Vingilot era, según se cuenta en El Silmarillion, el más bello de los navíos, y fue construido por Eärendil con la ayuda de Cïrdan, para lo cual utilizaron madera blanca de abedul de Nimbrethil. Tenía los remos dorados y sus velas eran como lunas de plata.

Fue con este navío con el que Eärendil comenzó a adentrarse en el mar, a partir del año 534 de la Primera Edad, para buscar a sus padres Tuor e Idril. En uno de estos viajes, cayó sobre la proa de su barco un gran ave blanca, que a la mañana siguiente se convirtió en Elwing, la esposa de Eärendil. Tras escuchar de su amada los hechos acaecidos en la que se llamó la Tercera Matanza de los Hermanos, y cómo sus hijos Elrond y Elros habían sido hechos prisioneros, Eärendil decidió poner su nave rumbo a Valinor para pedir a los Valar perdón e implorar su ayuda para luchar contra Morgoth.

De esta forma, en el año 542 de la Primera Edad, Vingilot consigue llegar finalmente a las costas de Valinor. Y en Valinor, el navío fue consagrado y lo cargaron hasta la margen extrema del mundo, desde donde el barco pasó por las Puertas de la Noche, levantado hasta el cielo. Desde este momento, Eärendil se dedicó a viajar por los cielos con su barco Vingilot, con el Silmaril prendido en la frente, por lo que recibió el nombre de Gil Estel y se le veía con más frecuencia por la mañana o al atardecer.

Cuando Morgoth, en un último intento desesperado por vencer al Ejército de los Valar, sacó a los grandes dragones alados en la Guerra de la Cólera, Eärendil llegó con su barco Vingilot surcando los cielos acompañado de las aves y consiguió derrotar a Ancalagon el Negro, que en su caída tras la muerte destruyó las torres de Thangorodrim.