulf reflejan las tensiones históricas y culturales entre los Rohirrim y los Dunlendinos. Por otra parte, la inclusión de los Dunlendinos, Freca y Wulf en la película “La Guerra de los Rohirrim” promete añadir profundidad a la narrativa de la película. Estos personajes representan no solo el choque de culturas, sino también la tragedia de una historia marcada por el odio y la venganza.