Tar-Aldarion

Raza o especie: Númenóreano

Nacimiento: abril de 700 SE

Muerte: 1098 SE

Padres: Tar-Meneldur y Almarian

Casado con: Erendis

Hijos: Tar-Ancalimë

Hermanos: Ailinel y Almiel

Grupos: Reyes de Númenor, Gremio de Aventureros

Objetos: Númerrámar, Eämbar, Palarran, Hirilondë

Otros nombres: Anardil; Anardilya

Tar-Aldarion, hijo primogénito de Tar-Meneldur y Almarian, fue el sexto Rey de Númenor. Su reinado duró 192 años, desde el 883 hasta el 1075 de la Segunda Edad.

Cedió el cetro a su hija en 1075 y murió en 1098 de la Segunda Edad.

Aunque su "verdadero nombre" era Anardil, desde joven se le conoció como Aldarion, debido al gran interés que demostraba por los árboles. Plantó grandes bosques para poder proveer de madera a sus astilleros y fue un gran marino y carpintero de barcos gracias a las enseñanzas de Círdan. Navegó con mucha frecuencia a la Tierra Media y se hizo gran amigo de Gil-galad.

Aldarion fue un hombre de ojos azules, de gran estatura, fuerte y vigoroso de mente y de cuerpo, de cabellos dorados como su madre, pronto para la risa y generoso, pero más orgulloso que su padre y más inclinado a hacer su propia voluntad.

Desde joven, Aldarion se sintió muy atraído por el mar. Aprendió a remar y a manejar las velas en casa de su abuelo Vëantur. Fue también su abuelo quien le llevó por primera vez a la Tierra Media en el año 725 de la Segunda Edad, para celebrar su edad de hombre (25 años). De este primer viaje de Aldarion no se sabe mucho, excepto que se hizo amigo de Círdan y Gil-galad, recorrió Lindon y el oeste de Eriador. Cuentan las historias que Aldarion retrasó su vuelta porque quería aprender de Círdan lo máximo posible sobre la construcción y administración de navíos y sobre la construcción de diques. Al regresar a Númenor, su abuelo Vëantur le regala su barco Númerrámar, y su padre, Tar-Meneldur, descubrió que su hijo se había enamorado del mar y de la navegación.

Tres años más tarde, Aldarion volvió a marcharse a Lindon y estuvo tres años fuera. Poco tiempo después, emprendió un nuevo viaje de cuatro años de duración, en el cual exploró las costas al sur de los Puertos Grises, pasando por las desembocaduras de los ríos Brandivino, Gwathló e Isen, rodeando el cabo de Ras Morthil, para llegar hasta la gran bahía de Belfalas y las montañas de Amroth. Regresó a Númenor con 39 años, trayendo consigo regalos de Gil-galad para su padre, pues al año siguiente (740 SE) Tar-Elendil le cedió el cetro a Tar-Meneldur, quien se convirtió en el Quinto Rey de Númenor. 

Entre los años 750 (cuando se funda el gremio de los Aventureros) y el año 800 de la Segunda Edad, realiza viajes a la Tierra Media para poder obtener madera para la construcción de barcos, estableciendo en esa época el puerto de Vinyalondë en la desembocadura del río Gwathló. En el año 806 de la SE se vuelve a embarcar en un periplo de 7 años, del cual regresa con oro y plata en el año 813 de la Segunda Edad. 

Entre el 816 y el 820 de la Segunda Edad realiza su primer viaje con el Palarran del cual regresa con regalos para su madre y un diamante para Erendis, quien le llevó la Rama del Retorno y con esto consiguió que Aldarion la mirara con amor. Tras 4 años en Númenor, en el 824 el hijo del rey parte nuevamente con una expedición de 7 barcos para buscar madera y regresa cinco años más tarde (en el 829 de la Segunda Edad), con dos barcos más construidos en Vinyalondë. 

Ese mismo año vuelve a hacerse a la mar con tres barcos y los aventureros más audaces, después de que su padre cerrara los astilleros de Rómenna y prohibiera la tala de árboles para la construcción de navíos en Númenor. En Vinyalondë reparó sus barcos y desde allí partió hacia el sur siguiendo la costa. Cuando habían pasado 10 años, Erendis desesperó y pidió licencia a la reina para regresar a las Tierras del Oeste. Aún pasaron 4 años hasta que Aldarion regresara. En su periplo, consiguió escapar a duras penas de naufragar en el Harad, y al regresar al norte, encontró que Vinyalondë había sido arrasado por tormentas y saqueado por hombres hostiles. Los vientos del Oeste le impedían cruzar el Gran Mar y su barco fue alcanzado por un rayo, pero finalmente regresó a Númenor tras 14 años de ausencia. 

Esta vez Aldarion permaneció en la isla 20 años. Se dedicó a replantar los árboles talados y reparar puertos. En uno de viajes por el Oeste se encontró con Erendis y le pidió perdón por dejarla sola tanto tiempo y visitó a Beregar, el padre de ella, para comunicarle sus intenciones de comprometerse. Ella sabía que tendría que disputarse con el mar el amor de Aldarion, y se hizo de rogar. El la cortejaba asiduamente, y la seguía por todas partes. Descuidó el Gremio de Aventureros y no taló más árboles para construir barco, sólo los plantaba. Aldarion persuadió a Erendis para que navegara con él en el Eämbar, para la celebración de los 100 años del Gremio de Aventureros. Al poco, él reemprendió las obras de Rómenna, levantar rompeolas y construyó Calmindon, la torre de la Luz en Tol Uinen- Y entonces le pidió matrimonio. Antes de dar su respuesta, le pidió que viajara con ella por tierra. Le dijo que querría vivir en Enerië, pero que no quería compartirlo con Uinen. Tras este viaje, la reina hace llamar a Erendis de vuelta a Armenelos y ella se reconcilia con Aldarion y finalmente se comprometieron. Erendis decidió lucir desde entonces el diamante que Aldarion le regaló sujeto con una redecilla de plata en su frente. Pero un dia, Aldarion sintió nuevamente la nostalgia por el mar. Discutió con su padre y le propuso a Erendis casarse y navegar juntos, pero ella se negó. Le dijo que viajara él y puso la rama de oiolairë en la proa del Palarran y asi, el hijo del rey se hizo nuevamente a la mar en el 863 de la Segunda Edad. 

Esta vez transcurrieron seis años hasta su regreso a Númenor y durante su viaje descubrió que el puerto de Vinyalondë había sido totalmente arrasado por las tormentas, que los Hombres de las costas estaban empezando a temer a los Númenóreanos o se habían vuelto abiertamente hostiles y escuchó rumores sobre un señor de la Tierra Media odiaba a los Númenóreanos. Las inclemencias del tiempo no ayudaron y cuando al fin logró divisar el Meneltarma, comprobó que el orolairë se había marchitado. Corría el año 869 de la Segunda Edad. 

Aldarion y Erendis se casan en Armenelos en el 870 de la Segunda Edad y emprenden un viaje por Númenor, llegando a Andunië donde Valandil les preparó la última fiesta. A ésta acudieron los Eldar, trayendo flores (elanor y lissuin) y trovadores y se sentaron con los Hombres en la mesa. Entre los presentes, los Elfos le trajeron a Aldarion un árbol  joven de corteza blanca como la nieve y de tallo recto, fuerte y flexible como el acero. A Erendis, un par de pájaros grises con picos y patas doradas. 

Regresaron a Armenelos, donde establecieron su hogar y dos años más tarde Erendis concibió a su hija, Ancalimë, que nació en el 873 de la Segunda Edad. En esa época, Aldarion siguió plantando árboles y reanudaron los trabajos en Rómenna, donde se construyó Turuphanto, la Ballena de Madera. Y cuando Ancalimë tenía casi cuatro años, Aldarion le dijo a Erendis que quería regresar al mar. Le pidió 2 años y ella se los concedió a regañadientes. El barco fue llamado Hirilondë y abandonó Númenor sin la bendición del rey y sin oiolairë. 

Después de que Ancalimë cumpliera 9 años, el Hirilomë regresó, en el año 882 de la Segunda Edad. Aldarion entrega una carta de Gil Galad a su padre y parte en busca de su mujer e hija, acompañado de dos de sus hombres: Henderch y Ulbar. La acogida de Erendis fue seca, por lo que Aldarion regresa temprano a la mañana siguiente, tras ver a su hija. Mandó talar todos los árboles de su casa, excepto el que le regalaron los Elfos, al que también llamó Ancalimë. Tar-Meneldur, tras leer la carta de Gil Galad comprende que su hijo tiene más conocimientos de la situación y que podrá gobernar mejor y hace llamar a Aldarion y le cede el trono. En ese momento, se dispone que Ancalimë regrese a Armenelos y Erendis decide no hacerlo. 

Aldarion fue coronado rey en el año 883 de la Segunda Edad, y según se cuenta marchó a la Tierra Media sin dilación, ese mismo año o el siguiente. En esa ocasión, en la proa del Hirilondë no había oiolairë, sino la imagen de un águila con pico de oro y ojos brillantes, regalo del propio Círdan. Se cuenta que siguió viajando con frecuencia a la Tierra Media durante los siguientes años: recorrió el río Gwathló y tuvo la oportunidad de conocer a Galadriel en Tharbad. Su último viaje lo realizó alrededor del año 985 de la Segunda Edad. 

Tar-Aldarion modificó la ley de sucesión de Númenor, dando la oportunidad de reinar a las mujeres. Según la nueva ley, el mayor de los hijos del Rey, cualquiera que fuera su sexo, recibiría el cetro. De esta forma, Tar-Ancalimë se convirtió en 1075 TE en la Primera Reina de Númenor. Sin embargo, el cambio de esta tradición y ley no sentó nada bien a los descendientes de la Línea de Elros, en especial a quien hubiera correspondido ser el Heredero según la vieja ley: Soronto, hijo de su hermana Ailinel.

Aldarion murió en el año 1098 de la Segunda Edad, cuando contaba con 398 años.